Pero enfocándose en el tema de las manos heridas, algo que le costó le respondió.-No amor, esta vez creo que puedes hacerlo tú mismo. Ya despertase mi poder y sería muy necesario que comenzaras a aprender a controlarlo lo antes posible--Tu poder- él murmuró para sí mismo pero el alfa lo escuchó.-Sí, mi poder y es increíble, pero estuve hablando con Litus- le acarició el cuello y la curva descubierta de su hombro- Me explicó que gracias a que mi poder ahora está activo en ti tus células podrán regenerarse solas y tu vida ya no corre riesgo-Hubo un minuto de silencio.-Estás diciendo que...--No vas a morir pronto Aidan. Vas a poder vivir... como un lobo normal, ahora estás a salvo-Los ojos de Aidan se abrieron un poco dejando a la vista el plateado de sus orbes. Los destellos en ellos danzaron y hasta brillaron un poco más al ponerse aguados.-¿Puedo estar más tiempo con mi pa?- Lucian asintió- ¿Y con mi ma?- Lucian volvió a asentir mientras otra vez lágrimas silenciosas comenzaba
-Espera Ah... aquí no--Ya estamos a esta altura, así que qué importa el lugar- un gemido grave se escuchó.-Pero estamos en pleno pasillo. Y si nos ven--Ahuyenté a todos con mi olor. Déjate llevar mi reina--Dante- Lukyan protestó tensándose contra él.El alfa lo tenía contra la pared, sus piernas enrolladas alrededor de su cintura, con el pantalón enrollado en un tobillo, mientras lo penetraba profundamente.-Si mis hijos nos atrapan te voy a castigar duramente- él apretaba la camisa entre sus puños en su espalda casi desgarrando la tela con sus uñas- No te imaginas la vergüenza que pasaría si nos encuentras así.Su boca abierta contra el cuello del alfa intentando contener los gemidos. El olor que exudaba de la glándula de su esposo era delicioso y a pesar de sus protestas se sentía más excitado de lo normal. Quizás porque habían cambiado de ambiente o podían ser atrapados en cualquier momento. Incluso el vientre de Dante estaba empapado por todo el líquido que salía de su miembro
Desagradable.La sensación que recorría su cuerpo era desagradable, como si miles de agujas pincharan su piel una y otra vez. Haciendo que en el fondo doliera.-Duele- jadeó Aidan tambaleándose hacia los lados aun cuando estaba sentado.Últimamente sentía que su cuerpo perdía fuerza con cada despertar de sus poderes. Y ahora con sus emociones era aún peor. Era como si tuviera que estar vigilando su cuerpo y eso lo llegaba a punto de la fatiga. Pero no quería dormir más, pasaba más tiempo en aquella cama que haciendo algo y eso lo frustraba mucho. Sobre todo, porque él se había despertado con un propósito.-No puedo más- cerró sus ojos tomando aire en sus pulmones. Su cabeza cayó hacia adelante.Una mano acarició su cabeza y se desplazó hasta acunar su nuca y fue atraído hacia adelante. Los labios de Lucian pronto estuvieron sobre los suyos en una suave caricia.-Lo hiciste bien- dijo contra ellos con el aliento caliente- Abre la boca-Y Aidan lo hizo. Había sentido que sus manos ya no
Era el primer celo de él. El más difícil y un momento muy vulnerable para los lobos jóvenes. Como ahora que Aidan apenas si sabía que estaba haciendo. Lucian había recuperado el control en sí mismo después de enfocarse en cuidarlo y aun así no podía sentirlo con él a través del vínculo que tenían formados.-Calma, tranquilo- dijo cuándo lo sintió gemir lastimeramente contra su pecho.Sabía que no sería fácil sobre todo esta noche. El primer celo era bastante breve en comparación con los otros, apenas momentos a lo largo de dos o tres días, no se podía definir. Las hormonas en él cambiaban, hasta su olor se trasformaban, su cuerpo se hacía más maduro y se preparaba sexualmente para unirse a su compañero, si lo tenía.Pero Aidan aún no estaba lista para la unión. De seguro lo desgarraría un cuando la necesidad de aplacar el calor de sus cuerpos y de completar el enlace los enloqueciera. Debía ser fuerte y esperar al menos al segundo día para ver si su cuerpo se relajaba lo suficiente pa
