No podía apartar su mirada de encima de ella. Por más que quería desviarla le llamaba demasiado la atención. Ese cabello rubio contrastaba tanto con aquel vestido que, aunque fuera largo se le veía realmente sexy. Seguro se sentiría delicioso apretar esa cintura y estrechar la cadera ancha de ella contra su pelvis.Lukas se relamió los labios tras tomar un sorbo de wisky con notable emoción. Lo hizo lentamente y de forma sugerente a la mujer que también lo miraba y que pronto se giró dándole la espalda. Sin embargo, volvió a mirarlo disimuladamente de reojo.El hombre sonrió levemente y bufó por dentro. De alguna forma la noche se había vuelto divertida. Estaba acostumbrado a ver mujeres hermosas y despampanantes gracias a su querido amigo Vincet que bastante exigente era, aunque en los últimos tiempos estos gustos habían sido puestos a prueba. A pesar de la distancia y la iluminación pudo definir gran parte del rostro de aquella mujer. Su belleza era exótica, ni muy bella al punto de
Llamar cachorrita a la mujer que tenía entre sus manos era casi una ofensa para como lo tenía en ese momento. Dios, que forma de mover sus caderas al sentido de la música. Lukas creía que se podría correr en cualquier momento si aquello seguía así.Ahora entendía porque estar en aquella pista era tan adictivo, es que se sentía realmente bien. La música, el calor, el olor, la sensualidad y el sexo danzando en el aire, era casi hipnótico.Apretó más sus manos en la cadera de aquella exótica mujer y se movió junto con ella de un lado a otro. A ella no parecía molestarle su cercanía, por el contrario, su pequeño cuerpo estaba completamente recostado contra él y su brazo hacia atrás alrededor de su cuello le decía lo relajada que estaba con él.Él se relamió los labios y después inclinó la cabeza pasando sus labios por la curva del cuello de ella sintiendo la suave textura de la piel joven para después lamerla. El sabor ligeramente salado fue realmente delicioso para él y lo hizo temblar.
Ah, debería estar realmente loco. Estar en medio de una discoteca, con la bragueta abierta y dejándose chupar su parte más preciada por una desconocida, pero todo le valía cuando se estaba sintiendo de esa manera.Sus piernas temblaban ante cada delicioso estremecimiento que lo recorría, haciendo que casi perdiera el equilibro. Sus manos sobre la pared delante de él estaban tan fuertemente apretadas que sus nudillos estaban blancos. La camisa oscura se pega a su espalda empapada de sudor al igual que el flequillo de su cabello.Apretó sus dientes cuando un gemido amenazó con salir de su boca. No sería oído, con la música tan alta y en la esquina apenas sin luces donde se encontraban había una intimidad extraña, aun así, se contuvo.Dejó caer su cabeza hacia atrás mientras bajaba su mano y enterraba sus dedos en aquella cabellera que se movía de adelante hacia atrás con cortos movimientos y que llevaba su miembro hacia su garganta pequeña y caliente. Se sentía realmente bien. Hacía tie
Si había algo que a Vincet lo ponía de mal humor era su celular sonando a mitad de la madrugada sobre todo si no tenía nada de trabajo pendiente y fuera Lukas para fastidiarlo… por cualquier cosa. Lo ignoró la primera vuelta, pero al parecer su secretario tenía algo serio que decirlo así que se giró y miró la pantalla aun dudando sin responder.Miró la hora. Eran las 2:30 de la mañana. Si Lukas estaba con Roan y ellos habían ido de fiesta lo más normal es que a esa hora todavía estuvieran retozando en cualquier lugar de la ciudad a menos que… un estremecimiento lo recorrió, así como un deja vú. Esperaba que no fuera lo que estaba pensando pues esos dos juntos eran peligrosos.-Dime- respondió con la voz grave.Y no se equivocó con sus pensamientos.-Vincet… crees que puedas… venirnos a buscar- el ceño del Ceo se frunció notablemente. Esta vez se habían pasado de la raya.***Alicia estaba tomando un vaso de agua después de despertar con la garganta seca y con las mejillas ruborizadas
