Lucia Navar
Hace una semana desde que descubrí la infidelidad de mi marido. Si es que aún le puedo llenar así.
Ni quiero imaginar las veces que quizás me fue infiel después que decidimos ser feliz juntos.
Pero claro, fui tan estúpida al pensar que cambiaría, que dejaría su vida de mujeriego por mi o mis nuestros hijos. Me siento tan mal, pero no por mí, sé que di lo mejor, fui buena esposa, soy buena madre y una gran mujer. Se que merezco todo lo bueno, cosas exclusivas y solo para mi...
Hoy me entregan los papeles para que él firme el divorcio. No quería dar éste paso. Pero no puedo estar con alguien que no respeta su matrimonio ni sus hijos. ¿Por qué no de alejó? No pensó no más que en el placer, en su maldito placer, en mojar su polla y nada más.
Yo saldré adelante con mis hijos, no le prohibiré que los vea
Dos años después...—¿Estás hablando en serio, Lorenzo? —pregunta Lucía sorprendida mientras habla por teléfono.—Si, ya todo está arreglado con mi madre y las nanas, además solo serán 3 días mi amor —dice Lorenzo sonriendo.—Si lo sé, pero es que nunca me he separado de mis hijos por tanto tiempo —se queja caminando de un lado a otro.—Todo va estar bien mi reina , así que prepárate que en 15 minutos pasó por ti —dice mirando su reloj.—¡¿Qué?! Pero no he hecho maletas.—Descuida, yo las he hecho —dice y corta la llamada.Lucía no sabía que hacer, no sabía a dónde irían, como debía estar vestida o peinada. Sonreía mientras buscaba en el clóset unos jeans azul claro pegado a su cuerpo, una camisa floreada con un amarre debajo del ombligo, unas zapatillas con un poco de tacos corridos.A pesar del batallón de hijos que se carga
Narrador Omnisciente —Claro que estoy enojada Lorenzo, pensé que ya hoy estaríamos en Miami y resulta que estamos en España. Extraño mis hijos —dice en un susurro.—Igual los extraño, pero mañana nos regresamos. Lo prometo. Déjame pagarte.—¿Cómo?—Te quiero en mi cama. Ahora —dice halándola por el brazo. Besa su cuello.—Lorenzo... —susurra.—El mismo que viste y calza y que ahora vas a desnudar —dice lamiendo sus labios –.Sé que quieres que te folle... que te haga el amor mejor que las otras veces.—Eso quiero —susurra empujándolo a la habitación .Lucía tiene la respiración entrecortada. Como si fuera la primera vez que va a ser poseída por Lorenzo. El brillo desafiante murió en sus ojos cuando vió sus labios entreabiertos. Lorenzo gruñe y la toma de la nuca, la besa mejor que la primera vez, que la segunda...me
🌟🌟🌟Narrador Omnisciente11 años despuésMiami 10.00 AmEs un sábado resplandeciente y muy bonito. El mar es bañado por el hermoso azul del cielo. Un día muy especial para la Familia Lombardi Navarro.Lorena Lombardi Navarro cumple sus 20 años de edad y también es el día de su boda. Está que brinca y llora de felicidad. Habla con sus amigas por WhatsApp mientras terminan de darle los últimos retoques a su maquillaje y peinado.—No puedo creer que nuestra hija se casa tan joven y embarazada —dice Lorenzo arreglando su corbata.—Pues creélo, salió con tus genes —dice Lucía poniéndose sus zapatillas.—Mami, Christian dice que parezco una monja —dice Christine entrando a la habitacion enojada.—Te he dicho que estás hermosa —dice Alex el cuarto hijo a su hermana de 15 años. Los gemelos siempre se la pasan peleando, pero de
Lorenzo LombardiNo séenqué estabapensandocuando decidíaceptara ésta enana comosecretaria, aparte de estúpida, estámásancha que lapuertade mi oficina.Sus ojos azules y su hermosa boca grande la ayudan un poco, pero ese poco no me convence para verla en la empresa de nuevo.Hoy mismo la despido.-Eres todo un actor porno, Lorenzo. -dice lamiendose los labios.-Eso lo tengo claro señorita, y que usted y yo estemos follando, no significa que deba llamarme Lorenzo, para usted sigo siendo señor Lombardi -digo subiendo la cremallera de mi pantalón.-Disculpe. -dice ordenando su cabello.-Puede retirarse -señalo la puerta -Algo más, está despedida -digo sin mirarla.-Pero... ¿por qué? -pregunta sorprend
Lorenzo Lombardi Dejo el maletín sobre el inmenso sofá de la sala y voy hasta la habitación de mi madre. Ésta casa siempre huele a limpio, me gusta lo grande y hermosa que es, fue buena elección de mi parte, para regalo de su cumpleaños, hace 10 años, cuando yo tenía 16.—Hola madre —digo acercándome a ella para besar su frente.—Hola Lorenzo, tú por aquí tan temprano.—Si, tengo una cena importante en una hora.—Lo imaginé —dice dejando el celular a un lado —Bianca me tiene la galería llena de tantas fotos de vestidos de novia que me envía —dice frotando sus sienes.
Lorenzo LombardiLlego a la empresa a la misma hora de siempre. Oprimo el piso 43 para llegar a mi oficina y tomar mi café mientras espero a las dos chicas nuevas que van a ocupar el puesto de la enana.Me paro frente a la ventana para observar los edificios y la carretera mientras disfruto del café de mi mejor amigo Lukas. Las mujeres de ésta empresa ni siquiera saben preparar un café como me gusta.─¿Ansioso por conocer a tus nuevas putas? ─me giro para ver a mi mejor amigo entrar como si de su oficina se tratara.─Algo así, necesito un coño urgente ─digo tomando haciendo en mi cómoda silla negra, que hace juego con la mesa de vidrio negra no muy grande.
Lucía NavarroCojo mi bolso que hice a mano con unos vaqueros. A veces me pongo a reciclar por entretenimiento o por necesidad. Pero me gusta hacerlo. Quizás en un futuro me dedique a eso, nadie sabe. Luego de tomar mi bolso voy hasta la salida del restaurant para llegar a tiempo a mi destino.Hoy debo limpiar una mansión y en la noche un estúpido bar. A eso me dedico, a limpiar casas, hospitales, bares y restaurant, para poder pagar mi carrera de medicina y ayudar en lo que puedo en casa.Terminé la secundaria a los 14 años de edad, siempre fui la más destacada todos los años y esa era una de las razones por la que me molestaban y me llamaban Luznerd. Que combinación.Pero nunca me molestó, porque algo me enseñó mi madre, es que a los comentarios malos, oídos sordos, y además ser inteligente nones un pecado.Pero les confieso que cuando el popular se burla
Lorenzo Lombardi Tenía casi 10 años que no veía la tonta de Lucía. Está diferente, su pelo luce más claro, está más delgada y voluptuosa y esos ojos que no dejan de brillar. Su voz no ha cambiado mucho, siempre fue madura.-Ya debo irme, o llegaré tarde -dice pasando por mi lado.-Cuídate mi niña -dice mi madre muy sonriente.Ruedo los ojos y veo a mi hermano observarla embobado.-Tiene lindo culo a pesar de ser una pobretona -dice y ni me tomo la molestia voltear a ver.Mi madre lo regaña con la mirada y él ríe.-Madre ya la empresa es mía, debo hacer unos ajustes y en menos de un mes todo va a funcionar como quiero -digo limpiando mi boca con la servilleta.-Eso me parece perfecto, hijo -dice acariciando mi mano, sobre la mesa.-¿Y que me toca hacer a mi? -pregunta mi hermano tomando del