La loba no pudo pegar un ojo en toda la noche, preocupada porque tal vez volvería a ver a su hermano y no sabe cómo tomaría este su unión con el Don, no le importa que este no la acepte, pero tampoco quiere que rechace o se sienta decepcionado.
—Cachorrita, —el Don la mira y pasa su mano por su rostro trayéndola a la realidad. —No debes preocuparte, alégrate de que tu hermano viene, —sentencia para que ella se sienta mejor.
—Estoy feliz de que Adriano venga, pero y ¿si no acepta que este contigo? —El don frunce su ceño.
—Que se joda, eres mía, —gruñe abrazándola, Kara ríe para suspirar olfateando el olor fuerte que emana del Don y sabe que este deja muy marcado su territorio.
—No debes estar celoso, —este arquea sus cejas.
—No estoy celoso ¿debería estarlo? —Cuestiona y Kara niega a lo que este asiente.
—¿Entonces no pasa nada si me ducho? —Leonardo gruñe.
—Se quitara mi olor, —murmura a lo que Kara sonríe. —No te rías cachorrita, no quiero que ese alfa venga aquí creyendo que no tienes un macho que te cuida bien. —Argumenta tratando de que no se dé cuenta que esta celoso porque Steven estuvo enamorado de ella.
—¿Te he dicho que te ves tierno cuando estas celoso? —Un bufido sale de los labios del mayor para luego rodar los ojos.
—Tierno me veré cuando azote tu culo varias veces, —anuncia provocando que la loba se sonroje. —Joder cachorrita, me calienta verte tan tímida, —gruñe aferrando sus brazos a la cadera de esta. —Sino fuera porque debo hacer algunas cosas ahora, te pondría en cuatro, azotara tu nalgas y te cogería fuerte, —ronronea y luego olfatea como el olor de la loba se pone dulce.
—Sera mejor que te vayas a duchar, —susurra al sentir la dureza palpable de este clavada a su muslo, Leonardo afloja su agarre para luego salir de la cama, Kara ríe escuchándolo gruñir y maldecir en italiano sus obligaciones de alfa.
La loba se queda mirando el techo hasta que el mayor sale del baño envuelto en una toalla blanca. Lo mira por varios segundo y no duda en ningún instante de que Leonardo es un hombre extremadamente caliente y que llevando una simple bolsa de papa se vería exquisito antes sus ojos.
—Si me sigues mirando de esa manera olvidare que tengo obligaciones, —anuncia cruzando sus brazos, Kara suspira para envolverse en las colchas e irse al baño bajo la atenta mirada del alfa.
(…)
Cuando el alfa Steven y el beta Adriano cruzan la frontera a la manada del Leonardo miran a todos con desconfianza, Eliecer se encarga de escoltarlos hasta la casa principal y los guía hasta la sala.
Adriano huele el olor de su cachorro aproximarse y se pone de pie cuando este atraviesa el pasillo, se agacha y lo atrapa entre sus brazos mientras que el Alfa Steven mira con expresión neutra a su hijo.
—Tú y yo tenemos una plática pendiente, —expone mientras que el niño agacha su cabeza, Leonardo y Kara junto a sus hijos ingresan a la sala, Adriano enseguida lleva su mirada hasta la loba y abre sus ojos sorprendido al ver a su pequeña hermana.
—¡Kara! —Grita caminando hasta ella pero el enorme cuerpo de Leonardo se interpone y deja salir un gruñido hacia el hombre que quiere tocar a su hembra.
—Leo él es Adriano, —murmura tomando su mano, Leo lo mira de abajo para arriba.
—Faresti meglio a non fare qualcosa per ferirla
Es lo que sale de su boca mientras mira directo a los ojos de Adriano que solo lo observa confundido sin entender muy bien lo que dijo, Leo se echa a un lado dejando a la vista a su hembra.
—Hermano, —masculla la loba dando varios pasos hasta este que no se contiene para atrapar el cuerpo de su pequeña hermana en un fuerte abrazo.
—Por la diosa, te he buscado muchos años. Nunca imagine que te encontraría, —confiesa para alejarse un poco de ella al sentir la tensión que emana el alfa que parece proteger a su hermana.
—No pensé que me buscarías, —aclara de manera sincera mientras que su hermano hace una mueca de tristeza.
—Eres mi hermanita, nunca me olvidaría de ti, —argumenta para luego mirar a los niños que están al lado de Leo y que emanan el olor de su hermana—¿Son tus cachorros?
—Son míos y él es mi pareja, —señala a Leo para luego entrelazar sus manos.
—No sabes lo feliz que me hace saber que tienes a alguien que cuide de ti, —esas palabras hacen que el Leo baje su guardia contra el chico, Steven carraspea para llamar la atención de todos.
—¿Entonces esta fue la manada que termino con la vida de Saimon? —Leo se tensa mientras que su expresión se vuelve sombría.
—Steven, —llama su beta serio.
