Cinco de la mañana y aún no he decidido cual será mi presentación.

Definitivamente todo esto va a salir mal

No había podido dormir en toda la noche estudiando en mi oficina, estaba tan nervioso y tan ansioso que no podía parar de leer y no se me quedaba nada. El mundo de los Clubes nocturnos era tan extenso que no escontraba ingun proyecto atractivo que valiera la pena. Necesitaba ayuda urgente.

¿Y si le escribo?

No. No podía hacerlo. Por más que necesitara escuchar su voz, no me podía permitir seguir sufriendo por algo que ya estaba fuera de mi alcance.

Busqué mi celular y envié un mensaje a la única persona que conocía hasta ahora.

Se la envié y esperé.

Navegando en mis pensamientos no podía creer que estaba tan desesperado a tal punto de llamar a una chica que apenas había conocido a las cinco de la mañana, por ayuda. ¡Qué vergüenza! Seguro la había despertado y yo con mis estupideces.

Ordenando en lo posible todas las cosas, encontré un proyecto mas o menos atractivo encima de la