Luego de casi cuatro días de viajar, por fin habían llegado a su destino; la casa de Jordan y que también sería la de Mariana de ahora en más.
Era una casa a las afueras de un pequeño pueblo llamado El Remanso. Su arquitectura era de una típica casa de campo, blanca con tejado a varias aguas en color azul oscuro, muy amplio, dos plantas, todo un porche que giraba en torno a la casa, un amplio jardín y un enorme fondo. Todo con césped muy bien cuidado, pareciera como si alguien se levantara cada mañana a cortar el penacho es estuviera más largo y así dejar toda la superficie exactamente a la misma altura, también era como si lo pintaran, pues tenía un color parejo en toda la superficie; eso era todo mérito de Juan, un empleado de la casa desde antes de venir al mundo Jordan.
En eso sale el ama de llaves, la misma que había hecho lo posible por inculcarle buenos valores de niño.
Entraron y fueron a sus habitaciones. Mariana maravillada con todo. Al entrar a su habitación fue derecho al baño a asearse para comer. Ambos bajaron y se encontraron en las escaleras.
Al llegar a la casa, cada uno se fue a su habitación y no salió hasta el otro día. El cansancio era muy grande de ambos.
Laura llama a Jordan como todas las mañanas cuando él está en la casa.
En eso baja Mariana, metida dentro de unos deportivos y con el cabello mojado aún por el baño. Le dio un beso a Laura y dio la vuelta al desayunador para darle un beso a Jordan.
Laura comenzó a recoger las cosas del desayuno y limpiar lo ensuciado. Jordan se había retirado a su estudio, de pronto golpean la puerta del mismo.
Jordan, mientras tanto, aprovechando la ausencia en la casa de Mariana, llama a Elda.
Mientras tanto en el pueblo, Mariana y Laura se divertían como locas; es que la joven había traído a la vida de todos ellos la frescura que necesitaban. Laura había olvidado lo bien que se sentía salir acompañada, cuando Jordan era más chico, y estaba en la casa, era quien la acompañaba y pasaban el día en el pueblo. Laura, que pueblo hermoso es éste, rodeado de colinas y lagos, parece sacado de un cuento. Sí, Mariana es bellísimo. Aunque hacía muchos años que no lo disfrutaba como hoy – Mariana la miró asombrada ¿Cómo es eso posible, con lo bello que es? Es que ya hace mucho que vengo sola a hacer las compras y la verdad es bastante aburrido – sonrió ¿Jordan nunca te acompaña? – Ya no – dijo en un tono triste – cuando era más pequeño y venía por vacaciones, solíamos venir a menudo y llegábamos a pasar todo un día entero. Pero luego su trabajo lo empezó a absorber, su novia le dejo; todo eso fue endureciendo su c
Esto no puede ser, tú tienes que conocer a un chico de tu edad, tener tus primeras experiencias con él. Yo no soy bueno para ti – ella se lanzó sobre él y le besó con tal pasión que le estremeció. La miró profundamente, la tomó en sus brazos y la llevó a su habitación, la puso sobre la cama y luego de besarle cada célula de su cuerpo le hizo el amor durante toda la noche, casi sin parar. La fusión era perfecta, sus cuerpos parecían estar hechos el uno para el otro, no sobraba ni faltaba medio centímetro de piel. Eran perfectos. Los sorprendió el amanecer, desnudos, uno en brazos del otro. Ella al despertar vio como él la observaba. Buenos días, mi amor – dijo Jordan con una amplia sonrisa Buenos días. ¿A qué no te parece una mala idea ahora? – &nbs
Ya un poco más relajados, él volvió a su silla y comieron, casi devoraron, allí comprendieron que no solo de amor vive el hombre.¿En qué piensas? – preguntó JordanEn que hay muchas cosas que no sé de ti –Pregunta que responderé con la verdad aunque sepa que tal vez no te guste. -¿Lo prometes? –Por supuesto que sí –Bien, ¿Cuál es tu segundo nombre?Pues fíjate que curioso, no tengo segundo nombre ni segundo apellido –¡Ah!, bueno ¿Cuál es tu edad?La suficiente – y rióDijiste que no me mentiríasOcultar no es mentir – volvió a reírNo seas tramposo, ocultar es una forma de mentir, más cuando te he hecho una pregunta directa –De acuerdo, me ganaste, tengo 28 a&
