Lucian dormía como todas la noches después de un agotador día de trabajo. Dirigir su manada y mantener un seguimiento de las demás era totalmente agotador. Al menos tenía su deliciosa cama para recostarse entre las gruesas mantas peludas y de colores marrones como le gustaba.Sus ojos estaban cerrados, pero aun así pudo sentir como algo se removía por debajo de la colcha acariciándole la pierna. Fue un tacto cálido y delicioso que mandó un estremecimiento por toda su columna e inconscientemente dejó salir el aire de sus pulmones. Quizás ya no estaba tan dormido.El tacto comenzó dirigirse más arriba por la parte interna de sus muslos tocando la sensible zona. Era tan suave tan apenas si hacía algo para detenlo. Esta vez subió por el costado de su ingle para pasar por sobre sus abdominales formados reforzando allí la presión. Lucian esta vez dejó salir un gemido y se removió.Era muy extraño. ¿Qué estaba pasando? Él no tenía a nadie que acompañara su cama desde hacía 10 años. Desde aqu
-He vuelto a casa, Ma-Lukyan no podía creer quien estaba delante de sus ojos y se acercó al recién llegado tomándolo de las mejillas con sus palmas temblando.-¿Aidan? ¿En serio eres tú?- su mirada recorría el cuerpo de su hijo que a pesar de estar frío estaba lleno de vida.El lobo más joven agarró una de las manos de su madre y besó su palma.-Si ma, soy yo, estoy de regreso- sus ojos plateados vacíos enfocaron el hermoso rostro del omega para después inclinar hacia un lado y alzar la mano- Hola pa-Dante estaba tan conmocionado que todavía no reaccionaba. Ante esto Aidan dejó a su madre y se acercó al alfa palpándole la mejilla suavemente.-Así es como me recibes después de 10 años sin verme, puedes ser realmente frío pa- él alzó una ceja.Dante carraspeó su garganta antes de hablar.-Dimitri, encárgate de ese lobo e interrógalo- le dijo a su hermano que todavía no salía del trance al igual que el resto de los miembros de la manada ya que todos habían sabido de la partida del cach
Aidan se quedó pensativo.-Puede que esté interesado en alguien- recordó el encuentro de ellos aquella vez en la puerta del lobo, o podría estarse equivocando. Habían pasado 10 años, muchas cosas podían haber ocurrido y de las que no tenía conocimiento.Los lobos vieron a Lukyan desaparecer subiendo la escalera cuando Aidan se giró hacia su padre con el rostro serio.-No quise alarmar a tu madre por eso no indagué más pero debe haber una razón importante para que hayas vuelto antes de que tu tiempo se haya cumplido- se acercó a su hijo y le puso la mano sobre la cabeza- Estoy feliz que estés de regreso, pero estoy ahora más preocupado ¿puedes controlar tu poder?-Aidan dejó que la mano de su padre acariciara su coronilla a pesar de no sentir nada. Actuaba como su estuviera feliz de volver junto a su familia y no les había dicho nada para que no se sintiera mal, pero en el fondo era solo un cascarón vacío que podía decir lo que quisiera y no le importaría si hacía daño o no. Al menos t
Fallen se dejó caer en el sofá de su cuarto totalmente agotado y se dejó abierta la camisa de la simple ropa que se había puesto después de llegar. El viaje había sido largo de regreso y ni siquiera le había notificado a Dante que estaba de regreso. Solo quería dormir cerrando sus ojos. Estaba tan aturdido que no sintió la presencia que se puso detrás de él y le abrazó por detrás el cuello. Un olor a lirio irreal llenó sus fosas nasales.-Acaso no vas a saludar a tu hermano, que frío puedes ser-Los ojos de Fallen se abrieron y giró el rostro notando el hermoso lobo que estaba allí y le sonreía.-Hola hermano mayor-El lobo se quedó mudo como procesando la presencia que estaba allí y que no era simplemente una ilusión, porque si, lo había reconocido, y solo atinó a agarrar la muñeca del lobo más joven y tirar de él por encima del espaldar del mueble, cayendo este torpemente sobre los cojines. Una mano se puso sobre su mejilla.-¿Aidan? ¿Eres mi hermano Aidan?- su voz era dubitativa co
