Pasado, presente, Liam
El ser que me estaba hablando no podía verlo, era como un destello de luz, pero al escuchar su voz, al instante te hacia reverenciarte ante el poder y autoridad que te hacía sentir
- Tu nombre será Liam, tú serás el portador de la protección; ahora será tu deber proteger a la vida, serás mi espada – declaro
- Que así sea – confirme y así es como acepte mi destino
Estaba arrodillado ante ese ser, cuando termino de darme mi destino, me levante, hice reverencia y camine hacia atrás sin dejar de reverenciar, pero tuve que detenerme porque él hablo de nuevo
- Creación mía, la oscuridad también puede convertirse en luz y la luz en oscuridad – me advirtió y sin más desapareció con el viento
Ahora entendía porque Lilja me decía que no era un humano, pero ¿Por qué ella lo sabe? Y como si me leyera la mente me llevo a otro recuerdo; era el mismo lugar del palacio donde estábamos anteriormente, solo que este se ve un poco diferente, en vez de flores rosas y blancas, son flores rojas y doradas; este lugar no tiene un quiosco, en su lugar hay una banca larga y ancha. Me sorprendí al fijar mi vista en los seres que están ahí, éramos Lilja y yo
Lilja estaba encima de mí, mientras que yo estaba sentado en el pasto verde, apoyando mi espalda en la banca, estaba acariciando su cabello y ella sonreía tímida por mi acción, y preste atención a lo que decíamos
- Deseo que me elijas a mí, ¿tu vida será mía? - pregunto ansiosa
- Puedes tomarla si lo deseas, será tuya – le hice saber
- Lo deseo, tu vida ahora me pertenece – sus ojos brillaron
Se inclinó para pegar su frente con la mía, y tomo mi cara con sus dos manos
– sellaremos nuestra promesa - después me beso
Yo le seguí el beso, y aunque parecía que lo estaba disfrutando; mi yo de ahora no sentía nada al ver aquello, era pasado.
Después de eso sentí como la Diosa me jalo nuevamente y así regresamos donde se encontraban los tres libros. Yo aún estaba procesando lo que había visto, pero pude notar un poco de inquietud en la Diosa
- ¿Sucede algo? - le pregunte
- No es nada – hizo una media sonrisa
- Primero hablemos de mi destino, luego hablaremos de nosotros, ¿de acuerdo? - admitió con la cabeza
Nuevamente me llevo a otro lugar este era diferente, tenía una mesa redonda grande en el centro del lugar ¿tal vez sea el comedor? Pero no nos quedamos en el lugar, seguimos caminando hasta pasar por dos puertas y llegar al lugar, ese era el lugar donde estaba el ultimo recuerdo que me dio Lilja; fuimos directamente a sentarnos en la banca, se sentía extraño el lugar
-¿Por qué estamos aquí?
- Es un lindo lugar, es mi favorito – menciono - además aquí me siento bien y puedo tener más claras mis ideas – me dijo algo tímida - espero no te moleste – se apresuró a decirme
- Está bien, no tengo nada en contra – le asegure – entonces, dime, ¿Por qué me necesitas? -
- Bien, como sabes soy un ser perfecto, una Diosa, la cual debe mantener el equilibrio en los humanos; pero... hay algo que no está bien – dijo algo nerviosa
- Eres perfecta, ¿no? - le dije con lógica
- Ese es el problema, no debería sentirme de este modo, pero algo me está inquietando y nuevamente está alterando mi equilibrio – menciono pensativa
- ¿Esta? ¿Quién lo está haciendo? - pregunte confundido
- Ella, ella despertó Liam – dijo con algo de miedo – la enemiga del mundo ha vuelto – aseguro
- No puede ser posible, ya ha pasado un milenio sin que los humanos pasen por ello, tú misma lo dijiste: todo recuerdo será olvidado – le recordé
- No debimos olvidarla, ella no tendrá misericordia con los humanos – dijo con preocupación
- ¿Qué se puede hacer para evitarlo?
