MichaelLa fiesta del abuelo transcurrió casi sin más incidentes, pero no pude evitar notar los gestos de desprecio que la madre de Natalie dirigía hacia ella. Me resulta incomprensible cómo una madre puede comportarse así con su propia hija.Pensé que tal vez su actitud se debía a nuestra reciente boda, pero hay algo más, algo más profundo que no logro entender.Cuando la fiesta finalmente termina, pienso que nos iremos, pero el abuelo nos detiene con una propuesta inesperada.—Natalie, querida, ¿por qué no pasan la noche aquí? —dice con amabilidad—. No quisiera que les pase nada afuera y esta es su casa.Natalie se queda sin palabras, evidentemente sorprendida por la oferta. Antes de que pueda responder, decido intervenir.—Muchas gracias por el ofrecimiento, Barnaby. Sería un honor quedarnos aquí esta noche.El abuelo asiente con una sonrisa y llama al ama de llaves para que preparare una habitación para nosotros. Aunque me siento un poco incómodo por la situación, sé que es import
MichaelAntes de que puedan seguir hablando, causo un ruido por accidente. Ellos se detienen de hablar. No me queda más opción que salir corriendo de vuelta a la habitación. Alcanzo a llegar arriba antes de que se asomen. No me ven, pero yo si a ellos. Ahora entiendo todo.Esa mujer no es más que una ambiciosa que desea quitarle a Natalie todo lo que le pertenece.Entro en la habitación donde mi hermosa princesa sigue durmiendo. No encontré cigarrillos, así que no me queda más que echarme a dormir, o al menos intentarlo.No obstante, antes de que pueda hacerlo, recibo una llamada entrante en mi celular. Me salgo hasta el balcón para poder contestar. Antes de presionar el botón me cercioro de que ella no vaya a escucharme; solo entonces contesto.—Hola, padre —respondo con seriedad.—Michael, pedazo de idi0ta. Ya vi tu enorme cara en las noticias. ¿Me quieres explicar cómo es eso de que te casaste con la hija de un magnate de California?—Dijiste que me ocultara, que consiguiera un tra
NatalieVer a mi madre en la sala de conferencias me pone nerviosa, no pensé que se aparecería hoy y mucho menos que estaría conversando con el socio del presidente de TecnoInc como si fueran íntimos amigos, pero trato de hacer caso omiso y continuar con mi presentación, después de todo, no creo que pueda hacer nada.—Bien, señores, este proyecto es importante, porque estamos a punto de crear una revolución tecnológica sin precedentes —continúo diciendo.Que Michael también se encuentre aquí me hace sentir más segura. A decir verdad, no tengo idea de cómo este hombre consiguió meterse en mi piel y en mi corazón, pero ahora mismo no podría imaginarme sin él a mi lado.Sacudo la cabeza para volver a concentrarme y continuar con lo que estoy diciendo, sin embargo, sus ojos están fijos en los míos, se encuentra sentado con la pierna cruzada sobre su rodilla y una de sus manos juguetea con un lapicero mientras me sonríe. «Concéntrate Natalie», pienso.—Con nuestro desarrollo tecnológico en
Natalie—Permítame unos momentos para reorganizar mi propuesta entonces, CEO Montgomery —le digo con una calma aparente.—Por supuesto, le daré hasta el final del día, ¿le parece? Sé que esto puede parecer un poco arbitrario, pero necesito este software en el menor tiempo posible, ya hemos perdido mucho esperando su proyecto final y la otra empresa me ofrece tener listo todo en menos de seis meses.Es muy poco tiempo, yo no podría tenerlo terminado en tan solo seis meses, a menos que milagrosamente consiga traer los componentes de Japón en menos tiempo.—Está bien, lo llamaré antes de que acabe el día.Cuando los empresarios de TecnoInc se van de la sala, mis ejecutivos me miran como leones a punto de devorarme.—Natalie, no podemos aceptar semejante aumento, ya corrimos un gran riesgo al gastar bastante dinero en la inversión con los Japoneses —me dice Maximiliano, el presidente financiero.—Lo sé —respondo con seriedad—. Entiendo sus preocupaciones, Maximiliano. Pero necesitamos ser
