BETSABE LOMBARDO
El fin de semana paso rápido, no negare que me quede cautivada por mi jefe; era el hombre mas apuesto que había conocido en toda mi vida, y en serio que quede hipnotizada con sus ojos color azul como el mismo cielo. Así que como toda mujer curiosa y capaz de investigar sobre lo que le interesa, me puse abuscar en internet sobre Dorian Russo, y ¿Que creen? Encontré una variedad de informaciones que en serio me decepcionaron. ¿Porque? Ni idea ni me interesa averiguarlo.
Dorian Russo, flamante joven multimillonario y soltero mas codiciado fue visto el fin de semana pasado acompañado de una señorita ingresando a uno de sus hoteles. Como bien sabemos el joven empresario no es de relaciones y es conocido por sus innumerables salidas con di1ferentes tipos de mujeres.
Sera que algún día nuestro querido Dorian sentara cabeza...
Y yo que decía que en mi país los periodistas escribían cagadas para informar ¡JA! Me equivoque y grande, aquí también escriben porquerías. Al menos sabemos que es mujeriego y algo me dice que será un verdadero dolor de cabeza como jefe.
***
¡LUNES! Hoy empiezo mi primer día de trabajo. Son las cinco en punto de la mañana, terminando de prepararme para ir a alistar el traje de mi queridísimo jefecito. En serio necesita que le prepare la ropa, me decepciona semejante monumento de hombre y que no pueda alistarse solo.
Salgo de mi departamento camino al estacionamiento para subir al vehículo de la empresa y dirigirme rumbo al pen-house de mi jefe. Una vez allí quedo impresionada por lo enorme que es. Aquí vivirían unas diez o veinte familias. ¿Porque querría una casa tan grande si vive solo? En fin; antojos de ricos.
Llego en la entrada y doy mis datos al hombre deseguridad que se encuentra en la entrada de la residencia, me adentro por el pasillo observando todo a mi paso. Una vez estando dentro de la casa me encamino al closet de mi jefe que no se donde m****a esta, pero imagino que estará arriba. Tengo que dejar todo preparado antes de que despierte o regrese, no se, solo se que el no debe encontrarme en la casa según recomendación de Alanna así que me puse manos a la obra.
Una vez termine de preparar el traje que utilizara hoy, me encamine a la cocina a preparar el desayuno. Grande fue mi sorpresa cuando encontré a una señora de unos 50 años cocinando.
-Buenos días. - salude ingresando a la cocina
-Buenos días, ¿Usted debe ser la nueva asistente de mi niño? – pregunta la anciana con ternura
-Pues si, ¿Creí que tenia que preparar el desayuno y la cena?
- ¡Ay no mi niña! Yo me encargo de ello. No te preocupes. - me responde con una sonrisa
-Pues el señor Russo me había dicho que me encargaría de ello, es por eso mi confusión.
-Que raro, porque soy la única que se encarga de ello aquí en la casa.
-En ese caso me retiro, ya le dejé todo preparado el traje. Un placer conócela señora...
-Fionna. Mi nombre es Fionna.
-Betsabe Lombardo. - le estreché mi mano y me despedí.
Llegue a la empresa muy temprano, hoy le preguntare al jefe si debo o no debo prepararle el desayuno, porque me caga tener que levantarme tan temprano. Igual desde mañana planteare prepararle el traje por las noches así al día siguiente me ahorro ese trabajo.
Empecé a organizar el horario de mi jefe, citas, reuniones y demás cosas, cuando escucho el sonido del ascensor. Por el veo que sale mi apuesto jefe y Jesús; en serio ¿Tiene que tener ese ceño fruncido todo el tiempo?
Me dispongo a ir detrás de el para empezar mi trabajo.
-Buenos d....- no termine cuando fui interrumpida por el.
- ¿Se puede saber porque m****a no preparo mi desayuno como deje estipulado el viernes?
