Haley aprieta el cuchillo contra el cuello de Alessia, haciendo que le salga una gota de sangre. Alessia siente un dolor agudo y un miedo terrible, pero también una rabia incontrolable. ¿Cómo es posible que una simple niñera haya conquistado a su marido? Es inaceptable. -¿Qué te pasa, Haley? ¿Estás loca? ¿Qué quieres de mí?-grita Alessia, tratando de zafarse.-Lo que quiero es que te alejes de Paul. Que lo dejes en paz. Que no interfieras más en mi vida. Que te vayas de esta casa y no vuelvas nunca más-le dice Haley con voz fría y desafiante.-¿De qué hablas? ¿Qué tiene que ver Paul con esto? Él es tu esposo, no el mío. Yo no tengo nada que ver con él-le miente Alessia, sabiendo que eso no es cierto.-No me tomes por tonta, niñera estúpida. Sé muy bien lo que hay entre tú y él. Sé que te has estado viendo con él desde hace tiempo. Sé que lo amas y que él te ama a ti. Sé que planean escaparse juntos y dejarme sola con Hannah-le dice Haley, mirándola con odio.-¡Eso es mentira! ¡No sa
-¡No miento!-grita Haley desesperada mirando a Paul con él rostro empapado en lágrimas-. Sabes que nunca mentiría con algo así, tienes que creerme... Las lágrimas más falsas que nunca antes había visto son las mismas que Haley ha comenzado a derramar, ¿cómo puede existir en el mundo personas tan falsas? -¡Silencio las dos!-dice Paul con voz firme y el ceño fruncido-. Mariah, vete. Alessia lo mira confundida, minutos antes le rogaba estar con ella, ¿ahora le pedía que se fuera? -Pero yo...-¡Ahora!Paul parecía una bomba a punto de explotar, tenía la mandíbula desencajada y el rostro serio sin ningún tipo de expresión de felicidad, solo se podía percibir su rabia e impotencia. Alessia decidió hacer caso omiso a su petición y salió de la habitación sin mirar atrás, frente a la puerta de la habitación había un espejo colgado en la pared, donde pudo ver su semblante con detalle. Tenía grandes bolsas colgando bajo los ojos, y el rostro enfurecido pero a la vez asustado, su cuerpo tie
-No tienes que hacer algo así por mi, saldrás herido-Alessia solloza mirándolo a los ojos en busca de algún indicio para saber que era mentira lo que Jacob aseguraba, pero todo lo que podía ver era... gentileza, ternura y sobre todo: sinceridad.Algo de lo que ella ha carecido durante todo este tiempo. -¿Qué pasó ahí dentro?-le pregunta Jacob lleno de curiosidad. El tema principal pasó a segundo plano, Jacob se había dado cuenta de que ella todavía no estaba lista para hablar de compromisos, así que prefirió hacerlo a un lado mientras tanto. Alessia suspira ante la pregunta y parpadea con rapidez, mirando hacia todos lados para asegurarse de que no hubiera nadie cerca que pudiera escucharlos. -Haley me estaba amenazando-suelta sin pensar-. Con un cuchillo.Jacob abre los ojos de par en par ante la revelación y se queda boquiabierto asombrado. -¡¿Pero estás bien?! ¿No te hizo daño?-Estoy bien... Paul llegó y pude huir en cuanto pude. Ante la mención de Paul, Jacob siente una pequ
Todos en la sala soltaron más jadeos de asombro, nadie podía creer lo que estaba pasando frente a sus ojos. Alessia miraba con extrañeza la escena, llena de miles de preguntas sin respuesta. Paul también observaba desde las escaleras con los ojos bien abiertos todo lo que estaba pasando, ¿acaso era un terrible sueño? -No solo robó mis ganas de vivir, no solo me ocultó ante el mundo y me hizo callar, sino que también me robó al hombre que amaba, ¡robó todo lo que yo más quería! ¡Y no dudó ni un solo segundo en hacerlo! ¡Jamás pensó en como iba a sentirme!-grita tirando del brazo de Haley con furia. -¡Sueltame!-grita la otra Haley mientras tiene una mueca de dolor plasmada en su rostro. Nadie parece tener alguna intención de intervenir, todos simplemente observan la escena ajenos a ella, guardando silencio a la espera de que algo más pase. Alessia da un respingo en su lugar al sentir unas manitas aferrarse a su pierna, al mirar hacia abajo, se encuentra con el rostro de su pequeña