—Solo debo decir que me entristece que mi hermano este muerto pero también debo resaltar que Saimon tenía problemas mentales y por esa razón fue destituido de su puesto de alfa, no hay conflictos y queda claro que tampoco andamos buscando venganza, —mira a Leo de manera serena—No tiene nada porque preocuparse, —dictamina dando por terminado el tema.
—¿Cuál es el motivo para que estés aquí? —Pregunta Leonardo hablando por primera vez.
—Si cree que vine por su hembra no debe tampoco preocuparse por ese tema, —sonríe—Vine porque Adriano es mi mejor amigo y beta, por lo tanto no puedo dejarlo venir a este lugar solo, —le comenta a lo que Leo asiente.
—Bien, —es lo único que sale de su boca.
Después de ese intercambio de palabras Kara presenta a sus hijos que se alegran de tener un tío nuevo y primo. Los niños se van a jugar mientras los adultos establecen una conversación, Leo aprovecha para preguntar temas relacionados con manada de lobos ya que igual debe dirigir una.
(…)
—¿Entonces te casaste con Amanda? —Cuestiona Kara mientras camina con su hermano por el pueblo de la manada.
—Era algo que estaba previsto suceder. Desde pequeños siempre jugábamos a que nos casaríamos y tendríamos hijos, —le recuerda a lo que la loba se ríe de acuerdo con lo que dice—Pero me sorprende verte a ti con cuatro cachorros.
—Los leones aman tener muchos hijos y Leo no es la excepción, —comenta.
—Se ve que te quiere mucho.
Ríe y asiente.
—Es un sobreprotector de primera, —halaga.
—Siempre supe que encontrarías alguien que te cuide, —anuncia pasando su brazo por el hombro de la loba para atraerla hasta él.
—Ellos ¿Cómo están?
—Si te refieres a papá y mamá, ya sabe que son anticuados, pero igual aunque no lo admitan le dolió mucho cuando te fuiste mientras que Alejandro está bien, se fue a Londres a estudiar.
—¿Medicina?
Adriano asiente con una sonrisa.
—Es un apasionado, —murmura—Aunque ya se graduó de medicina pero ahora está haciendo especialidades, —Kara asiente contenta por su hermano.
—Me alegra saber que siguió sus sueños, —masculla—¿Cuándo se van?
—En dos días, ya te encontré y me conformo saber que estas bien por lo que me voy con mi consciencia tranquila e igual espero seguir en contacto por si necesitas mi ayuda algún día.
—Gracias por buscarme.
Traducción
Faresti meglio a non fare qualcosa per ferirla (Será mejor que no hagas algo para lastimarla)
Después de dos días el hermano de Kara regreso a su manada dejándola feliz pero al mismo tiempo nostálgica por su partida, Leonardo notando esto en su hembra tomo la iniciativa de ir junto a sus hijos a la cabaña donde pasaron su luna de miel y a la cual van en tiempo de apareamiento.—Con cuidado, —sentencia el alfa al ver a los pequeños revoltosos correr por la orilla de la alberca mientras toma el sol junto a la loba—¿Estas mejor? —Cuestiona alcanzando su mano en la cual deposita una caricia.—Gracias, eres el mejor, —masculla sacándole una sonrisa al hombre.—No me gusta olerte cuando estas triste —es lo que dice—Kiara no vayas al fondo, —gruñe al ver a esta intentar pasar al lado profundo de la piscina.—Yo me encargo, —comenta Enzo dejando de lado su libro para ir con su hermana.—Quiero nadar como Dante
Durante el desayuno Valentino se siente cohibido por la mirada curiosa de los demás, Leo se mantiene con expresión relajada ya que nota que el joven no representa ningún peligro a su familia pero igual necesita saber porque esos lobos lo atacaron. El chico de piel morena igualmente vigila a Kiara que se mantiene ignorante de la situación.—¿De dónde eres Valentino? —Cuestiona Kara curiosa esbozando una sonrisa hacia el joven.—Era de la manada del norte.—La manada del alfa Sam, —comenta Leo con curiosidad observando la tristeza pasar por sus ojos.—Sam era mi padre, pero pereció cuando un alfa de una manada sanguinaria lo ataco, mataron a todos los de mi familia, —masculla mientras sus ojos se cristalizan—Logre escapar gracias al beta, —haga su cabeza sintiéndose avergonzado por huir como un cobarde.—Lamento mucho tú perdida,
El insistente sonido de un teléfono sonar provoca que el Don deje salir un gruñido molesto, Kara se queja al sentirlo moverse en la cama.—¿Quién mierda llama a esta hora? —Se queja mirando el identificador de llamada el nombre de Tamara, frunce su ceño. —Tamara… —Se queda callado al escuchar el escándalo del otro lado y los sollozos de esta. —¿Qué está pasando?—Es Fernando —eso lo despierta y su corazón se salta un latido. —Algo lo ataco en la mansión, está muy mal, —sollozos salen de sus labios.—¿Qué tan mal esta?—Está muriendo, —su corazón se comprime y sale rápido de la cama.—¿Dónde están? —Indaga al escuchar ruido de autos del otro lado del teléfono.—Camino al hospital,<
