Salimos ágilmente del tren y caminamos unos minutos hasta llegar al taller.
Entramos con mis llaves, todo debe ser secreto, al menos para la gente que verá el desfile.
Al entrar me encuentro con los chicos que están tejiendo a máquina y perfeccionando.
- Hola Leah. - me dice un chico de pelo rizado y piel cobriza.
- Hey, ¿Cómo va todo? - este chico es tan simpático.
- Todo va bien, hace unos días Catalina nos dio el tallaje de las veinticinco modelos y estamos perfeccionando la talla de cada una. - se le nota preocupado, se rasca la nuca un poco nervioso. - Ninguna ha venido a probarse nada, solo tres de ellas, las amigas de Rachel, las demás solo me han llamado por teléfono para decirme que no han subido de peso, y que siguen manteniéndose en forma.
- Connor eso es más que suficiente, con eso podemos trabajar tranquilos, vosotros seguid con los vestidos, yo ahora me llevo a Silvia para que me ayude con el diseño de Rachel. - ya me estaba alejando de él, cuando levanta la mano para llamarme la atención.
- Silvia ha adelantado muchísimo de la falda, no se atreve a hacer la parte del pecho y demás. -
- Oh, no te preocupes, ella está haciendo un gran trabajo. - le dedico la mejor sonrisa.
Al llegar al puesto, veo a Silvia cosiendo algunos apliques del vestido, nos saludamos y sin tardar demasiado nos ponemos a trabajar.
Rachel está llena de telas y alfileres, aguantando telas.
Ella parece no importarle, habla con su novio y mira las redes sociales.
Por mi parte, las tijeras y la máquina de coser es mi mayor entretenimiento, intento ser precisa para acabar con las medidas, los demás días solo perfeccionaría detalles y empaquetaríamos para el gran viaje.
Llegó el día que todos estábamos esperando, el día que partiríamos a Londres.
Me desperté a les seis de la mañana, aunque ya estaba medio despierta, estaba tan nerviosa que ni dormí.
Me vestí con unos tejanos azules ajustados, con roturas en las rodillas, una camiseta blanca estampada y una chaqueta tejana.
Agarré las maletas y sin desayunar, cerré el piso y me fui hacia el taller para encontrarme con mi equipo e ir todos juntos.
El metro estaba vacío, excepto de los trabajadores que sin muchas ganas iban a trabajar, todo lo contrario de mí, que estaba súper emocionada.
Bajé del metro casi corriendo y me encontré con mis confeccionistas, todos tenían caras de emoción, detrás estaban las modelos, algunas con caras de asco, algunas con frío y otras muy emocionadas, entre ella estaba Rachel y sus amigas.
- Leah, ¿Estás emocionada? - pregunta Rachel con emoción.
- Estoy muy nerviosa pero muy emocionada al mismo tiempo. -
Las tres chicas estaban detrás de Rachel, parecían un poco tímidas.
- Lo haréis genial chicas, sé que sois buenas en esto, y seremos las seleccionadas por Lewis , esto solo acaba de empezar. -
Después de algunas charlas y fotos para rememorar, nos montamos en los coches de algunos compañeros que se ofrecieron a llevarnos, y después de meter las maletas y colocarnos bien, nos dirigimos hacia el aeropuerto.
Estaba nerviosa y hambrienta, y me paré en la cafetería para agarrar un sándwich de queso, que prácticamente lo devoré en cinco minutos, pasamos todos los controles que teníamos que pasar con paciencia, y al cabo de dos horas nos subimos al avión, preparadas para dos horas de viaje.
Durante el trayecto me puse con la tablet a diseñar algunos diseños, me quería centrar en vestidos de gala, pero al mismo tiempo sexy, sabía que era complicado pero intentar sobresalir de lo normal era lo que yo buscaba con más codicia en este mundo, que me conozcan en todo el mundo, que vean que me puedo colocar entre los mejores diseñadores, y eso iba a pasar tarde o temprano.
Mientras yo hacía mis bocetos provisionales, Rachel estaba durmiendo a mi lado con la boca medio abierta, parece que el avión le está relajando mucho.
Las modelos hablaban, parece que algunas también están nerviosas.
Y los confeccionistas hablan de como preparar a las modelos, ya que en el desfile habrá maquilladores y peluqueros, supongo que hablan de cuadrar a cada chica con el tipo de vestido.
Después de dos horas justas, las azafatas preparan a los pasajeros para el aterrizaje, desde luego y lo poco que puedo ver, es que Londres es preciosa, tal y como dicen los libros y la televisión.
