Siento su respirar y el olor de su fragancia, me vuelve loca su cuerpo y la delicadeza de tocar cada parte de mi cuerpo, uuufff… Es un hombre lleno de sorpresas porque también me encanta el lado posesivo que tiene.Deslicé la camisa de sus hombros y lentamente moví mis labios sobre su cuerpo, acariciando y lamiendo cada pieza.Apreté los dientes en el pezón de mi hombre, y un gemido salió de su garganta. Un gemido y un suspiro al mismo tiempo me mostraron que definitivamente le gustaba lo que hacía. Aumenté un poco la presión, chupando al mismo tiempo, y sus manos subieron a mi cuello.—Amor, que haces mi… —se podía apreciar que él había perdido el tono grave de su voz.Me moví lentamente hacia el otro pezón y, ignorando por completo lo que acababa de oír, hundí los dientes aún más profundamente. Lleva ambas manos a mi cuello por unos segundos, me suelta al clavarme en su cuello para luego abrir camino en su pecho duro con mis dientes, me deslizaba cada vez más bajo hasta que me arrod
(...)El fin de semana ha terminado y mi presencia en la empresa ha llegado. Al principio se me había prohibido, pero luego le dejé en claro a Harry que ambos debíamos poner muchas cosas en su lugar y una de ellas es poner las cartas sobre la mesa y la otra es que tengo que hablar con Emilio sobre el tema de que me iré de luna de miel.Para Harry fue difícil, no quiere separarse de mí en ningún momento, eso me gusta, pero no puedo permitir que el deje sus obligaciones, no ahora.Subiendo el ascensor me concentro en las palabras adecuadas que debo decir, y de cómo controlar al hombre que quiere tenerme las veinticuatro horas para él.Al final las puertas del ascensor se abren de par en par, salgo de ahí y con mi cartera en mi mano y el portafolio en el otro me encamino hacia esa oficina. Mis piernas tiemblan, es probable que la mayoría pudiese notar mi tono de piel; bronceada y radiante, eso es lo que mi tía me dijo antes de que saliera de la casa.Llegando al escritorio de la secretar
***Saliendo del centro comercial me apresuro para poder detener un taxi, hoy no me pude venir en mi moto porque Harry me traía en su auto y la verdad que en este momento no quiero esperarlo.—Alexandra… Te llevo mi ciela —me detengo en seco, esa voz la reconozco—, ¿podemos ir al fin del mundo?—Alexis, ¡por Dios! —doy un grito al cielo al verlo, corro hacia él y sin importarme que está dentro del auto me lanzo atreves de la ventana—, mi vida, te he extrañado mucho—lo último salió en un hilo de voz, las emociones me han ganado.—Puedes subir, no quiero que algún atrevido pase tocándote las nalgas —me suelta una palmada en mi mano, me alejo de él y con las lágrimas en mis ojos asiento—. No llores mi amor.Rodeo el auto y me apresuro a entrarme, mis planes han cambiado, no puedo dejar a mi amigo, él ha aparecido y valoro mucho que me haya venido a buscar, eso significa que soy importante para él.—¿Dónde me llevas?—Te busqué en tu casa, pero tu tía me dijo que estarías en la empresa po
***Luego de desahogarnos el uno al otro, Alexis detiene el auto, reaccionando, ya que las cosas se estaban yendo por otro rumbo, según él ha venido a verme y no a discutir de lo que siente o no.Él se disculpa por ser un completo idiota, mientras que yo me mantengo firme, no quiero bajar la guardia porque de una u otra forma él se puede aprovechar de eso. Sus sentimientos me afectan, no es algo normal para mí y menos para él, dentro de mi interior desea que todo sea como antes; sin confusiones y enredos.Su anécdota de cómo le ha ido en su nueva vida me sorprende, no por lo que él puede hacer o lograr, todo tiene que ver con las relaciones que ha tenido con mujeres, todo eso para comprobar que jamás tuvo atracción sobre ellos. Las fotos que me está mostrando son pruebas que garantizan lo que él siente.Sin querer una sonrisa se dibuja en mi rostro, y no es por burlarme de él, no… Me causa risa su inmadurez, ¡se tuvo que acostar con varias chicas para comprobar que le gustan las mujer
***Quedando en mi habitación empiezo a tener un sentimiento que hace que mi corazón se estruja, me siento terrible, siento mi cuerpo pesado y lo único que deseo es dormir, creo que es por todo el “medicamento que me han suministrado”, como me estorba este yeso, ahora no podré caminar bien, pero tengo que ser positiva y hacer que no me estanque para lograr lo que quiero y anhelo.Sin exagerar, siento que toda esta habitación se ha vuelto oscura, una oscuridad que me abriga como si la necesitara con mucha urgencia. Parpadeo lentamente y cada parpadeo es un deseo de no ver nada.