- Ese es tu destino Liam, debes eliminar a la muerte para proteger a la vida – aclaro
- Vaya, espere cualquier cosa este día, menos esto, el de tener que ir a enfrentarme con la muerte misma y además matarla, ¡qué día!
- Tú mismo lo viste, fuiste creado para protegerme, debes cumplir con tu misión antes de que los humanos vuelvan a corromperse
- No estoy seguro de hacer esto, la muerte ya no existe, estamos a nada de que los humanos consigan la perfección y se cumplan sus sueños, debe haber otra solución que sea más lógica –
- Liam, si esto no se resuelve rápido los humanos se verán afectados y yo no podré controlarlo, deseo que me elijas vida mía
- Sobre nosotros Lilja, lamento decirte que mi vida ya no te pertenece, tal vez la vida pasada sí, pero la vida que tengo ahora por el momento es solo mía y no deseo compartirla – le aclare – deseo irme Diosa – ella suspiro
- Está bien, si cambias de deseo, no olvides como pedirlo – se levantó de la banca y empezó a caminar al frente hasta que se detuvo a unos cuantos pasos de la entrada del jardín
- Vida mía, no rompas tu promesa como rompiste mi corazón – menciono con tristeza
Y todo desapareció, dejándome dónde estaba con Kuyen en un inicio y así fue como conocí nuevamente a la Diosa Lilja portadora del bien y el mal; y había recordado mi destino, pero no estaba seguro de que fuera el correcto.
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Lilja
Ha pasado un milenio, un milenio compartiendo mi don con los humanos, todo ha salido perfecto, tal como mi ser.
Ser perfecta es todo un caos, no debe haber equivocaciones, y eso me está consumiendo, pero no, no debo ser débil ante nadie; soy una Diosa y soy perfecta.
- Lilja – me hablo la profetisa – Lilja – insistió
- ¿Puedo ayudarte? - voltee a verla
- ¿Te sientes bien? - pregunto – te noto distraída
- Todo bien, ¿Por qué tendría que haber algo malo? - me apresure a decirle
- Lilja, sé que no estás bien, algo está cambiando – menciono con preocupación
- Nada tiene porque cambiar – le asegure
- Algo está consumiéndote por dentro, no dejes que eso se vuelva tu fin – me advirtió y antes de que pueda decirle algo, desapareció
Necesito encontrar al portador de la protección, llevo varios años buscando el acertijo que me llevara a él y aún no puedo encontrarlo, al parecer se aseguró de que no lo encuentre, pero él me pertenece, así que debe regresar a mí en cualquier instante; si logro encontrarlo y él cumple con su promesa yo podre estar en paz.
Estaba por dirigirme nuevamente a mi lugar de investigación, pero un ángel llego, se mira muy preocupado
- Diosa, sucedió algo terrible – dijo con miedo
- Tenía un milenio que no escuchaba esa frase, ¿Qué es eso tan terrible? - quise saber
- Ella, ella ha sido liberada de su prisión, ¡Eris desaprecio! – dijo apresurado y con miedo – Diosa solo es cuestión de segundos para que provoque caos a donde sea que haya ido – concluyo
- No puede ser, ella no puede... al menos que... pero no es posible... - mi mente se hizo un torbellino de solo pensar en el caos nuevamente - ¿estás seguro, ángel? - pregunte
- Si Diosa, ¿Qué haremos?
- Déjame sola, necesito pensar – me toque la cabeza con las manos – busca a la profetisa, dile que venga cuanto antes – le ordene
- Si Diosa – hizo reverencia y se retiro
Ahora, ¿Qué haría? Lo menos que me preocupa es Eris, si ella pudo escapar quiere decir que Ella también ha vuelto, el mundo recordará a su enemiga, y mi promesa se romperá, el caos con los humanos habrá, y ¡NO! Esto no es real, no está pasando, los humanos estarán bien y yo estaré bien, ¿Dónde estás Liam?
