Como todas las mañanas, Pedro se levanta de la cama, se toma una ducha, se pone ropa cómoda, ya que hoy saldría a dar una vuelta con Lucy, y se dirige a la habitación de su amiga. Seguramente la pícara de Lucy debe haber pasado la noche con Jerónimo, ya que habían hecho las paces, algo que lo puso muy contento. Su amiga se merece eso y mucho más, ser feliz el poco tiempo que le queda de vida.Pedro se acerca a la puerta de la habitación de Lucy, golpea varias veces sin tener respuesta. Toma su teléfono e intenta llamarla, pero escucha el sonido del teléfono del otro lado de la puerta. Algo malo está pasando, quizás Lucy se ha descompuesto y necesita su ayuda. Intenta abrir la puerta, y efectivamente, la puerta está abierta.Al entrar a la habitación de Lucy, ve que todas sus cosas ya no están y que hay dos cartas sobre la cama: una con el nombre de Jerónimo y otra dirigida a él. Pedro se sienta en la cama, toma el sobre en sus manos, rompe la que le pertenece a él y comienza a leer la
Ni bien corta la llamada con su informante, Jerónimo llama a uno de sus empleados y le pide que ponga en funcionamiento su avión privado. No hay tiempo que perder, debe convencer a Lucy antes de que sea demasiado tarde. Y después de varios días de preparativos, finalmente salen de viaje.Aún no puede creer que Lucy no se lo haya dicho y que haya tenido que enfrentar esta enfermedad sola. En realidad, nunca estuvo sola; tenía a sus grandes amigos, que con amor y lealtad la apoyaron durante años. Años en los que él pensó lo peor de Lucy, de la mujer que amaba, que nunca dejaría de amar. Se había comportado como un completo imbécil con ella, pero tiene que convencer a Lucy de que se someta al trasplante; así puede hacerla feliz por el resto de su vida y remediar todo el daño que le ha hecho.Está tan sensible, no puede parar de llorar. No ve la hora de llegar a Italia y encontrarse con ella.Después de varias horas de viaje, finalmente llegan a la Toscana, Italia. La imponente ciudad es
Dice una voz a sus espaldas que los hace sobresaltar a los tres. Jerónimo, sin dudar ni un segundo, corre hacia ella y la abraza tan fuerte, llorando desconsoladamente.—Lo siento, Lucy, lo siento mucho, mi amor, nunca debí dejarte sola.—Jerónimo... —dice Lucy emocionándose con la angustia de Jerónimo—. Cómo puede amarlo tanto, Dios mío.—Tienes que operarte, mi amor, hazte el trasplante, por favor.—Si han venido aquí a convencerme, es imposible, no hay vuelta atrás.—Tenemos una larga vida por delante, amor, déjame hacerte feliz. Recuperar tantos años separados por tontos.—Lo lamento, Jerónimo., pero fue una decisión que tomé hace muchos años.—¿Podemos hablar a solas? —le pregunta Jerónimo.—Ahora no puedo, debo ver al médico. No me siento muy bien últimamente.—Te acompañaré, déjame hacerlo, debo hablar contigo —después de tanto vacilar, finalmente Lucy le dijo que sí.Lucy y Jerónimo comienzan a caminar por el jardín, pero a los pocos minutos se sientan en un pequeño banco, por
A medida que los días pasan, y a pesar de estar monitoreada las 24 horas, la salud de Lucy comienza a decaer, por lo que deben trasladarla al hospital.La prensa hizo un festín de todo esto. Hasta ahora la noticia del embarazo no se ha filtrado, pero sí su delicado estado de salud. Han inventado de todo, incluso que tiene SIDA. Jerónimo ya está harto; ni bien Lucy y su bebé estén bien, va a demandar a toda esa miserable prensa, que lo único que ha hecho es deprimirla aún más.El corazón de Lucy está muy mal. Para que ella esté tranquila, está sedada, pero cada minuto que pasa su corazón se debilita más y su pulso baja. Finalmente, Daniel decide llamar a Jerónimo a su consultorio y hablar muy seriamente con él:—Jerónimo, no sé cómo decirte esto.—Dime lo que sea, Daniel. ¿Lucy está muy mal? —pregunta Jerónimo, destruido, al borde de las lágrimas. Hace días que no duerme, no se mueve del lado de Lucy, solo se va a su casa para bañarse, y en ese momento siempre se queda Juan Manuel, par
