Después de que el príncipe me dejó, el dolor en mi pecho no se ha ido. Solo espero que todo esto acabe. Detesto sentirme así: Triste, angustiada, celosa y culpable.Veo que ya amaneció, y otra vez no pude dormir nada, desde que conocí a Harry, mi vida es un desastre.Me levanto, y arrastro mi ser hasta al baño, me miro en el espejo, y no reconozco a la persona que veo, estoy demacrada y demasiado ojerosa, mis ojos están sin brillo, ¡Cómo te odio Harry!No puedo evitar llorar. ¡No puede ser, otra ves llorando! Hasta cuándo me voy a sentir mal.Salgo del baño, y decido a costarme de nuevo, no tengo ánimos de nada. De pronto se abre la puerta, y escucho la voz irritante de mi tía:—¡Kate sigues durmiendo! No puede ser, levántate, la reina te espera a desayunar.Camina hasta la cama, y me descobija. —Anda niña, no tenemos tu tiempo.Me levanto, y enseguida que me ve dice: —Estas horrible, ¿Qué te pasa?No digo nada, porque no tengo ánimos de nada, y mucho menos de pelar con esta mujer.
Al escuchar ese grito de inmediato, páramos. Por suerte es una mucama. Harry de inmediato se levanta, y yo hago lo mismo. Estoy tan apenada, que sólo agacho la cabeza. Harry se acerca a la mucama y le dice: —Tú no viste nada, estamos. —Si su Majestad. Se acerca a mi, y me susurra al oído: —Tú y yo no hemos acabado. En cuando dices esas palabras, el enojo se me sube, ¡Este hombre están insufrible! Porque no simplemente me deja en paz, tengo tantas ganas de gritar, y decirle sus verdades, pero sé que sería un escándalo de grandes proporciones. Me toca la cara, y le quito su mano, y sale si antes repetirle a la mucama: —Tu no visito nada, tu silencio será recompensado. Me quedo sola con la mucama y le pido disculpas, sin poder mirarla a la cara. —Señorita, no se preocupe, esas cosas pasan cuando dos personas se quieren. —¡El príncipe quererme! No me hagas reír, eso hombre no sabe que es eso, pero yo soy una tonta, por caer en su maldito juego, no sé que voy hacer. —El príncipe l
El príncipe sale del despacho, sintiéndose el hombre más repugnante del mundo. Porque él cree que está obligando a casarse a Lady Kate con él. —Pero que más podía hacer, suficiente problemas le he causado ya, y no puedo permitir que por mi culpa la lastimen, aparte del hecho que estaría arruina ante la sociedad. ¡Odio todo esto, que estoy sintiendo!Nunca en mi vida había experimentado tanto sentimientos por una persona, ella me hace sentir: Vulnerable, apasionado, furioso, celoso, y siempre deseoso de verla y de tomarla entre mis brazos.Estos días sin verla fueron un verdadero infierno. Ahora solo queda esperar, quizás con el tiempo llegamos hacer un buen matrimonio.❤️—Kate vete a tu cuarto, necesitamos hablar, la reina y yo, y por favor no salgas de allí, hasta que vaya a verte—dice mi padre.—Si padre.Salgo, con la cabeza agachada, en estos momentos me gustaría que se abriera la tierra y me tragara, siento que esto es cómo un sueño, todo a pasado tan rápido.Levanto la mirada,
He permanecido en mi recámara está última semana. Mi padre a decido que saldré hasta la boda de mi hermana. Me dice: No quiere que comenta más imprudencias. Lo he obedecido, porque todavía siento culpa por todo lo que pasó. Pero cada minuto que pasa me siento, más sofocada en verdad como: ¡Odio estar encerrada! Ya no puedo más. Me levanto, y decido ir a cabalgar, son las 4:30 a.m. A está hora todavía no hay nadie en la caballerizas. Me cambio, y salgo. Enseguida siento cómo el aire en mi cara me llena de energía y vitalidad. Llego a la caballerizas y veo a mi «Libertad», me acerco y le digo: —Hola preciosa, perdón por no venir a verte, pero estoy encarcelada—sé que no me entiende, pero decirle porque no vine a verla, me hace sentir mejor, para mí esta yegua es muy especial. Salimos, y cabalgo despacio no quiero que nadie se de cuenta que estoy aquí. Cabalgo, y decido explorar un poco, ya que siempre cabalgo, por los mismos lugares. Pasan un par de minutos, y escucho un río, decid