- Lilja, ¿me dirás que te ocurre? - pregunto la profeta
- Eris, ella ha escapado
- Oh no, eso no es bueno, ¿ya ocasiono problemas?
- No, aun no, está bastante silenciosa, tal vez haga algo caótico como siempre
- Debes protegerte entonces, toma – me extiende un papel enrollado – es tiempo que Liam cumpla con su destino
Desenredo el papel y ahí está el acertijo que estuve buscando por años, me tuve que aguantar las ganas de gritar por mi enojo, que tonta había sido, - y yo era el ser perfecto – odiaba ser tan ingenua a veces; llame un ángel y rápidamente le ordene que mandara a llamar a los humanos que quisieran realizar una misión, el ángel había juntado como 30 grupos de 5,000 humanos, ya llevaba 26 grupos y nadie podía decirme la respuesta del acertijo, esto ya me estaba cansando hasta que al fin, después de 29 grupos lo encontré, encontré a Liam
Como siempre, Liam destacaba por ser diferente a los humanos, es un ser que no se puede olvidar, sus ojos color miel, siempre te transmitían protección y seguridad, era como ver el sol al amanecer, sabes que no importa la tempestad, tienes la certeza de que el sol siempre está ahí.
Cuando dijo la respuesta al acertijo no espere que dijera algo y lo traje conmigo, vaya que cuando le hice preguntas sobre quien era no supo, me había pasado son su falta de memoria, pero eso lo arreglaría, a Liam le mostré algunos recuerdos, y principalmente cuál era su propósito, creí que lo aceptaría al instante, pero me equivoque, y ese no fue mi deseo.
Después de dejar a Liam donde estaba en un principio, mi poder se sentía aún más raro, empezaba a sentir como los humanos se estaban inquietando por algo que aún no pasaba, pero lo estaban presintiendo – estaban entrando en pánico – y eso no era nada bueno.
Sentí que jalaron poder de mí, y eso me hizo caer de rodillas al piso, me sostuve con mis dos manos para no caer de cara y seguía apoyándome en ellas para retener ese jalón que sentía, después de unos minutos pude dejar de sentirlo y me tiré al piso agotada por el esfuerzo, estaba sudando y mi garganta me ardía por el grito que solté, estaba tratando de calmar mi respiración
- Lilja, por el cielo, ¿Qué te ha pasado? - pregunto preocupada la profetisa – parece que tienes fiebre, esto es raro - puso su mano en mi enfrente para confirmar – ven, vayamos a tu cama para que descanses un poco, pediré que preparen un te
- Ella… ella ha vuelto… - intentaba respirar - ella está haciendo esto… está alterando mi equilibrio… – le dije entre cortado
- ¿Ella? Eris ¿está haciendo esto? - quiso saber
- No… ella no… - tome aire para que no notara mí pánico - La Diosa de la muerte a regresado – le asegure
"Todo se vuelve oscuridad y caos cuando ella se hace presente... Ella es tu ruina..."