—Es bueno verte de pies otra vez, —Leo lo abraza con fuerza mientras que inhala su olor, siente paz en su corazón por ver a su hermano en completamente bien. —Nunca pensé me quisieras tanto, —el alfa rueda sus ojos para separarse de este y cruzar sus brazos con expresión seria. —Eres como un callo en el culo, pero nunca permitiría que te pasara algo, —sentencia a lo que Fernando sonríe. —Gracias. —No tienes por qué darla, eres mi hermano. —Asiente y echa una mirada a los cachorros que vienen corriendo hasta llegar a Fer. Lo abrazan, Fer se siente a gusto y feliz de estar de vuelta. —Revoltosos, ¿Quién es el nuevo? —Mira a Valentino que se mantiene alejado de la familia. —Larga historia, —comenta Donato olfateando a Fer ya que huele como ellos. —Eres un león. Fer lo mira sorprendido y luego le echa una mirada a su hermano. —Debemos hablar. Fer asiente a lo que dice Leo y todos le dan su espacio dejándolos
—Debes ser más rápido, —suelta Leo después de haber dado un puñetazo a Fer que lo mira enfadado. —No tengo experiencia, —le recuerda a lo que su hermano rueda los ojos. —Esto es igual a las veces que peleamos en el gimnasio, usa las mismas técnicas y solo recordar que ahora tienes una increíble fuerza sobrenatural, —sugiere a lo que este asiente. Sube la guardia y observa a su oponente, Leo lanza el primer golpe y esta vez su hermano lo logra esquivar pero también lo hala del brazo para encajar su rodilla en su estómago y luego teclearlo haciéndolo caer, sonríe. —Bien hecho, —comenta el alfa aceptando la ayuda para levantarse del suelo. —Los chicos la llevan bien, —mira a los gemelos pelear con Valentino que se defiende de sus oponentes. —Son buenos, —le pasa una toalla y una botella de agua, se acercan a los chicos que se detienen. —Tienes buenos movimientos Valentinos, —halaga Leo a lo que el lobo asiente agradecido. —Mi padr
Observo los alrededores como solicito Eliecer y no veo nada nuevo, miro a los dos leones que me acompañan y ordeno que regresemos, ya que faltan aproximadamente dos horas para el nuevo amanecer. Después de que me convertí en león me siento más activo, con más energía y sobre todo con mucha fuerza, no he querido tener sexo con Tamara y eso me tiene frustrado. Cuando intente estar con ella utilice mucha fuerza y deje una marca en su brazo, me asuste y salí de la casa. Ahora la evito saliendo a hacer rondas nocturnas, sé que Tamara no me tiene miedo pero yo sí. Mi mayor temor es salirme de control y lastimarla, no me lo perdonaría, prefiero alejarme, camino hasta la parte trasera de la casa y observo a Leo llegar junto a los cachorros, regreso a mi forma humana para tomar una bata y cubrir mi desnudes. Saludo a mis sobrinos que se ven agotados y luego a mi hermano que se va a su habitación y yo a la mía donde Tamara yace dormida en la cama, suspiro. Entro al bañ
Kara deja salir un suspiro cuando logra terminar de arreglar el cabello de su hija, no entiende porque quiere estar bien peinada todos los días, pero tampoco le molesta arreglarla.—Mamma, ¿crees que Valentino se fije en mí cuando sea grande? —La loba se queda quieta sorprendida por lo que ha dicho su hija, nunca se esperó que algo como esto saliera de la boca de su pequeña Kiara.—¿No estás muy pequeña para eso?—Por eso dije cuando sea grande, sé que soy una niña, —la mira a través del espejo con una sonrisa y sus mejillas roja.—Bueno, ya para ese entonces Valentino será un hombre mayor para ti, —Kiara la mira desanimada por sus palabras, —Pero igual serás hermosa y cualquier chico te cortejara.—Pero yo quiero que sea Valentino, —reprocha.—El destino es el único que sabe, peq
—No tiene nada de qué preocuparse, sus bebés están perfecto, —anuncia mirando en la pantalla con una sonrisa.—¿Bebés? —Cuestiona asombrado Fer mirando a la mujer que frunce su ceño y asiente.—¿No lo siente?—Soy nuevo, mi querido hermano se empeña en no enseñarme mucho de este tipo de cosas, —masculla con sarcasmo lo de ‘‘querido hermano’’La señora asiente con una pequeña sonrisa.—Es porque le quita sentido el ser un león. Lo mejor es que todo le llegue por sorpresa, —anuncia a lo que Fer rueda los ojos.—¿Entonces no hay nada malo con mis bebés? —Tamara la observa ansiosa.—Así es. Las crías de leones suelen ser fuerte y por lo tanto solo deberá tomar algunas vitaminas y por supuesto alimentarse bien, —le entrega