Harry sigue caminando de un lado a otro, decido caminar hacia él, lo detengo, miro sus preciosos ojos, y le digo:—Harry, me casaré contigo, trataré de ser la mejor esposa, solo tenme paciencia, no me gusta que me den órdenes. Tenemos que encontrar la manera de comunicarnos mejor.Él me mira diferente, con sus manos toma mi cara, y me da un pequeño beso, se separa de mi, y dice:—Ok, pero no quiero que vuelvas a salir sola, es peligroso, y más cuando anunciemos el compromiso, el reino tiene enemigos, y te podrían hacerte algo.Esas palabras me asustan un poco, ¿Quien querrá hacerles daño? Al final digo :—Esta bien, es que odio estar entre cuatro paredes, siento que me voy a volver loca.—Déjame solucionar eso, pero solo saldrás conmigo, o con un acompañante que te asignaré.—¿No crees que estás exagerado?—No Kate.—Ven, hay que darnos prisa, te voy ir a dejar.Enseguida que dice esas palabras, me asusto, si él me va dejar, mi padre pensará lo peor.—No Harry, si vas conmigo mi padre
Escucho a mi padre carraspear, y decir:—En que quedamos su Majestad.—Perdón mi Lord no volverá a pasar—, y Harry me baja.—Ya que estás aquí Kate—dice mi padre—Mañana se hará un baile, para anunciar su compromiso.—¡¿Mañana?!—Si, y por favor no quiero más problemas, así que esto va para los dos compórtense, y dejen las muestras de amor para después de casados. Anda Kate despiste del príncipe. —¡Buenas Noches, Su Majestad!—¡Buenas noches mi Lady! Mañana mi madre estará aquí para buscarla—me besa la mano, y enseguida siento esa corriente, me sonrojo, y él me da una sonrisa encantadora.—Bueno me voy, ¡Mañana nos vemos su Majestad!—, hago una reverencia, y me voy a mi recámara.En seguida que llegó, abrazo a Emi, no puedo explicarlo pero siento una felicidad, que invade todo mi ser, es la sensación más hermosa que he sentido. Saber que Harry me ama, me hace inmensamente feliz.—Señorita, ¿Qué pasó? ¿Se encuentra bien?—Si Emi, Harry me ama, y yo a él. —Se lo dije señorita, que
Estos días sin ver a Harry, se me han hecho tan largos, lo extraño más de lo que imaginé, y eso que apenas lleva 3 días fuera.Estoy en mi sala dibujando un retrato de él, cuando lo termino, lo abrazo. Pero soy interrumpida por la voz de mi querida amiga Amelia. Me levanto, y voy hacia ella.—¡Amelia! Que felicidad tenerte aquí, pensé que te habías regresado a Estados Unidos.—¡Cómo crees! No me iría sin despedirme, lo que pasa es que hemos viajado mucho, por los negocios de mi marido. Pero ya me enteré de que te casarás con el príncipe Harry. Lo sabía ustedes tenían algo, se les veía en los ojos.—¡Ay amiga! Soy tan feliz, estoy muy enamorada. Harry me hace sentir tan viva, tan feliz.—Que bueno, amiga, me da muchísima alegría verte así, te lo mereces. ¿Cómo tomaron la noticia tu hermana y tu tía?—Pues… Mal era de esperarse, pero no las culpo las cosas se dieron de una manera rara. Lo que espero es que algún día, Edith me perdone.—¡Ay Kate! No supongo que eso pase, me gustaría deci
El príncipe Harry va llegando de su viaje, resolvió el problema que tenía un día antes. Está desesperado por ver a Lady Kate, la ha extrañado muchísimo. Llega al palacio y observa que hay demasiados guardias y soldados. Entra y ve a su madre hablando con un guardia de seguridad, lo voltea a ver y su cara está demasiado demacrada, y los ojos llorosos. El príncipe piensa que su padre ha fallecido, pues su madre solo estaría así por esa causa. Se acerca a ella y le dice:—Madre ¿Qué pasa?—Hijo a pasado algo horrible... Kate—, la reina rompe en llanto.—¿Qué le paso a Kate?—dice la el príncipe Harry desesperado.—La han secuestrado los franceses.—¡¿Qué dices?!—, el príncipe se toca su cabello signo de que la noticia le ha impactado—Hijo se la llevaron hace dos días, tengo a más de mil hombres buscándola, pero no hemos tenido éxito.—Pero… ¿Cómo diablos paso eso? Vincent debía protegerla, sabía que ese malnacido del Rey Francis, se vengaría por haber rechazado a su hija… Pero nunca creí