Leila Mi cabeza se siente oprimida, recuerdos tras recuerdos vienen a mí, pero ninguno puedo captarlo con claridad por mi confusión, ¿Qué estoy haciendo aquí? No recuerdo haberme quedado en ese lugar del castillo, según lo último que recuerdo estaba en mi lugar oculto, respirando la tranquilidad que abundaba ahí, incluso quería traer un poco conmigo.Ahora me encuentro en una piedra grande, rectangular, estoy acostada en ella, lo cual está muy cómoda para ser piedra; el techo es confuso, parece un hoyo negro infinito, lindo. Me levanto, pero no completamente, apoyo mis codos en la roca, observo que alrededor se encuentran enredaderas de flores pequeñas de color rosas y negras, muy bonitas. Continúo observando a mi alrededor, creo que estoy en la parte alta del castillo, nunca había entrado aquí, me siento y bajo de la piedra, camino hacia una pequeña ventana, la limpio un poco y solo miro nubes abajo, todo lo que veo son nubes grises; ¿Dónde estoy?- Al fin despiertas Diosa – di un p
Liam Kin ya se sentía mejor, ahora estamos en la sala, sentados en el suelo, era cómodo, además de ese modo se podía ver mejor a través de la ventana, que tenía un lindo paisaje del bosque, a pesar de que ya fuera noche. Kin continúo hablando… - Tu destino es proteger a la vida, nuestro destino – se señaló y a Kuyen – es protegerte a ti - ¿Protegerme? ¿Para qué? - Kuyen y yo somos tus protectores para que cumplas con tu destino, por ello eres mi señor y algo más - ¿Cómo que algo más? – pregunte confundido - Eres mi señor por algo más que no recuerdo – ella continúo contando – al principio de la historia existió la vida la cuál fue perfecta, pero también existió otra vida, esta vida era eterna, fuimos creados por la primera rebelión que existió en el mundo, la vida se hizo imperfecta porque la vida eterna la maldijo, la maldijo creando a la muerte. La muerte era un recordatorio de su pecado, por eso la muerte la consideran la enemiga del mundo. - Ahora tiene más sentido, por eso
Lilja Desperté agitada, me costaba respirar y todo daba vueltas, ¿Cuánto tiempo paso? Cómo pude intente enfocar mi vista en algún punto y poder ver con claridad, hasta que lo logré y mire a la profetisa Armida al frente de la cama... - Lilja, ¿te sientes mejor? - No – le dije irritada – y esto no mejorara hasta que ella sea eliminada – mencione frustrada - Liam no quiso su destino, ¿Qué harás? - Obligarlo, ah que lo cumpla, solo es cuestión de minutos que los humanos entren en caos, si es que no lo han hecho Tome mi cabeza con las dos manos, empezaba a darme vueltas todo otra vez, ¿Por qué me estaba afectando esto también a mí? - No puedes obligarlo Lilja, recuerda lo que paso la última vez; déjame hablar con él, tal vez acepte - Rechazo a una Diosa, ¿crees que aceptara a una profetisa? - mencione con sarcasmo - No confía en ti Lilja – me sonrió – puede que su mente haya olvidado, pero, su corazón no lo puedes engañar - Sigue siendo débil – le asegure – por eso nunca pudimo
LeilaCon el alma vacía, salí de ese lugar, ahora estaba sentada en mi trono, este era alto, color blanco, era sencillo pero elegante. Estaba disfrutando de mi silencio eterno, a pesar de la molestia que sentía, era mayor el placer de la tranquilidad que había en ese momento que me hacía olvidar lo que ocurrió hace unos minutos, pero sabía que había dejado de ser eterno porque tal y como espere ella apareció… - Mi Diosa ¿Cómo ha salido? - su rostro reflejo preocupación, pero sabía que estaba mintiendo- Nada se me prohíbe - le recordé - ¿no había dicho que huyeras?- Mi orden es cuidar de usted – volvió a repetir- ¿Cuidarme? - dije con burla – vaya que lo has hecho bien, ¿por qué no vas a cuidar a los débiles humanos? - dije con aburrimiento- ¿Mi Diosa no los ayudará? - pregunto con asombro- Es asunto mío – le advertíAlgo pulso mi corazón, así que tuve que tomarme de las coderas del trono para aguantar esos segundos de dolor; mi poder quería salir, pero no era tiempo aún- ¿De
