Capítulo 82

MILENA

Después de que Esteban se marchó, llamé a Jorge Alonso, mi mejor amigo, para que viniera a hacerme compañía. Casi media hora después, apareció con su short ajustado, mostrando ese cuerpo atlético que siempre me ha parecido irresistible. Es mi confidente, mi apoyo incondicional, y a pesar de la tentación que representa su presencia, sé que puedo confiar en él para escucharme y aconsejarme.

—Hola, mi reina, mi diosa, mi princesa. ¿Cómo estás? —dice con su voz dulce y reconfortante.

—De maravilla —respondo, tratando de mantener el ánimo a flote a pesar del dolor.

—Eso se nota a simple vista, mi muñeca. Pero mírate, esta tarde estás radiante como siempre. ¿Dónde compraste ese bikini? Te envidio, con ese cuerpazo hasta la frialdad de Esteban se derrite.

—Ni lo menciones, cariño —digo, sintiendo una punzada de molestia al recordar a Esteban.

—¿Qué te hizo ahora ese miserable? No me digas que se atrevió a despreciarte.

—Ni siquiera me miró.

—No, eso es terrible, ese hombre está loco.

Sigue leyendo en Buenovela
Escanea el código para descargar la APP

Capítulos relacionados

Último capítulo

Escanea el código para leer en la APP