Elizabeth WesternMansión de los abuelos Western—La cristalería, y la mesa de postres, ya está listo. —le dije a mi abuela, pero al no ver una respuesta de ella, giré mi rostro. Ella estaba dormida con su cabeza mirando su regazo. Acaricié su mano que estaba recargada en uno de los brazos de la silla de ruedas, ella se sobresaltó y abrió sus ojos.—George, dime. —dijo de repente, miró por la habitación y luego sus ojos se posaron en mí. —Elizabeth, mi niña, ¿Sí?—susurró. — ¿Qué es lo que ya está listo?— ¿Por qué mejor no nos dejas a Marie y a mí hacerlo y tú descansas?—propuse con el nudo en la garganta, ella sonrió y asintió. —Me parece perfecto, ya me has ayudado con mis cumpleaños anteriores y sé qué ya estás lista para encargarte de eso cuando yo no esté. —arrugué mi ceño.—Todavía te falta mucho por vivir abuela, no ha sido el tiempo suficiente para disfrutarnos la una a la otra. —ella suavizó su mirada. —Oh, mi niña, —estiró su mano y acarició mi mejilla. — ¿Quieres saber un
Queridos lectores, entro rápido por qué no tardan en acabarse mis datos, no he podido actualizar como estaba organizado por una situación que se ha salido de mis manos, mi madre está internada de situación totalmente GRAVE en el hospital de hace días atrás, es por eso mi ausencia no es tanto por que no les quiera dar capítulos, sabiendo que amo escribir, pero mi priorioridad en este momento es ella, espero que puedan entender, empezaré a escribir en mi rato libre por la noche desde mi celular (No se asusten si me como una palabra o una coma o acento) y daré todo de mí para que puedan seguir leyendo esta historia y las demás. Hay capítulos que iré programando en estos días para no dejarlos sin historia y yo no perder más de esos días que a nosotros los escritores nos da la plataforma libres y no perder bonos. Gracias por tomarte el tiempo de leer este anuncio y de comprender. Daré todo lo que pueda de mí para darte más historia. Mara Caballero.
Elizabeth Western Mansión de los abuelos Western Cepillé de un lado el cabello de la abuela tal y como me lo había pedido. Pude ver de vez en cuando su imagen reflejada a través del espejo, ella me sonrió cada vez que la vi. — ¿Está todo listo?—preguntó cuando terminé, quería prolongar más mi tiempo con ella, ahí en su habitación antes de bajar a la fiesta de cumpleaños que habíamos organizado por meses entre Marie, ella y yo. —Sí, solo el pastel se ha atrasado—había dudado en decirle, pero ya bajaría y sabía que al enterarse, reclamaría de inmediato a la pastelería y le diría un par de cosas, pero para mi sorpresa, ella estaba tranquila, arqueó una ceja y luego arrugó su ceño. — ¿Qué es lo que pasa?—preguntó curiosa. —Pensé que soltarías un par de groserías acerca de su falta de profesionalismo, que desde hace meses se había ordenado y para colmo pagado...—ella sonrió. —Es mi cumpleaños, mi niña, y un atraso de una pastelería no me lo va a arruinar. Anda, acerca mi abrigo pa
Elizabeth WesternMansión de los abuelos WesternCumpleaños de Hilary WesternLe había contado todo a mi madre y ella estaba en shock total. Se barrió una que otra lágrima sin dejar de prestar atención. Pensó lo mismo que yo, que la abuela estaba preparándose para marcharse, que mi padre, venía por ella y aunque para otras personas sería ridículo escucharnos decir eso, nosotros creíamos mucho en ello. Después de tranquilizarnos, ella se levantó elegantemente de su lugar e intentó sonreír.―Demos lo mejor de nosotros y disfrutemos de tu abuela. Tenemos que preparar a tu abuelo, a Marie…―detuvo sus palabras, imagino que sigue pensando en lo del sueño de mi padre con mi abuela. ―Tenemos que estar más cerca ahora que…―Las he estado buscando―la voz melodiosa de mi tía Marie se escuchó, mi madre y yo la miramos exaltadas, ella alzó las cejas. ― ¿Qué pasa? ¿Por qué están aquí? ¿Por qué tienen esas caras? ―luego arrugó su ceño― ¿Han estado llorando? ―no reaccionamos de inmediato. ― ¿Qué es l