Gracias querido lector por darle una oportunidad a esta historia; me encantaría que te quedarás hasta el final, te aseguro que alguna enseñanza te quedará... no se si sea buena o mala, pero la tendras. :) Todos en algún momento pasamos por la perdida de un ser querido, y a veces surgen muchas preguntas sobre que pasa con aquel ser querido o como se puede seguir tras esa perdida. Esta historia surge con este dilema; ¿Es la muerte el final de todo?, ¿No fuimos creados para vivir por siempre?, ¿Cuál es el proposito de morir? Leila, mi pequeña anuhe, solo sabe las respuestas... Sigue leyendo esta historia de misterio y sobre todo descubre como la Diosa de la muerte se enamora de la vida; y como la vida misma es un desafio para ella... :) Esta historia va dedicado a todos aquellos que han perdido aun ser querido en está pandemia del Covid-19 "Cada día que pasa se vuelve más complicado querer seguir viviendo, pero lindo humano, no te rindas, aún tienes mucho para dar y demostrar,
Liam ¿No habían dicho que la muerte era aterradora? ¿el mundo le teme a ella? Un sinfín de preguntas se hicieron en mi cabeza, porque no podía creer lo que estaba viendo, ella era el ser más precioso que jamás allá visto; y yo eh visto cosas grandiosas, ella no se compraba con nada, por eso la profeta me aseguro de que no podría matarla. No hay palabras para describrirla, su tez es blanca, como si fuera nieve, su cabello es color negro pero en sus puntas pude ver un rojo intenso, como si fuera lava de un volcán, sus ojos... el color de sus ojos, es como si estuvieras viendo las mismas estrellas en el cielo, simplemete perfecta.Tal vez le temían, porque ni siquiera debe pedirlo o estar enterada que cualquiera caería rendido ante ella sin dudarlo.Si ella era la muerte; sería un honor morirEra completamente diferente a todo lo que me decían de ella, bueno eso parecía, en estos momentos está molesta y yo sin poder decir nada- Mi señor ¿se encuentra bien? - me pregunto Kin- No, ¿En v
Kin Escuche como Leila me llamaba, así que sin pensarlo entre a la habitación, pero fue demasiado tarde, ella había saltado por la ventana, intente llamarle, pero ella solo corría hasta que alguien la atrapo y se la llevo, cuando eso paso mi desesperación creció, la había perdido otra vez; sentía como Kuyen me estaba sujetando, estaba temblando del enojo hacia mí; había fracasado una vez más- Kin, escúchame, tienes que tranquilizarte – me hablo despacio Kuyen – respira, estoy sintiendo lo que sientes y no creo que lo puedo aguantar mucho tiempo – hablo con preocupaciónY me detuve, tome aire y lo solté, era cierto mis emociones debían ser controladas, Kuyen también las sentía y esto no me ayudaría en nada, pero entonces mire a Liam- ¡TÚ! - lo señale - ¡debiste protegerla! - le grite- Todo fue muy rápido Kin, no me permitió ayudarla, entre más cerca estaba más dolor reflejaba, ¡nunca pensé que saltaría! - él también me grito con desesperación- Encuéntrala mi señor, ¡encuentra a la
LiljaEste era un desastre, odiaba que de cierta manera Leila tuviera razón, llevo más de un milenio soportando este poder, pero ¿Por qué tendría que soportarlo? Este poder debería ser un don, recuerdos quieren llegar a mí mente, pero hay como una barrera en mí cabeza que los repela, ¿Qué me está pasando? ¿Qué es lo que olvide?; Esto me está consumiendo, pero no lo entiendo, soy un ser perfecto, esto nunca debería pasarme, ¿Qué es lo que quiere ser revelado? - Eris – llame a la Reyna del deseo y caosElla apareció a mi derecha, sus zapatos hacían eco en el pasillo, la mire de reojo para comprobar que era ella, no se equivocaban al semejarla a una serpiente; su cabello era verde oscuro, sus ojos un color amarillo brillante, y con su sonrisa de lado con la lengua fuera, reflejaba que estaba lista para cometer el más vil de los pecados; ¿Por qué no ha inyectado veneno y hecho caos? De un momento me sentí extraña, mi conciencia quería advertirme de un peligro que se aproximaba; y lo dese