La experiencia en La Villa, había sido muy extraña para Jordan, algo estaba cambiando en Mariana, pero ella no se daba cuenta y él no sabía explicarlo. Era algo a nivel físico que, por ahora, no afectaba su psiquis; o al menos eso era lo que parecía. Y aunque quería ignorarlo o pasarlo por algo no podía y le estaba carcomiendo el cerebro. Para su suerte, Mariana comenzaría con los exámenes físicos al día siguiente.Ya se encontraban en la casa.Marina, cariño, ¿Qué paso en el hotel? – Mariana lo miro desconcertada¿Cómo que paso, Jordan?, creí qué nos habíamos divertido - él la abrazoClaro que nos divertimos y fue maravilloso, bueno siempre es maravilloso estar contigo. No me refiero a eso, me refiero a que estabas un poco más fuerte que de costumbre – ella sonrió
Mientras Jordan y Mariana dejaban las instalaciones, Teresa llamaba a la sala médica a Elda.¿Qué tienes para mí, Teresa?-Pasa a la sala de rayos a que veamos lo que salió de la máquina. – entraron en la sala y le mostró una cantidad de imágenes tomadas al cerebro de Mariana. – mira, estas son las imágenes que se tomaron cuando recién ingreso, como verás es totalmente normal, pero luego, algo paso, no sé qué fue, pero su cerebro empezó a funcionar a un ritmo elevadamente inquietante, pero de golpe paro y la actividad, si bien esta fuera de lo normal, bajó considerablemente sus picos.No te entiendo, explícamelo en español por favor. –Esta chica tiene la capacidad de calmarse a sí misma con una velocidad inimaginable y; tengo que hacerle más pruebas; creo que tiene memo
Desde aquella conversación no habían vuelto a tocar el tema, Mariana no parecía estar muy apurada por enterarse lo que Jordan tenía para decirle, es que en realidad no sabía si iba a gustarle lo que escuchara, así que decidió dejarle esa responsabilidad a él. Habían pasado unos días desde que le hicieran los exámenes físicos a Mariana y había comenzado ya su entrenamiento. Hoy le tocaba tiro. Jordan estaba en la ducha, pues recién se despegaba de la cama, cuando Mariana interrumpió en el baño, le abrió la puerta de la mampara y le dijo:No demores que hoy es mi gran día.-¿Gran día? - preguntó él mientras yacía totalmente enjabonado. –S&iacut
Por un rato pudieron evitar la conversación, pero ambos sabían que era inevitable. Así que luego de comer, acomodaron cada uno en una punta del sillón, de frente para poder conversar. Es que no sé por dónde empezar.- ¿Por qué no haces como todo el mundo y comienzas por el principio? - trató de darle un tono jocoso al asunto, él hizo una mueca y prosiguió Tienes razón. – hizo una breve pausa – El Complejo es una agencia del gobierno no militar, aunque sí militarizada, ¿se entiende? Perfectamente, quiere decir que no son militares pero manejan armamento, inteligencia y tácticas de combate como si lo fueran. – él sonrió satisfecho Exacto, el asunto es que también tiene un departamento médico, mucho más grande y complejo del que viste, y hacen allí todo tipo de experimentos con tecnología aplicada a la biología… Una manera simpática de decir que experimentan con humanos y tecnología.- la cosa se empezaba a poner seri
Las horas transcurrieron sin sobresaltos, pero a Jordan le pareció una eternidad, ya no soportaba estar en su habitación, pero soportar la mirada de Laura no era una opción. Sabía que iría al pueblo, pues Juan tenía cita con el dentista, y era algo que no cancelaría por ningún motivo. Espero pacientemente a que ocurriera su partida. Cuando eso ocurrió, bajo las escaleras, cruzó la amplia sala y salió al porche. Allí había una banca, una banca que ocupaba con su madre por las tardes de verano cuando estaban allí, esa banca era una de las pocas cosas que lo conectaban con su pasado, él había hecho remodelar toda la casa, pero la banca se mantuvo intacta. ¿Porque estaba allí?, porque era el único sitio que lo tranquilizaba, que lo dejaba pensar, que calmaba su ansiedad; y en aquel momento necesitaba más que nunca encontrar la paz. De pronto el d&ia