Elizabeth WesternMansión de los abuelos WesternCumpleaños de Hilary WesternEzra se veía tan pero tan atractivo en ese traje de etiqueta que podría llamar de inmediato la atención de cada mujer y hombre del lugar. Tomé discretamente una bocanada de aire y lo llevé a mis pulmones. Debería de ser pecado ser tan guapo. Pasé saliva con dificultad e intenté poner mi mente en otro tema de la mirada de Ezra. La música sonaba de fondo, quería distraerme con los invitados en la pista de baile del gran salón, pero me era imposible siquiera concentrarme realmente.— ¿Por qué no bailan? —miré a mi madre quien estaba ajena a mi situación privada.—Claro, —le sonreí y me puse de pie, esquivé la silla y me alejé de la mesa, sentí como el corsé apretó con fuerza mi cuerpo. Mis manos habían sudado y me regañé mentalmente por cómo estaba reaccionando. Marie estaba hablando con el abuelo y pude ver su semblante, “Mierda, le ha dicho” me acerqué y me puse a lado de mi tía, el abuelo al verme sonrió.—H
Elizabeth Western Mansión de los Western, cumpleaños de Hilary. —Quiero saber por qué estás tensa bajo mi toque. —preguntó Ezra haciendo que me tensara más de lo que ya estaba. —No estoy acostumbrada a bailar, es raro si lo hago. —confesé, noté que la melodía iba a terminar y sentí alivio. — ¿Me permites otra pieza?—preguntó inclinándose hacia a mí, mi corazón latió tan rápido que juré por un momento que Ezra podría haberlo escuchado latir. Se hizo hacia atrás y sonrió, "Dios mío, cualquier mujer estuviera rendida a sus pies si sonriera más seguido" Asentí lentamente y cuando la canción terminó, suspiré, miré disimuladamente hacia a mi madre que nos veía y sonreí, Georgy aplaudió junto con todos nosotros. "Debería de sacar a Georgy a bailar" pensé, sería un pretexto para alejarme de Ezra, en primera, ¿Por qué es que mi madre lo ha invitado?—Si te sientes incómoda, podría irte a dejar a la mesa en este momento. —nuestras miradas se cruzaron. —No, accedí a otra pieza, no soy de la
Ezra WinterCumpleaños Hilary WesternAlbert decía algo acerca de convivir más con mi familia, pero lo que menos quería era volverme a ver mi padre, mi madre todos los días hablaba con ella, me daba las noticias importantes, solo eso. Habíamos tenido bastante conflicto entre nosotros por no aprobar mi vida de arquitecto y no seguir los pasos de ser otro doctor en la familia Harrison. —Eres muy atractivo, Ezra. —dijo Hilary con una sonrisa. —Gracias, —intenté no mostrar que me incomodaba cuando hablaban de mi atractivo. —Así que tú eres el arquitecto del proyecto de mi hijo George. —dijo Hilary aun con aquella sonrisa plasmada en sus labios. —Así es, señora Western. —desvié la mirada hacia Elizabeth pero ella ya no estaba, arrugué mi ceño sin poder evitarlo. —Ella ha ido a los servicios, Ezra. —dijo Marie con una sonrisa, sé qué me ha pillado buscando a su sobrina, y me hizo sentir más incómodo de lo que ya estaba. —Ah, bien. —me aclaré la garganta y me disculpé para ir a la barr
Elizabeth Western Salón principal de eventos, mansión de los abuelos Western. Salí del baño de mujeres y cuando me iba a disponer a cruzar entre los invitados que bailaban ya que la mesa se encontraba del otro lado de la pista, me tomaron del brazo para detenerme, miré quien había sido y era mi tía Marie que estaba sorprendida o algo así. — ¿Qué pasa? —pregunté de inmediato. —Ha venido el tipo que habló mal de ti en la empresa, Mane. —mis ojos se abrieron de par en par. —Sí, ese tipo se ha colado en la fiesta y ya Ezra lo acaba de llevar al jardín y yo he venido a buscarte. ¿Qué hacemos? — ¿Qué hacemos? Yo te diré que hacer. —alcé mi vestido y rodeamos ambas la pista para ir al jardín que me había dicho dónde estaban los dos, me imaginé a Mane haciendo un drama con Ezra. Pero al salir, el que estaba haciendo el drama era Ezra. Marie se detuvo a mi lado y escuchó al mismo tiempo que yo. — ¿Cómo te atreves a venir a molestar? ¿No te bastó con hacer lo que hiciste? —Ezra lo estaba