FLASHBACK DE CUANDO ZEYNEP LE DISPARARON. POV EMMAMordía mis uñas de los nervios y la preocupación ahora por Zeynep.¿Por qué mierda se iría de la clase?, ¿a dónde habría ido?, ¿debería de llamar a Noah?Esa mujer tenía algo raro desde que llegó de Rusia.Saqué el teléfono para marcarle a mi hermano cuando Zeynep entró por la cafetería muy...feliz.— ¿En dónde estabas? —curioseé en cuanto llegó a nuestra mesa. Siempre nos sentábamos en ella—. Te perdiste por quince minutos. ¿Acaso pondrás una bomba? AlashalmRio y solo negó.Estaba rara.— ¿De dónde sacas tantas cosas?—No lo sé —ladeé un poco mi cabeza y achiqué mis ojos mirándola, algo pasaba—. Te noto distinta, ¿Qué será?—Nada —dijo rápidamente. Como lo pensé, algo pasaba—. Vamos, no puedo tardarme tanto, Noah vendrá a recogerme en media hora.Habíamos acabado ya todas las clases del día y justo ahora no quería salir de la cafetería. ¡No iba a poder!— ¿A dónde? —la miré confundida.—A la facultad de artes —ah con que era eso. M
PARTE DOS FLASHBACK EMMAAbrí los ojos lentamente para acostumbrarlo a la luz de la habitación. Sentía como si un camión me fuera arrollado, estaba tan cansada que respirar era tan difícil.—Cariño —escuché a Ana y fijé mi vista en ella—. ¿Cómo estás?, ¿Cómo te sientes?Tenía los ojos rojos y estaba muy demacrada, lo que me confundió.—¿Q-Qué pasó? —pregunté totalmente confundida con la situación—. ¿Por qué tienes cara de muerta?, ¿por qué estoy aquí?—¿No recuerdas?—¿Qué cosa?, ¿por qué estoy aquí? Se supone que debería de alcanzar a Zeynep. ¿Qué hora es? Dile que lo siento, más tarde la recompensaré —sus ojos se pusieron vidriosos y rápidamente las lágrimas cayeron—. ¿Por qué lloras, mamá?Intenté sentarme, pero el dolor en mi abdomen bajo lo impidió, nunca había sentido este tipo de dolor tan fuerte y agudo.—N-No te muevas, no puedes moverte cariño. Tuviste —se detuvo y suspiró, la miré confundida—. Tienes que descansar, estas embarazada y afecta... ¿ok?—No estoy entendiendo nad
— ¡Zeynep! —escuché mi nombre en un grito, no tardé mucho para sentir como se abalanzaba hacia mí.Mi espalda. —Creí que ya habíamos hablado sobre esto —recordé, haciendo referencia a su delicada forma de saludar—. Terminaré sufriendo de dolores de espalda al terminar la carrera, por Alá que no suceda, necesito estar sana.—No te vi en todas las vacaciones —reprochó Emma, bajándose y dejando libre mi espalda, lo cual agradecí internamente—. Deja tu dramatismo, ese es mi saludo donde te expreso cuanto te extrañé estas vacaciones.—También te extr… —Una voz mucho más fuerte me interrumpió.—Hoy te llevaré yo. No te vayas a tardar, odio esperar —parpadeé varias veces asimilando la situación en la que nos encontrábamos.
¿Por qué había tenido que venir? Después de que Noah entrara y el Señor Gabriel me preguntara más de mil veces la razón de mis lágrimas y yo le asegurara que el motivo no era su hijo, pasamos adentro a esperar a su esposa Anna y a los demás para pasar a comer.Él me contó su día y como algunos de sus incompetentes empleados lo sacaban de quicio, palabras del, no mías; Por otro lado, yo también le conté mi día en la universidad, y como Emma me iba a dejar con dolores en mi delicada espalda.Ahora todos los miembros de la familia Lambert se encontraban en el comedor y por desgracia me encontraba acompañándolos.— ¿Por qué no te comunicaste con nosotros en las vacaciones Noah? —preguntó Anna, rompiendo con el inquietante silencio—. Hoy es la primera vez que te veo después de dos meses, se supondr
POV EthanTodos nos quedamos mirando a Noah marcharse y a Zeynep saliendo a paso rápido detrás de él.— ¿De que hablaba mi hermano? —pregunté.Papá inmediatamente dirigió su mirada a mí, por un instante me arrepentí el haber preguntado, no era un buen momento para hacerlo.—No te concierne lo que hablaba Noah.Me acababa decir entrometido en pocas palabras.—Es mi hermano, todo lo que pasé con él me importa —expresé en un tono fuerte, Emma agarró mi mano por debajo de la mesa evitando justo lo que estaba por venir—. ¡¿Acaso tú y mi abuela son la razón por la cual Noah estuvo en coma?! ¡Qué le hicieron! Confiesa.Tarde.Como si fuera activado algo en él, caminó hacia mi puesto levantándome, alzó su mano para gol
Resoplé frustrada al ver que no había ningún trabajo que se ajustara a mis horarios disponibles. La situación se empezaba a tornar cada vez más dura y me negaba a utilizar el dinero de mi tarjeta, utilizarlo sería un suicidio. Mis padres se enterarían en donde estaba y todo sería… ¡Por Alá!, eso no podía suceder.Trabajaba en algo que jamás pensé me ayudaría, la danza árabe, tenía que agradecerle a mi tía por enseñarme. Tenía dos trabajos en dos academias distintas enseñando, pero una de ellas no necesitaba más de mis servicios y de eso hace dos semanas ya.Tenía dinero reunido, pero no era lo suficiente, con lo de los materiales que se requerían en mi carrera me había gastado casi todo. Hace unos días tenía que haber pagado la renta de mi departamento y aun me faltaba...todo.
Caminaba de un lado a otro sosteniendo fuertemente mi teléfono entre mis manos, temía que, si no lo hacía, se caería debido a los fuertes temblores que tenía en todo mi cuerpo."No puede ser posible"Me repetía una y otra vez mientras recordaba aquel mensaje en donde mi prima hermana Elif, decía que mis padres sabían que me encontraba en Francia.¿Cómo lo habían descubierto?, lo sabría en unos minutos cuando Elif me llamara.Sabía que era cuestión de tiempo para que se enteraran, que mi pequeña burbuja donde me había refugiado iba a ser reventada tarde o temprano por ellos, yo lo sabía, pero…nunca me imaginé que sería tan pronto.Di un salto cuando mi celular vibró entre mis manos, el nombre de Elif apareció en él.—La paz sea contigo —saludó.&mdas
POV NOAHUna media sonrisa brotó de mis labios al terminar de cantar say you won't let go, esta canción me identificaba en estos momentos.Abrí los ojos de golpe al darme cuenta que los había cerrado por más tiempo del que podía tolerar, la sorpresa fue grande cuando vi a Zeynep observándome.¿Cuánto tiempo lleva ella ahí?— ¿Acaso tus padres no te enseñaron a no espiar a las personas? —Pregunté, dejando la guitarra a un lado—. Te hice una pregunta, responde.Me levanté de mi cama y fui hasta ella.—Y-Yo…esta…pasaba…y —deseé reírme en su cara por lo estúpidamente tierna que se veía nerviosa, pero claramente eso nunca sucedería—. Lo siento.— ¿Qué haces aquí? ¿Acaso no tienes un departament