Me sorprendí, realmente me quede sin voz porque no entendía que podría responder cuando no hice nada malo. Cuando iba a hablar me volvió a interrumpir.
-Te estoy hablando señorita como sea que te llames. - abrí mi boca y lo volví a cerrar, pues que se creía este hombre.
-Antes que nada, buenos días señor Russo. Permítame aclararle el gran malentendido. Yo me presente a su casa y le deje todo listo lo que lleva puesto. - haciendo referencia su traje. - Cuando baje a la cocina.... - y me volvió a interrumpir el hijo de puta este, acaso no puede esperar a que termine de hablar?
- Decidiste no hacerlo y venir aquí. – exclama iraundo. Hice uso de toda mi cordura para no gritarle a la cara como tengo costumbre.
- Como decía, encontré a una señora cocinando, la cual me dijo que ella es la única que se encarga del desayuno y la cena. Así que sin problema alguno podemos comunicarnos con la señora. - Creo que no supo mas que decir porque automáticamente me cambio de tema.
-Mi horario por favor. – Estupido, engreído y sexi hombre bipolar.
-A las nueve de la mañana tiene una Reunión con todos los gerentes de la empresa, a las doce del medio día tiene un almuerzo con el Señor Thompson y a las dos de la tarde vendrá el señor Alexander de la empresa Maxwell & Asociados.
-Perfecto. Puedes retirarte.
- Señor una cosa mas, puedo colocarle bien la corbata, esta mal hecha. - viendo como realizo un nudo ni que fuera un niño. Se quedo observándome con intensidad, tanto que me sentí incomoda.
-Si; adelante. – contesta, poniéndose de pie. Me acerqué y empecé a realizar un nuevo nudo dejándole mas decente. Siempre se lo hacia a mi padre y pues yo debía aprender ya que mi uniforme de colegio requería de uno.
-Mi madre me dijo que esto implica ser asistente, ayudar en lo que sea cuando el jefe no se percata por la infinidad de trabajos que tiene. - me dio un asentimiento de cabeza y me retire.
Una vez en mi cubículo, me dispuse a trabajar, y bien que me pase a trabajar, porque el señor se encargo de hacerme saber. A parte de mandarme a traer su almuerzo, y advertirme que debo prepararle la cena.
Llegada la hora, me acerqué a la oficina, di unos golpes, pero nadie respondía. Volví a tocar, pero nuevamente pareciera que nadie había dentro y no quería retirarme sin avisar porque al señor se le ocurrió imponerme avisar mi salida. Así que decidí volver a tocar una ultima vez y nuevamente me ignoro, motivo por el cual ingrese a revisar; por si le paso algo o si ya se marcho, pero grande fue mi sorpresa cuando lo vi desnudo con una mujer. Creo que quedo quedó asustado cuando se giro a verme o vergüenza o que se yo.
- No sabes tocar la puerta estúpida. - me grito el puto este.
-Disculpe, me retiro. - realmente estaba avergonzada, en serio no sabia donde meter mi cara. ¡Dios! Trágame tierra y escúpeme el otro lado del mundo.
Sali corriendo de la empresa directo a su pen-house. Quería terminar antes de que el terminase su momento sexual. IU! ¡ME DIO COSITAS!
Me dispuse a preparar dos trajes, por si se le ocurría salir y después me dirigí a la cocina a preparar una rica cena. Cuando estaba colocando la mesa para el señor, escuche la puerta cerrarse, alce la vista y me percate que el señor acaba de llegar. Llego donde yo estaba con una cara de pocos amigos.
-Señorita, lo que haz visto no es lo que parece. - ¡Ja! pues yo si se lo que parece porque vi todito.
-No se preocupe, yo no vi nada señor Russo. - respondí seca, no me apetecía una discusión en estos momentos-- La cena ya está servida, si me disculpas yo me retiro.