MichaelNatalie me mira con desconcierto y quizá un poco de enojo, pero es que ella no parece haberse dado cuenta de todo lo que ocurrió en este lugar. Cuando creí que había reconocido a uno de los socios de TecnoInc, no me equivoqué, y es que ese tipo ha estado involucrado en negocios sucios. Ahora recuerdo incluso haberlo visto reunido con mi padre cuando yo era más joven.Ver a Victoria hablando con él levantó mis sospechas, así que mientras ella daba su conferencia y discutía sobre el proyecto con los ejecutivos, yo estaba haciendo mi propia investigación.Debo reconocer que tener a Axel como mi mano derecha ha servido para mucho, pues él es mil veces mejor que cualquier agente encubierto de la CIA cuando se trata de averiguar cosas para mí.No le costó demasiado descubrir que hay algo detrás de todo esto involucrando a la madre de Natalie y a Wallace Stone.—¿Tienes idea de lo que acabas de hacer? —me cuestiona. Todavía tiene el celular en la mano y, podría jurar que está a punto
MichaelMe acerco con sigilo a la puerta y, para mi sorpresa; o quizá no tanta, Dylan se encuentra allí dentro con ella.—¿Qué fue lo que dijo? ¿Aceptó el trato para la importación con los japoneses?—Le di sutilmente la sugerencia como me indicó —responde el chico.Aprieto los puños sintiendo una furia que azota mi interior. Sabía que esto no podía ser tan fácil. Entonces ella piensa que podrá sabotear a Natalie de una forma u otra.—¿Pero aceptó o no? —cuestiona la mujer con insistencia.—Dijo que lo haría, pero nos mandó a comer y dijo que después llamaría a los de la otra empresa para aceptar el trato.Victoria refunfuña con fastidio.—Seguramente dirá que no, esa estúpida. Regresa a esa sala e impide que rechace el negocio. Necesito que lo haga para mi siguiente movimiento.—Como ordene, señora Dupont.Me alejo a toda prisa de la puerta antes de que me descubran escuchando. Primero sale Dylan, y unos cuantos minutos después, Victoria también abandona el lugar pero en dirección co
CAPÍTULO 28: QUIERO SABER MÁS DE TINatalieLlego a casa arrastrando los pies, ni siquiera enciendo la luz, simplemente me arrojo sobre la cama con la cabeza palpitándome del dolor a causa del estrés. No puedo creer que acepté hacer ese negocio con el aumento de precio en el presupuesto. Estoy tomando un gran riesgo al hacer esto y solo espero que las cosas me resulten bien, de otro modo echaré todo por la borda y probablemente perderé el imperio que construyó mi padre con tanto esfuerzo.Suspiro, pensando en lo mucho que lo extraño. Él y mi abuelo han sido los únicos que me han dado un lugar en la familia, porque si fuera por mi madre, yo ni siquiera sería una Dupont.De pronto abro los ojos y veo el cuerpo semidesnudo de Michael. Mi cerebro hace cortocircuito porque estoy tan abrumada con todo que realmente olvidé que este hombre vive ahora a mi lado. Pego un grito y me levanto de la cama encendiendo la lámpara. Él también se levanta con la mirada un poco desorientada.—¿Qué pasa, p
CAPÍTULO 29: UN POCO MÁS DE SU PASADONatalieMichael se remueve incómodo en el asiento y suspira. Una ansiedad palpable se apodera de él, manifestándose en el movimiento frenético de su pierna. ¿Qué estará pasando por su mente en este momento? ¿Qué fantasmas del pasado lo atormentan?—Fue un accidente, yo tenía diez años, he estado solo desde entonces —sus palabras son evasivas, como si estuviera tratando de mantenerme alejada de una verdad que se niega a revelar. Pero yo no me doy por vencida tan fácilmente.Intento acercarme, ofrecerle mi apoyo, pero Michael parece distanciarse aún más. No entiendo por qué está reaccionando así, por qué me mantiene a distancia cuando lo único que quiero es conocerlo mejor, es mi esposo después de todo.—Lo lamento mucho, debió ser horrible pasar por todo eso solo —expreso sinceramente, tratando de transmitirle compasión y empatía.Michael suspira una vez más, pero ahora su expresión cambia. Una sonrisa se forma en sus labios, pero no es una sonrisa