— ¡¿Que quieres ahora?! — Preguntó Samantha alterada. — ¿No vas a dejarme ni siquiera nadar en paz? — Reclamaba a Leonard. Él dudó por unos instantes sobre que decirle a Samantha, pensó que ella estaría tan molesta que atentaría con su propia vida y ahora se sentía como todo un estúpido por haber pensado así de ella. — Solo… No quería que estés molesta conmigo. — Decía Leonard mientras su mirada azul veía con atención a la hermosa mujer salir del agua. Como si hipnotizado estuviera, su ojos no se apartaba del sensual cuerpo de su prometida. — Cancela cualquier cita próxima con esa mujer por siempre y haré de cuenta que no dijiste nada en la cena. — Samantha se detuvo frente a Leonard cruzando sus brazos y viéndolo molesta. Él apartó su mirada de ella en ese instante. — Sí, lo haré, pero, deberías ponerte algo de ropa… — ¿Eh? — La Joven se volvió a ver a si misma, para después sonreír con malicia mientras veía nuevamente a ese hombre. — ¿Te pone nervioso? ¿Por qué? ¿Quieres prob
Poco más de media hora después. Samantha posaba sus hermosos ojos verdes en el paisaje nocturno observando a gran distancia, los edificios coloridos gracias a las miles de pequeñas luces nocturnas parpadeantes. "Hace unos instantes caminaba en bata de un lado a otro en una habitación de la que me siento siempre presa y ahorita, estoy aquí, en un yate del señor Ivanov disfrutando del paisaje nocturno de la ciudad" "¿Hace cuanto no hacía esto? ¿Cinco meses quizá? La última vez… Salí con Andrew a una fiesta en el barco de uno de sus amigos, bailé y tomé, fue divertido, incluso jugué con los chicos y gane algunas apuestas, recuerdo que uno quería sobrepasarse conmigo y mi hermano le dio una paliza, eso me asusto un poco pero parecía que los presentes lo disfrutaron" La joven recordaba con nostalgia uno de los últimos momentos disfrutados con su querido hermano mayor. "Él siempre estaba buscando sacarme y d
Samantha se había puesto de pie caminando al sector del salón cuya pared de cristal permitía la vista nocturna al exterior de la parte izquierda del yate, un sentimiento de incomodidad la invadía; sabía que debía avanzar en el plan sin dudarlo, de lo contrario terminaría en las garras de ese hombre sin saber nunca la verdad que tanto deseaba encontrar. — Voy a hacerlo, convenceré a Leonard de salir conmigo y dejaré que tú te ocupes del resto, sin embargo… Tienes que decírmelo todo, no ocultar nada que puedas encontrar así sea la pista más pequeña, aunque sea algo difícil de creer o que pueda herirme… ¿Entiendes? — ¿Te preocupa que tú hermano esté muerto? — Preguntó Luka de inmediato. En ese instante, Samantha volvió a verlo. — ¡Por supuesto! — Exclamó la joven. — No se si fue o no fue Leonard, pero sé que está involucrado y sabe más de lo que me ha dicho ¡Solo espero que no le haya puesto ni un dedo encima a Andrew por
Leonard ingresó a la habitación de Samantha observando a distancia que "ella" parecía estar dormida, él se acercó sentandose en el borde de la cama viéndo con nada más que la ligera luz de una lámpara distante, la claridad de la puerta abierta que daba al pasillo y una de las ventanas cuyas cortinas no habían sido cerradas. "¿Por qué estará tan cobijada? La temperatura está programada idónea" Pensó por unos instantes. Sin embargo, no le dió mucha importancia y continúo observando a "su prometida" que seguía "durmiendo" gracias a la oscuridad y lo cobijada que estaba la chica en cuestión, ha Leonard nunca le pareció sospechosa. "No debí discutir con ella, no… Ni siquiera debí decirle aún lo de Patricia, sabía que no lo tomaría tan bien"Pensó Leonard observando a "Samantha dormida" "No pude hablarle tampoco del viaje que tengo pensado hacer con ella, espero que eso no solo la ayude a relajarse más si no ta