Nos llevó más de lo esperado recoger las maletas, tanto tiempo que mi única maleta no salía.
- Dios mío, ¿Dónde está mi maleta? No se puede perder, es de color verde turquesa, no se pierde tan fácil. - digo entrando en pánico.
- No hay de que preocuparse, te acompaño a recepción y preguntamos en un momento. -
Asiento y con vergüenza me asomo a la chica que estaba en mostrador.
- Hola, disculpa, creo que han perdido mi maleta, llevo mucho tiempo esperándola y tengo un poco de prisa. -
- No se preocupe, no tenemos ningún aviso de maleta extraviada, ¿Me puede enseñar el boleto de abordaje? -
Le muestro con un poco de impaciencia.
- Oh, no hay de que preocuparse, parece ser que la han puesto en una línea diferente, ahí la encontrarán. - dice con una sonrisa amable.
Le agradezco la ayuda y voy casi corriendo hacia la línea que debería estar, y veo como la gran maleta sale lentamente hacia mi.
Con alegría, tiro de la asa y la dejo en el suelo, parece que estamos preparados para la aventura.
Nos subimos en taxis que eran como pequeñas furgonetas, el ambiente es húmedo y para nada soleado, parece que lloverá pronto, aunque no es sorpresa, Inglaterra siempre es así de lluviosa.Los taxis paran justo delante un hotel, es muy lujoso, parece que Catalina ha hecho un buen trabajo escogiendo el hotel.Nos bajamos todos con notable emoción en el rostro.Al entrar en el hotel, nos sorprende lo lujoso y espacioso que es, todo de color blanco, con el suelo de madera, perfectamente cuidado y brillante, con las paredes blancas y muebles grandes y de madera oscura, dos sofás vintage blancos de cuero descansan a cada lado de la estancia, acompañado de una gran alfombra roja con un gran jarrón con plantas artificiales, y para culminar este gran escenario, una gran lámpara de araña colgaba del techo.Con determinación nos acercamos al fondo dónde está recepción para que nos den las llaves de las respectivas habitaciones.Cada uno por
No puedo gesticular ninguna palabra, solo se me llenan los ojos de lágrimas, pero no de tristeza, sino de impotencia, había llegado tan lejos para acabar de esta manera, ¿Cómo es posible? ¿Ladrona? No he robado nada, no entiendo nada.- Leah, te prometo que voy a intentar arreglar todo esto, por favor no llores. - se acerca y me abraza para reconfortarme. - Voy a quedar con él y saber que pasó, pero voy a seguir luchando para que sigas teniendo una oportunidad. - se aleja de mi y se va casi corriendo por dónde se fue Lewis.Las horas pasaron, y por fin los ensayos se acabaron, todos se fueron, cansados de estrés, menos yo.Rachel se ofreció a quedarse, pero yo preferí que me dejara sola, no me apetecía hablar con nadie.Yo seguía mirando el vestido dorado, que ahora colgaba de una percha, ya cansada, me siento en una de las sillas negras, delante de la pasarela.Seguramente jamás veré mis diseños encima de esta pasarela, se
Recuerdo que se hospedaba en el mismo hotel, en la primera planta, creo que es una buena idea darle las gracias en persona, y agradecerle el gesto de las flores.Salgo de la habitación y voy al primer piso, a la derecha, toco tímidamente la puerta esperando a que sea la suya.Un Chandler sonriente me abre la puerta y me invita a entrar, al entrar, cierra la puerta suavemente.No he estado en una habitación con Chandler desde que éramos adolescentes, me está haciendo recordar momentos muy lejanos, pero muy tiernos al mismo tiempo, eso me atrae.- Supongo que recibiste mis flores. - dice con una sonrisa pícara.- ¡Los claveles! Son mis favoritos, no pensaba que te acordarías. - no sabía donde meter las manos.- Por supuesto que me acuerdo, me acuerdo de todo lo que me has dicho, todos estos años he recordado cada detalle de ti, cada película, cada comida, todo. -Los dos estamos en pie, cerca del otro, mirándose a