Lucian entró por la puerta de la mansión de la Manada de Plata con el ceño fruncido. Caminaba con pasos pesados, sus botas hacían eco en el suelo de cerámica. Los lobos que estaban allí se retorcieron y apenas lo miraron, no parecía tener las pulgas felices y un alfa molesto no era nada bueno.Subió las escaleras en busca de Dante. Buscó su olor y definió que estaba en su cuarto y todavía durmiendo pues era primera hora de la mañana. Después del sueño que había tenido y de la noticia que debía ir urgente como que no estaba en sus mejores momentos.Avanzando por el pasillo vio el perfil de un lobo de cabello oscuro junto a la ventana. El pantalón ajustado con la camisa de mangas largas que llevaba lo reconocía, lo había visto antes, al menos la silueta, los rayos de sol entraban por la ventana y bañaban su cuerpo por lo que era complicado verlo a detalle, no importaba. Se acercó con mejor ánimo, ver a Lukyan le refrescaba toda su conciencia. Pasó el brazo por encima del hombro y sonrió
Lukyan se removió en la cama ante las voces a su alrededor y que taladraban su cerebro. Como resultado abrió los ojos de muy mal humor. Y eso no era bueno... nada bueno. En la puerta vio a su esposo que tenía el ceño fruncido y los brazos cruzados delante de su pecho. Eso no era normal en Dante que solía levantarse de mucho mejor ánimo que él todos los días, más bien, se encargaba de alegrarle la mañana si se levantaba como se sentía hoy.El lobo apretó los dientes. Rápidamente reconoció el olor de su hijo y con él el de alguien más. El de Lucian. Así que estaban discutiendo como lobos incivilizados durante la mañana como si nadie en la mansión estuviera durmiendo. Y más él que su esposo lo había tenido despierto hasta muy tarde dado que estaba muy contento por el regreso de su cachorro y eso lo ponía muy enérgico.Sigilosamente se levantó de la cama y se cubrió su desnudez y todas las marcas de besos y mordidas que tatuaban su piel con una de las camisas de Dante y la abrochó sabiend
Y el lobo pelirrojo pudo jurar que dejó de respirar unos segundos. Hasta tosió.-Esa es una muy buena broma Dante. Intenta de nuevo, me cogiste desprevenido- se rioDante alzó la ceja ante esto.-No estoy bromeando Lucian- la sonrisa de Lucian se desvaneció- Aidan despertó hace poco y todavía no tiene control sobre todos sus poderes, además que la habilidad de sanar, que de paso te pertenece, está a punto de despertar. Eso sin quitar que de paso eres tú el mejor capacitado para entrenarlo. Resultados tenemos con el actual líder de la Manada de hierro que lo está haciendo muy bien-Lucian cerró los ojos y respiró profundo.-Todo eso está muy bien y todo lo que tú quieras, pero son historias diferentes. Yo ayudo a los lobos a ser más fuertes y a desarrollar sus capacidades para una situación específica, pero él...--Él viene siendo ahora mismo el lobo más fuerte en todos lo kilómetros a la redonda, si pierde el control como la otra vez estaremos en problemas. Lo más recomendable es que
Aidan caminaba varios pasos detrás de Lucian. Sus manos sujetadas detrás de su espalda recta y su mirada fija en el lobo delante de él. Por su parte los hombros de Lucian estaban sumamente tensos y caminaba refunfuñando a pesar de que la mañana era bastante agradable.El lobo recordaba su salida ocultándoselo a todos los miembros de la manada, incluyendo a Lukyan. De seguro su madre regañaría a su padre y su tío lo haría también. Solo se había ido sin más. Así era mejor. No quería que ellos se encariñaran más con él y lo extrañaran. Por lo que había hecho su presencia lo menos notable posible. Su padre fue el único que lo despidió antes de partir.-En serio me parece increíble que haya terminado así- protestaba Lucian en voz alta, pero para sí mismo- Que un simple cachorro se haya impuesto de esa forma-Aidan solo alzó una ceja. Solo era una crisis emocional del momento lo que le ocurría al lobo. Ya se acostumbraría. Y si no lo hacía, él se encargaría que así fuera.-Ese maldito Dante