Este hombre era sexy, atractivo, no obstante, todo eso se desvanecía con su mirada fría y tono arrogante. Y lo que menos quería en este momento era perder mi trabajo y ser un gasto para mis padres al tener que volver a mi país. Por ello trataba de hacer mi trabajo a la perfección, y de hoy en mas hare todo lo relacionado para evitar contacto alguno con el para mi paz mental y las de mis bragas.
DORIAN RUSSOMe ponía los pelos de punta, me sentía frustrado y excitado. No entendía porque de éste sentimiento de impotencia en mi; yo Dorian Russo me sentía atraído por una mujer que no me daba ni la hora. Es que en serio eso me enojaba.Recuerdo cuando me cerro la boca ese primer día, cuando quise regañarla porque no me preparó el desayuno. Admito que fue mi error no avisarle a Fionna, pero cuando ella me respondió con total educación y profesionalismo me sentí un completo idiota.Llevaba dos semanas trabajando, y realmente me ha sorprendido de lo bien que se ha desempeñado en su área, prácticamente está un pie adelante. Mis trajes los encuentro todo preparado, el desayuno cosa que me frustra porque la idea era molestarla, pero hasta el desayuno y la cena le sale bien, y para que negar que casi no la veo salvo en
BETSABE LOMBARDO.Después del encuentro con mi jefe y el gran malentendido que hubo quede con un mal humor del infierno: ¡que va! tengo al mismo satán metido en el cuerpo. O sea, nunca nadie critico mi forma de vestir y viene el con esos ojos hipnotizantes que vuelven loca a cualquier mujer a querer darme clases de moda. ¡JA! Pues que vaya a decirle como vestirse a su Lunita histérica.Y así pase esas dos horas y ahora estoy aquí, en un club, antro, pub o lo que sea bebiendo un poco para desestresarme. Quiero estar sola, pensar en mi vida en medio de este bullicio.Que inteligente eres Bet.-Hola. - escucho a mis espaldas. Quien quiera que sea esta arruinando mi momento de paz.Decido ignorar. Que no insista.Que no insista.Que no insista.- ¿Porqué me ignoras? - Mierda! Porqué la gente no puede respetar el espacio de una persona que te i
- ¿Usted es el imbécil cara de estiércol? - digo en un susurro que solo yo entiendo en mi español.- ¿Cómo dices? - Pregunta al no lograr entender lo que digo.-Nada. Solo te informo que yo no tenía culpa alguna de que hayas chocado conmigo. Me haz tratado muy mal.- ¿Te acuerdas de mi? - pregunta con deje de emoción en su rostro y una sonrisa. Que bonito se ve.- De recordarte lo hago, pero ciertamente no te he mirado el rostro. Estaba desorientada, y cuando quise ser amable me gritaste.-Lo siento. No fue mi intención. Pero quería que me recuerdes. - dice un tanto avergonzado. - Realmente fue una sorpresa para mi ese día que te presentaste a la oficina.- ¿Me contrataste solo porque te grite? De haber sabido hace tiempo ya tendría trabajo. - digo esto ultimo mas para mi.-Al principio si, y no te enojes por ello. - no que va, claro que no me voy a en
DORIAN RUSSOSiento una molestia en el rostro, la claridad da comezón en los ojos, intento abrirlos, pero la luz golpea con todo. Como se me ocurre dejar las cortinas abiertas.Una vez que la vista se adapta a la luz, me levanto y me dirijo al baño, me doy una ducha relajante para después vestirme con ropa casual y dirigirme a la cocina. Imagino que Bet sigue dormida. Bet, Betsabe; suena tan bien, me deleito con su nombre en mis labios. Rememorar el beso de anoche hace que me ponga duro. Se que le gustó, cuando me dio acceso a su boca sentí una sensación extraña, como si una corriente invadiera todo mi ser. La bese como si mi vida dependiera de ello, arrancando un gemido de sorpresa y placer de sus labios. La apreté a mi cuerpo con posesividad animal. Nuestras respiraciones agitadas eran lo único que se escuchaba en toda la habitación. Nos fundimos en ese beso donde dejamos vaga
