En Cansington, en la residencia de los Callahan, había pasado un día desde que Thea regresó.

Ella luchó con el Rey del Trueno en el Monte Ludis, y su brazo se había herido durante la batalla.

Tras regresar a Cansington, Thomas le curó la herida. Le vendó el brazo con una gasa. Como tenía una Energía Verdadera fuerte, la capacidad de recuperación de su cuerpo también era robusta, así que la herida de su brazo estaba casi curada.

Thomas también se quedó en la residencia de los Callahan.

Los Callahan sabían que Thomas era el abuelo de James. Por eso, lo trataban con mucho respeto.

En ese momento, Thea y Thomas estaban sentados en la sala de estar de la residencia, después de que todos los demás abandonaran la casa.

Thomas fijó su mirada en Thea y le preguntó: “Thea, ¿tienes algún plan o idea sobre cómo proceder para matar al dragón?”.

Al escuchar esto, Thea frunció el ceño.

No tenía intención de matar al dragón.

Su objetivo era encontrar a James y averiguar si estaba vivo o muert