¿Por qué me siento así?—Te dejaré descansar y mañana vendré a verte —Alexis, agarra el edredón y empieza a cubrir mi cuerpo—, no pienses que te dejaré porque no lo haré y menos cuando estás decidida a no querer llamar a tu supuesto esposo.Ignoro eso, no quiero abrir mi boca para nada, solo quiero cerrar los ojos y despertar cuando pueda caminar. Alexis me dice que no quiere irse porque tengo que tener a alguie
“Presiento que me queda poco tiempo para que el yeso que tengo en mi pie se quite por completo”, ¡eso es lo que deseo! Todo es para que mi amado no se sienta mal, le digo que todo tiene su sacrificio, que luchemos por lo que sentimos, principalmente, por el odio que su madre siente por mí.Sin querer, Harry siempre está en mi mente constantemente y no negaré que me pondré triste cuando se tenga que ir a la empresa, pero a la vez lo alentaré diciendo que la cercanía que tenemos ahora es para aprovecharla al máximo. Ah, Harry es todo para mí, es el chico que siempre he soñado, es un alma de buen corazón… Me encanta cuando siempre trata de ponerse siempre delante de mí para cuidarme, es que ese lado protector es lindo, y eso que él sabe que soy de las mujeres que no se dejan y menos se quedan con los brazos cruzados.En un par de minutos vuelvo a mi realidad al escuchar la insistencia de Harry decirme que mi tía ha llegado y que nuestro amigo Harper lo está llamando.Asiento con una sonr
***¡Dios mío! ¿Qué es eso? ¿Estoy soñando que tengo ganas de ir al baño? Mejor sigo durmiendo. ¿O estoy despierta? ¡Qué aturdimiento! Sí. Definitivamente, tengo frío y también sueño… Tiro de la fina sábana y me cubro hasta la barbilla, acomodándome mejor en la cama. Qué gustito. Espera, ¿ya es de día? Abro un poco el ojo derecho, el otro se resiste, pegado como está.Aaaahhh… Harry no está, eso quiere decir que está con mi tía o en la empresa, no me puedo levantar porque ahora que recuerdo estoy jodida del tobillo.¿Qué hora es? La persiana casi bajada, lo suficiente para que no entre ni un leve rayo de luz en la habitación. Miro el despertador que tengo en la mesilla, en el lado izquierdo. ¡Oh, no! Le doy un pequeño golpe, lo apago y, desmadejada, intento sentarme medio recta. Me cuesta por el dolor que siento.—Mi niña, tienes que darte un baño —escucho la voz de mi tía cerca.—Buenos días —ignoro la presencia inesperada—, ¿será que tengo permitido dormir un poco más? Por favor, cr
Lanzo un golpe a su pecho y giro la cara. Gruñendo como una loca, batallando sin tregua, hasta que él entiende que verdaderamente no estoy jugando y, con reticencia, me deja libre. Estoy sin aire, frustrada, no porque no quiera, no, estoy así porque esto me puede perjudicar o a él mismo. No quiero ser una de las zorras que él frecuenta.A Harry se lo ve muy perdido y excitado debido a lo que ambos sentimos. Da un paso atrás, tratando de serenarse y pasándose la mano por la nuca. Seguimos mirándonos sin forzar preguntas.—No pensé que fueses miedosa —me recrimina, completamente desconcertado—. Te quiero ardiente, entiende de una vez que soy el dueño de todo, me estoy arriesgando, entiende de una vez que muero por tenerte, estoy…—Deja de decir incoherencias.—No, no soy de las personas que se arrepiente de lo que hacen, te he dicho que me tienes loco, ¡entiende de una vez por todas! Dime ¿Jamás te has sentido atraída por una persona que apenas conoces y has necesitado que te tocara? ¡S