Los días pasaban complicando más las cosas, Valentino, no había podido conseguir el vídeo de las cámaras del restaurante, le habían dicho que ese día las cámaras no estaban en funcionamiento

Si había podido juntar una larga lista de los amoríos de Sara Armenta, pero eso no bastaba para comprobar su inocencia y justificar el despido como lo planeó en la carta de despido que hizo circular por el gremio empresarial

Las tres semanas en las que el juez les puso cita para declarar a ambas partes a patrón y empleada, pasaron muy rápido, esas habían sido para el empresario veinticinco días de lo más difíciles, Isabella, no lo había querido recibir, él iba a buscarla con grandes ramos de rosas, chocolates y costosas joyas pero simplemente tenía la entrada negada

Afortunadamente, la bella CEO, había accedido a qué los niños convivieran en algunas ocasiones con su padre, eso por lo menos clamaba un poco al hombre, sus hijos le daban fuerzas para continuar con su lucha, pero extrañaba horrores a