9:30 am. — ¿Aún no ha despertado? — Preguntó Leonard a su secretaria quien recién ingresaba a la oficina en la mansión Campbell. — No señor, la señorita Thompson sigue dormida según me informó la sirvienta a su cargo Clarisa. "Que extraño… Si ella se fue a descansar tan temprano ¿Por qué sigue durmiendo? ¿Estará enferma? No, quizá lo hace a propósito, debe seguir molesta conmigo por lo que le informé, no quería hacerlo, pero tendré que cancelar todo con Patricia" — Dile a Juliana que preparé los platillos favoritos de Samantha, así mismo tomaré el almuerzo con ella en el jardín trasero. — Si señor. — Decía Angelina saliendo de la oficina. *****Samantha recién despertaba, sintiéndose bastante exhausta. Recordaba que volvió faltando media hora para las cuatro de la madrugada y había una mujer extraña en su habitación, que le explicó todo lo sucedido en la mans
Reina recordó que hace unos tres días atrás, su abuelita y ella tuvieron una reunión en la cual hablaron de varios temas, entre ellos, Luka; ya que la bella mujer rusa tenía que cumplir su trabajo como ayudante de la empresa y a su vez, como la vigilante de su hermano, que aunque fuera alguien capaz solía dejarse llevar fácilmente cuando el tema incluía a Chelsea Smith, lo suficiente, para no prestar atención al "terreno" donde se metía. Leonard Campbell, así como la familia Thompson no eran personas con las que ellos quisieran tener problemas, pero sabía que su hermano seguía cegado por la venganza. Sin embargo, había algo más…Un pequeño detalle del que se enteró recientemente pero lo suficientemente drástico que tenía a Reina con los nervios de punta queriendo que su hermano esté lo más lejos de Samantha posible. — No confío en ti, al menos no para eso. Las frías palabras dichas por la mujer tras el es
El médico del hospital privado con el que Leonard tenía conecciones le atendió de inmediato. — ¿Ella está bien? Tengo entendido que le encontraron desmayada en su habitación. — Preguntaba Leonard al doctor Hans. — Tengo malas noticias señor Campbell, tras el desmayo, se realizó un chequeo general, se hicieron todas las pruebas necesarias y aunque aún faltan muchas más, las primeras arrojaron resultados desfavorables, cuando su tía recobro la conciencia nos ayudó a saber lo que sucedía. — No ande con rodeos, dígame de una vez de que se trata. Fue en ese momento que el médico comenzó a explicarle de la enfermedad detectada en su tía y que al parecer ella misma ya lo sabía y lo había mantenido oculto, una grave que para desgracia de la buena mujer, ya se encontraba en fase terminal. — ¿Ella fue la que le pidió que me lo dijera? — Si señor Campbell, ella no quiere verlo, al menos no por ahor
9: 30 am. "Por fin…" La joven rubia abrió sus bellos ojos de un tono miel claros, seguidamente se sentó en la cama sonriente sin poder contener la emoción. — ¡Este día me siento con todos los ánimos del mundo!Decía mientras salía de la misma y hacía algunos estiramientos matutinos. Caminó hasta la puerta doble de cristal, abriendo una de ellas y asomándose en el balcón de su nuevo departamento. "Extrañaba la vista del parque, extrañaba la ciudad donde nací y crecí" Con ese pensamiento en mente; Chelsea Smith, finalmente había regresado a New York. La bella mujer de exquisitas curvas, así como un cuerpo alto y atlético escuchó el sonido de su teléfono celular, de inmediato ingresó y lo tomó en sus manos lanzándose a la cama y contestando a la llamada. — Hola Jackson, acabo de despertar iré para allá enseguida. Chelsea tenía varios