Capítulo 137

Zebela

Mi mente divagaba en los recuerdos, mezclándolos y comparándolos con cada detalle de nuestro viaje de regreso a Luna Roja.

No sabía cuántas horas habían transcurrido, pero el sol ya se estaba poniendo, lo que indicaba que era momento de encontrar un lugar para acampar y recuperar fuerzas.

Estaba adormilada, dejándome mimar por las caricias de la brisa, que me levantaba algunas hebras y traía una sensación fresca a mi rostro, y por el calor y la comodidad que la firmeza del torso de Bastian me proporcionaban.

En esta posición, recostada en su pecho, me era posible escuchar los latidos de su corazón, percibir su respiración calmada y notar los movimientos de sus músculos al tensarse mientras guiaba al caballo.

Me sentía tan segura entre sus brazos, que formaban murallas al estar extendidos para manejar las riendas. Todavía se me hacía irreal que estuviera vivo, conmigo, y que yo estuviera regresando a nuestro hogar.

¿Y si era un sueño?

A mi mente vinieron todas las veces que soñ
Sigue leyendo en Buenovela
Escanea el código para descargar la APP

Capítulos relacionados

Último capítulo

Escanea el código para leer en la APP