Me quedé sola

Alma Méndez.

Estaba paralizada por la frialdad en los ojos de Marko, su silencio era más elocuente que mil palabras. Sentí como si el mundo se desmoronara a mi alrededor, incapaz de comprender cómo Mauro pudo difamarme de esa manera. No había hecho nada para merecer tal traición.

Me invadía un torbellino de emociones. No podía creer que Mauro me hubiera utilizado tan despiadadamente, manipulándome como un títere en su venganza contra su propio hermano. Y lo peor de todo, había cruzado la línea más sagrada al abusar de mi cuerpo y ahora hacerme quedar como una infiel.

Aunque no sentía nada por Mauro, sus acciones me herían profundamente. ¿Cómo podía disfrutar al hacerme sufrir de esta manera, cuando yo nunca le había hecho ningún daño?

Mi mente se enfocó en Marko, mi esposo. Necesitaba explicarle la verdad, hacerle entender que su hermano había mentido y difamado nuestra relación. La rabia me consumía al darme cuenta de que Mauro no solo me estaba atacando a mí, sino también a nuestro
Sigue leyendo en Buenovela
Escanea el código para descargar la APP

Capítulos relacionados

Último capítulo

Escanea el código para leer en la APP