La mañana del lunes fue un tanto difícil, me he despertado tarde, no dormí nada en la noche. Me pase pensando en la chiquilla. Últimamente no sale de mi cabeza y eso me tiene de mal humor. Una vez en la oficina me dedico a trabajar, cada tanto la veo, pero trato de ignorarla, de no darle mucha atención y aunque se me hace difícil lo logro. Sin embargo, a ella parece no afectarle mi indiferencia. -Señor hay unos documentos que debe firmar antes de la reunión de las 15 horas. - Extiendo el brazo para que me pase los documentos, ni siquiera levanto la cabeza del monitor para mirarla. Ella me facilita y espera a que lo firme todo para luego retirarse. Me permito observarla marchar cuando me da la espalda.Una vez afuera, me recuesto y un sonoro suspiro sale de mi. Esto es cada vez más difícil. Me quedo impregnado por su aroma que ha quedado en el aire, esa manera tan sutil y elegante de vestir la hace
BETSABE LOMBARDODespués de la gran conversación que tuve con mi jefe donde me había pedido tener sexo con él, la semana transcurrió sin ningún problema. Fui lo más profesional posible, no quería ni quiero arriesgar mi trabajo. Es difícil porque Dorian me gusta y mucho pero no es correcto, menos ahora que estoy siguiendo por fin un tratamiento con un buen psicólogo, que me ha recomendado el amigo de mi padre. Me hice muy amiga de él; digamos que es como el padre que no tengo aquí. Por otra parte, mi madre está con su tratamiento, volvió a decaer así que le propuse venir a vivir aquí por un tiempo ya que la situación con respecto a la salud está muy mala allí pero no aceptó, y eso me tiene muy preocupada. También estuve hablando con mi amiga, y me dijo que la situación está cada vez
Estamos sentados aquí compartiendo con los nuevos socios de el Señor Russo, la reunión ya a acabado y efectivamente logramos firmar el acuerdo que era de suma importancia para la empresa donde trabajo. Desde hace rato siento estar siendo observada; miro con disimulo por todo el lugar; no obstante, no veo nada.-Sucede algo Bet. - pregunta Dorian al percatarse de mi nerviosismo quizá. -No, solo que me siento observada pero no logro captar de donde proviene. Quizá esté paranoica. - el me mira con el ceño nuevamente fruncido y disimuladamente empieza a observar todo el lugar. Tengo un mal presentimiento. Realmente no se que me pasa, pero un miedo invade mi cuerpo. Terminada la reunión decidimos retirarnos, opto por ir a mi habitación a cambiarme para poder hacer algún recorrido.-Te gustaría salir a recorrer conmigo - pregunta con un atisbo de duda el señor Dorian.-Yo... eh.
DORIAN RUSSODespierto todo adolorido. Anoche no pude dormir por estar preocupado. Bet estaba siendo buscada por alguien de su pasado y eso me intrigaba. Ella tenía miedo y con Rene pudimos darnos cuenta de eso al verla temblar. La deje descansar, para que despejara su mente.Ayer después de la reunión, en ese paseo exprés pude darme cuenta de cuanto me gusta. La atracción es inminente entre ambos. Conversamos de tantas cosas, pude conocerla más y me sorprendió el hecho de que me admirara. Si. Me admira y se que lo dijo con total sinceridad. Ella no es como las otras mujeres, Bet es de las que quedan pocas, de las que sonríe por cualquier cosa, así como también te dice las cosas que la molestan sin ningún tipo de pudor, pero con toda la educación que requiere. Es buena en su área, es buena con los números aunque diga que no es lo suyo, y admito que es una de las mejores secretarias que he contratado y jamás creo poder arrepentirme del impulso de a