-No debes preocuparte por nada más que no sea descansar, ¿está bien?-Alessia le planta un suave beso en el cabello y se acurruca a su lado. No quiere salir a ningún sitio para enfrentar lo que sea que esté sucediendo allá, todo ha sido tan inesperado e increíblemente irritante. Alessia no puede soportar ni un segundo más emociones así de fuertes. De repente, se golpea mentalmente la cabeza al recordar que dejó a Jacob a su suerte en medio de ese gigantesco problema impredecible. Solo podía pensar en calma a su hija, así que no pensó en que lo había dejado tirado. Sin embargos, unos segundos después, alguien toca suavemente detrás de la puerta, acto seguido, la puerta se abre dejando ver el rostro preocupado de Jacob. Que al ver a Alessia, se iluminó. -Que bueno que te encuentro-dice entrando a la habitación y cerrando la puerta tras su espalda con rapidez-. Allá fuera es toda una locura. Alessia suelta una pequeña risita por lo bajo al ver las muecas de Jacob, es una persona muy ex
-Al fin despiertas-dice Alessia sonriendo y tratando de arreglar su cabello como puede, ya que parece un nido de ratas. -No puedes culparme, querías espiar a esas personas en la madrugada y yo estuve ahí como tu fiel guardián, deberías darme un premio. Alessia suelta una pequeña risita y niega con la cabeza. -Estás loco. -Por ti. Y justo antes de que Alessia pudiera responder, Amelia se despertó y se sentó en la cama con rapidez. Está acostumbrada a levantarse muy temprano, así que a esas horas de la mañana, ya estaba más que despierta. -Buenos días, mami...Amelia todavía no había visto a Jacob detrás de ella, así que al girar, da un respingo y pone cara de espanto. -Amelia, él es Jacob, es mi...-hace una breve pausa, tratando de elegir una palabra adecuada-. Amigo. Jacob se siente incómodo ante la mirada de Amelia, que parece no confiar en él. Intenta sonreír y le extiende la mano.-Es un placer conocerte, Amelia. Tu mami me ha hablado mucho de ti. Amelia mira la mano de Ja
-Jacob, no está, Amelia no está-Alessia llora desconsoladamente, llamando la atención de todos los presentes en el parque. Algunas personas se acercan para preguntar si todo está bien, y aunque Alessia intenta explicarles, las lágrimas y el nudo tan grande en la garganta no se lo permiten. Por suerte, Jacob está siempre al rescate para explicar la gravedad de la situación. -Es una niña pequeña, de está estatura...-comienza a explicarles a varios padres de familia que paseaban a sus hijos tranquilamente por el parque-. Tiene el cabello castaño, ojos café, un vestido rosa con puntos blancos y dos coletas. Alessia continuaba llorando y Jacob explicándole a todo el que podía. En menos de 15 minutos el parque se había convertido en un sitio de búsqueda, todas las personas se habían puesto de acuerdo para tratar de encontrar a Amelia, pero nadie podía dar con su paradero. Alessia estaba destrozada, Jacob por más que intentara consolarla no encontraba la forma. -Jacob, ¡mi niña!-suelta u
De nuevo esa risa histerica y maniática retumba en los oídos de Alessia, quien sostiene el celular con demasiada fuerza y sus manos tiemblan sin control. -¿Crees que la soltaré así sin más? Oh, para nada... y ¡lo siento por llamarte y molestarte con todas estas cosas!-dice una disculpa falsa-. Es que no encontré el número de Paul, y vi que tu número estaba anotado en el refrigerador, pero oh, vaya, ¿qué como sabía que era tu número? ¡Fácil! Te escuché hablando con mi querida hermana gemela, dijo tu nombre, y al ver tu nombre con tu número en el refri tomé la oportunidad y la aproveché, aunque no sepa del todo que es lo que ocurre entre ustedes, cualquier idiota podría deducir que eres cercana a la familia, ¡pero bueno, basta de chachara! -¡Déjala ir!-grita Alessia a través del celular y Paul se sobresalta. Haley la observa con extrañeza y luego fastidio, pero Paul le echa un vistazo y esta cambia su mirada a una de pesar. -Dile a Paul que quiero mi dinero, sino, bye bye pequeña. Y