⚠️ Atención⚠️ Este capítulo contiene escenas explícitas y puede no ser del agrado de todos los públicos, puedes saltar la escena e ir más abajo si no te apetece leerla.⚠️⚠️Mientras bailábamos, no perdía el tiempo acercándose a mi, lo hace con ligereza y decididamente.Al rato, lo acompaño a su habitación de hotel.Estoy ebria y me cuesta un poco caminar con los tacones, intento no caerme de cabeza contra el enmoquetado suelo del hotel.Entro en su habitación y casi sin poder sostenerme, me siento en la cama.¿Estoy ebria? Sí, pero me siento tan feliz y despreocupada, que estoy segura de que floto entre las nubes.- Así que eres una diseñadora de moda. - dice tomando un trago de agua de la pequeña nevera de la habitación. - Eso debe ser emocionante, los desfiles, la dificultad de crear diseños impresionantes. -- Siempre ha sido mi sueño desde que tenía memoria, la verdad es que me encanta. -- Y has
Recogí todas mis cosas en un momento y nos encontramos todos en la entrada del hotel.Al salir de la habitación, desafortunadamente me vuelvo a encontrar con Rachel y David en el pasillo.- Rachel, muy amable de tu parte haberme abandonado ayer, y menos cuando ves que estoy hablando con alguien que no conocemos. - digo enfadada.- Oh, ¿De qué te quejas? Parece que te fue bien sin mí. Y parece que tu también tuviste una noche llena de placer, pude oírlo. -- No sabes de lo que estás hablado, es muy rastrero haberme dejado sola y desaparecer sin decir nada, no te costaba acercarte y decirme que te ibas, y yo valorar si me quiero quedar o irme contigo al hotel, eso no es de ser una buena amiga, me podría haber pasado algo malo Rachel. -- Honestamente odio el drama, David y yo nos vamos de aquí, ciao. - dice dándome la espalda y dejándome sola.Ya en el aeropuerto hicimos todos los trámites para volver a nuestro país.Ot
Salgo con las pruebas y me siento en mi escritorio, mirándolas fijamente.- Oye jefa, acabo de tener una idea interesante. - dice Catalina entrando en mi despacho, sin tocar a la puerta.Ella nota mi mirada en el rostro, se acerca a mi rápidamente.- ¿Va todo bien? - dice mientras se sienta delante del escritorio, en ese momento se da cuenta de las pruebas de embarazo positivas en mi mano.- Supongo que es una noticia inesperada. -- ¿Sabes que es lo que está mal? Ni siquiera sé el nombre del padre. - digo con los ojos llorosos.- ¿Qué vas a hacer? Quiero decir, ¿Te lo vas a quedar? -Antes de que pueda contestar, el teléfono del escritorio empieza a sonar.Catalina alarga el brazo para agarrarlo y contestar.- No lo hagas. - digo en un hilo de voz. - Deja que suene, no puedo hablar con nadie ahora mismo. -Después de unos segundos, el teléfono deja de sonar, y se conecta el contest
Al llegar a casa pienso en llamar a Chandler, para aceptar su jugosa oferta.Después de una hora más o menos, tengo la entrevista programada para el día siguiente.¡Londres allá voy!Compro un billete de avión económico para hoy mismo, y me aseguro de que Catalina vuelva a reservar el mismo hotel que la vez anterior.Hago mis maletas rápidamente con lo que puedo necesitar para unos días.Y en unas cuantas horas me encuentro subida en el avión, no tenía previsto irme hoy mismo a Londres, pero estoy segura que es mejor tomar estas decisiones en caliente.Al momento de bajar del avión me pongo a esperar mi maleta de color tan poco frecuente.Juro que si vuelven a perder mis maletas, voy a enloquecer, no puedo permitir volver a perder tanto tiempo.Mientras estaba inmersa en mis pensamientos delante de las cintas de equipaje, un apuesto extraño pasa junto a mi.Lleva una capucha negra q
- Intenta no parecer demasiado impresionada, a nuestro cliente no le gustan los mirones, y una advertencia, puede ser muy difícil de manejar. -Lewis me da un golpecito en el brazo y ves a una hermosa chica bajar por una de las escaleras.- Lewis, supongo que recibiste mis diseños, lo necesitaré para el fin de semana. - se acerca a nosotros con una elegancia que me deja desconcertada.- ¿Fin de semana? ¿Cómo es posible? - pregunto sorprendida.Tanto Lewis como la joven se giran para mirarme.- Por favor, no hables mientras me dirijo a Lewis. - dice con cara de asco y dándome la espalda.- Pero ella tiene razón, una semana no es suficiente tiempo para estos diseños con tantos detalles. - dice Lewis con calma.- ¡Anunciaré mi compromiso con el Príncipe de Inglaterra este fin de semana! Todo tiene que ser perfecto, y tendré ese vestido, si no lo tengo en el tiempo estipulado, tu casa de moda tendrá mucho que