"Deberíamos reconsiderar nuestros planes de boda. ¡Ya me voy!".

Troy se sobresaltó ante las palabras de Sarah. Rápidamente, la agarró de nuevo, tirando de ella para abrazarla por detrás.

"Sarah... Por favor, no digas eso. Por favor, créeme. Eres la única en mi corazón".

"¿Qué estás haciendo? ¡Esto es vergonzoso! ¡Mira, todo el mundo nos está mirando! Suéltame, ¿quieres?". La cara de Sarah se puso roja cuando la gente que pasaba por el pasillo empezó a fijarse en ellos, sobre todo porque muchos reconocían la cara conocida de Troy.

"¡No te soltaré a menos que hablemos en mi coche ahora mismo!". Troy susurró al oído de Sarah.

"¡Bien, pero suéltame primero!".

Sarah respondió con frustración en voz baja. Se esforzó por quitar las manos de Troy, que rodeaban su pecho. Quería enfadarse, pero ya era el centro de atención, lo que la obligaba a contener las emociones que bullían en su interior.

Troy no quería que Sarah se fuera. Esta vez, caminó con el brazo alrededor de su cintura.

"¡Su