Pocas horas antes.Lukas jadeaba contra la nuca de la mujer mientras sus embestidas se hacían cada vez más fuertes. Una de sus manos estaba entrelazada desde atrás con los dedos de la mujer contra él mientras la otra se perdía en sus muslos afelpados sobre el botín inflamado entre ellos que masajeaba insistentemente hasta que la escuchó soltar un gemido agudo y comenzar a temblar.Fue un golpe delicioso a su ego saber que había hecho correr a una mujer en tan poco tiempo y en aquellas condiciones. Definitivamente sus cuerpos eran muy compatibles. Las contracciones de ella y la humedad lo llevaron al cielo en solo segundos y se introdujo por completo en ella comenzando a derramarse en el condón. Sus bolas se apretaron y un fuerte estremecimiento lo recorrió y por reflejo abrió la boca y mordió lo más cercado a él, la curva del cuello de la mujer.Quizás era porque ambos estaban perdidos en la ola del deseo y el orgasmo, pero a ella no le dolió y el casi no lo sintió, pero le dejó una m
Tanto Lukas como Roan caminaban detrás de Vincet al salir de la comisaría casi siendo las cinco de la mañana. El proceso para sacarlos había sido fácil pero largo y tedioso, sobre todo porque había que hacerse cargo del otro tipo que había estado involucrado en la discusión y en la trágica de su mujer.-Vincet- Lukas lo llamó con disimulo para tantear el terreno cuando recibió la mirada acusadora por parte del Ceo por encima del hombro.-No me hables ahora Lukas. Realmente tengo ganas de matarlos a los dos- les dijo con los dientes apretados y fue en dirección al auto- Y quietos ustedes dos.Se giró frente al vehículo.-Ustedes se van a pie hacia su casa, pues su vehículo fue remolcado y para que recapaciten sobre las cosas que han hecho, porque si los subo chocaré mi auto por tal de calmar mi rabia con ustedes- los ojos azules de él brillaban peligrosamente y tanto Lukas como Roan sabían que esta vez sí se habían pasado de la raya.Y como mismo les había dicho el ceo se subió a su au
Quizá Vincet estaba acostumbrado a dormir con otras personas y de esa forma abrazando tan fuertemente que era casi imposible escapar, pero Alicia no. El brazo del hombre estaba alrededor de su cintura y la pega a su cuerpo sin otra intención que no fuera dormir.La cálida y constante respiración de él golpeaba su nuca como una suave caricia hipnotizaste, sin embargo, ella no podía dormir. Su corazón latía rápidamente en su pecho y había terminado en esa situación tan rápido que apenas había podido reaccionar. Para cuando se dio cuenta ya estaba acostada en la cama, tapada y junto al Ceo.Alicia apretó ligeramente sus labios y miró por encima de su hombro. El rostro del Ceo era realmente atractivo cuando estaba relajado. Sus cejas no estaban fruncidas como normalmente o sus labios duros en una fina línea que lo hacían ver mucho más intimidante de lo que normalmente era.Con algo de dificultad se fue girando sobre sí misma para quedarse frente a él. Dado lo cerca que estaban pudo notar
Era demasiado temprano para estar pensando en cosas que le consumían toda la energía y más si tenía un día largo por delante. Talvez la razón era porque estaba nublado afuera y por eso el sol no entraba a la habitación, con razón estaba un poco más oscura de lo normal.Bueno mejor levantarse de una vez e ir a trabajar, pero no se movió cuando se percató en la posición que Alicia estaba durmiendo. Había estado tan enajenado con los roces de ella hacía muy poco que no se había dado cuenta, pero ella con la cabeza contra su pecho y su pierna por encima de la suya que había terminado en medio de los muslos de ella la dejaban en una posición bastante comprometedora.Vincet cerró los ojos unos segundos. Era muy temprano, su momento más sensible y donde su parte inferior despertaba más fácilmente como ahora. Podía sentir del sexo de Alicia pegado a su muslo aún por encima de la tela. Y cualquiera se hubiera apartado, pero Vincet tenía otros planes.Movió un poco la pierna entre las de ella r