Lucy Anderson es la modelo más célebre del país. Ganadora de los certámenes de belleza más prestigiosos del mundo, con su imponente cabellera negra azabache y unos ojos azules como el cielo, despierta suspiros entre todos los hombres que la conocen. No obstante, la prensa se ensaña con ella, llevándola a aparecer en las revistas de moda más influyentes y en programas de espectáculos, por su mala conducta, su conducción bajo el efecto del alcohol, su consumo de drogas y sus escándalos con los paparazzi. Nunca, sin embargo, por sus obras de beneficencia, que realiza bajo el seudónimo de Mamá Luisa para mantener su lado humano en el anonimato. Lucy también oculta su deteriorado estado de salud, resultado de una enfermedad congénita del corazón. Los últimos exámenes médicos indican que solo un trasplante podría salvarla, pero ella se niega a la operación y ha prohibido terminantemente a sus padres y médicos que intervengan sin su consentimiento. Por ello, Lucy vive intensamente, rompien
Empieza la Semana de la Moda en Nueva York. Las modelos más exitosas, los diseñadores más renombrados y las marcas más prestigiosas del mundo se reúnen para este evento. Jerónimo, dueño de Empresas Casal, es el invitado de honor. Aunque es la primera vez que asiste, conoce a la mayoría de los presentes. Sabe que Lucy estará allí, y después de cinco años, finalmente la verá de nuevo. No puede predecir su reacción, pero está seguro de que la odia profundamente. Su plan es simple: acercarse a ella, enamorarla y luego destrozarle el corazón como ella hizo con el suyo. Jerónimo está sentado en el bar del hotel, donde se llevará a cabo una conferencia de prensa y más tarde la fiesta de bienvenida. Está bebiendo un daiquiri de frutilla cuando su teléfono comienza a sonar. Lo toma y responde: —Hola, José —saluda Jerónimo a su mejor amigo y vicepresidente de Empresas Casal, quien siempre estuvo a su lado, incluso en los peores momentos. José, miembro de una de las familias más influyentes
La fiesta está repleta de celebridades y modelos de todas las generaciones. Este evento es exclusivamente para beneficiar a la casa de niños con cáncer y enfermedades cardíacas de mamá Luisa. Nadie en la sala sabe quién es ella; mucho menos podrían imaginar que la mujer desconocida es, nada más y nada menos, que Lucy Anderson, la modelo más frívola, escandalosa y hermosa del mundo. Desde hace años, Lucy realiza estos actos de beneficencia en secreto. Solo sus amigos Pedro y Daniel conocen la verdad. Ella ama a los niños de su fundación con toda el alma y sufre inmensamente cuando uno de ellos muere a causa de estas crueles enfermedades. Todo el dinero recaudado en fiestas, subastas y de su propio bolsillo se destina a obtener mejores tratamientos, cirugías y a construir una casa de tránsito para los familiares de los niños de la fundación. Ninguno de los presentes podría imaginar que ella está detrás de esta fiesta. Para todos, siempre ha sido la modelo superficial que solo s
Alerta, alerta de spicy 🌶️🌶️ Esa semana, Lucy tiene varios compromisos: una sesión de fotos para una revista, un desfile para Antonio, un renombrado diseñador y amigo suyo, y una entrevista para un programa de televisión. Sin embargo, horas antes de la sesión de fotos, recibe una llamada de la secretaria del jefe de producción, informándole que ya no necesitan sus servicios. Han contratado a otra modelo en su lugar, probablemente Francesca Boschetto. Lo mismo ocurre con la entrevista. Solo puede asistir al desfile de Antonio, acompañada de Pedro. La primera pasada por la pasarela es en traje de baño, que le queda espectacular y que Jerónimo, desde la primera fila, no puede dejar de admirar. La segunda pasada es en un vestido azul Francia, corto adelante y largo atrás, completamente adornado con perlas, verdaderamente maravilloso. A pesar de sus escándalos, cada vez que Lucy aparece, los hombres no pueden dejar de mirarla. Varios de ellos le han hecho propuestas indecentes con gr