Vaya sorpresa.Procesar lo que había dicho Aidan no fue un proceso fácil. Sobre todo, porque supuestamente él que era el que había puesto las trabas desde el inicio había sido el impulsor de toda aquél situación.–¿Qué yo dije qué?– volvió a preguntar como si todavía no pudiera creer lo que su lobo había dicho.Aidan se removió contra él perdiendo fuerzas nuevamente y sintiendo como su conciencia se perdía en la bruma de deseo de su celo. Su cuerpo dolía ante la necesidad y sus músculos se tensaban.–Mira que... eres idiota... para lo que te... conviene– jadeó y mordió el cuello de Lucian sacándole un gemido– Todo es... tu culpa... así que no... me rechaces... otra vez– tras eso soltó un gemido lastimero y envolvió sus brazos alrededor del cuello de su lobo aspirando su fragancia.–Vamos Aidan, dime más detalles– le acarició la espalda. Saber que él era el que al principio lo había reclamado era algo que le daba vueltas en la cabeza. En serio no podía creerlo– Y de que quería saber má
Se incorporó lentamente y llevó dos dedos a la entrada estrecha más abajo pero ya húmeda y palpitante. Lucian podía jurar que con solo la vista podía conformarse, y aun así tenía que ser fuerte. Tenía ganas de enterrarse dentro de él hasta la base y quedarse allí disfrutando del acogedor calor y estreches que se seguro encontraría, pero para eso faltaba poco. Aidan estaría preparado para él y la experiencia sin dudas seria sin precedentes.Sus dedos acariciaron los suaves bordes. Parecían terciopelo. Lo oyó jadear frustrado sabiendo que él quería un poco más y lo complació. Sus dedos empujaron hacia adentro, suave, lento, sin forzar demasiado. El calor que encontró lo hizo jadear a él imaginándose eso alrededor de su pene. Todos los músculos de él estaban tensos.Movió sus dedos de forma circular estimulándolo y lubricando la zona hasta que sus dedos ya no pudieron avanzar más. Su interior se apretaba conforme iba más profundo. Sacó sus dedos para escucharlo gemir y esta vez no era pr
Él es mío...No me la vas a guitar.El gruñido de un lobo resonaba molesto, violento, sacudiéndose porque no podía salir en su interior. Tan fuerte que era incluso incómodo.***Lucian abrió los ojos de golpe y su cabeza palpitó severamente. Se llevó la mano a su frente y corrió el cabello en su rostro encontrando esta zona húmeda de sudor. Acababa de tener un sueño extraño. Apenas podía recordarlo, pero aún quedaba la sensación de una voz grave y algo familiar resonando en su cabeza y que estremecía todo su cuerpo.No entendía que había sido eso. Era extraño, pero por alguna razón se sentía incómodo. Quién demonios era aquello que le estaba reclamando lo que era suyo. Y con tal fuerza que lo hacía ponerse nervioso. Como si fuera incluso más fuerte que él. No pudo evitar gruñir.Abrió los ojos para encontrar el techo de su cuarto encima de él. La luz se filtraba suave a través de las cortinas. Había dormido mucho después de tratar el celo de su joven lobo. Estaba seguro que ya todos e
Litus oyó como la puerta era tocada y abierta a la vez. La había dejado sin seguro sabiendo que Lucian venía, pero lo primero que soltó de sus labios hizo que Lucian frunciera el ceño.-Aidan está en celo- el olor en el cuerpo del alfa era indescriptible y estaba impregnado de tal forma en Lucian que era imposible no saberlo.-Sí, ¿y qué? - dijo Lucian con voz grave.Litus era un alfa también y un lobo fuerte, pero mantuvo un perfil bajo frente a Lucian. El lobo pelirrojo, con su cabello suelto que abrazaba su cuerpo enfundado en un pantalón y una camisa que apenas si se había molestado en abrochar los primeros botones, con su mirada azulada muy brillante y la sombra de sus colmillos a la vista, realmente daba miedo en ese momento.-Su olor es realmente fuerte Lucian. Lo sentí desde ayer- siguió.-Por eso tienes que irte. No puedo permitir que estés cerca mientras Aidan esté en celo- Lucian mencionó con los dientes apretados.Litus alzó una ceja.-¿Tienes miedo que sea yo en que me en