Caminando hacia el altar pensaba en mi padre quien ha hecho este matrimonio posible, ha doblegado su orgullo y ha aceptado lo que el padre de mi futuro esposo le propuso, yo camino a su lado en este momento, parece que está orgulloso aunque sé que hubiese querido algo mejor para mí.
Con mi vestido negro acompañado de hermosos brillos, largo hasta mis pies, mi velo el cual no deja ver mi rostro y mi cabello lacio simplemente peinado y dejado suelto, mirando hacia el frente ante la vista codiciosa de personas que quieren acabar con mi familia pero la hipocresía los hace estar aquí.Allí lo veo oscuramente por el velo que obstruye mi vista, vestido de negro al igual que yo, alto, con un porte perspicaz y mirándome fijamente con seriedad, a su lado el hombre que fué enemigo de mi padre y desde hoy será mi suegro.Mi padre toma mi mano y se la da al desconocido hombre que la recibe con una sonrisa fingida en su rostro, yo simplemente no digo nada, miro hacia el piso como una novia gentil y débil, algo que no soy, pero desde hoy tendré que aparentar mucho más que esto.—Protégela— Dice mi padre —Es la niña de mis ojos y no sé qué haría si algo le pasa, hazla feliz porfavor, mi mejor regalo será solo verla sonreír— Me mira con sus bellos ojos miel y me hace sentir un dolor en mi corazón—Así será— Responde mi futuro esposo y por fín conozco su voz, es gruesa y hermosa a la vez —Me encargaré de que sea la mujer más feliz del mundoMi padre me da un dulce beso en la frente y con una sonrisa me mira como cuando era una niña y sacaba buenas calificaciones en la escuela, con un orgullo inmensurable.—Gracias por esto hija— Susurra a mi oído —Te amo demasiado, trata de verle el lado bueno porfavor, eres lo mejor que tengo—Así será papá— Le respondo con una dulce voz —Tú eres mi único tesoro— Lo miro con tanto amor que el velo no importa para saber lo que el otro está sintiendoSe aleja de mí y toma su lugar en primera fila, el sujeto frente de en me mira y alza mi velo, lo veo por fín sin complicaciones, sus ojos son negros, su cabello está peinado hacia atrás con leves mechones rebeldes que adornan su frente, los dos miramos a los invitados que se encuentran sentados y todos aplauden como si en realidad estuviesen felices por nosotros pero no es así. Yo simplemente arqueo mis labios en una leve sonrisa rogando que esto acabe rápido.—Estás hermosa— Menciona mi futuro suegro con una sonrisa —Eres perfecta para ser la esposa de mi hijo—Muchas gracias— Le sonrío como respuesta —Trataré de ser la mejor nuera que pueda tenerEl padre de el hombre con el que me casaré simplemente sonríe de manera formal sabiendo la razón por la que esta boda se está llevando a cabo.—Lev Konstantin— Habla el padre frente a nosotros —¿Aceptas a Elihana Miller como tu esposa?— Mi futuro esposo me mira fingiendo amor —Para amarla, respetarla hasta ¿Que la muerte los separe?Sé perfectamente lo que va a contestar, sonríe formalmente y vuelve a mirar a la persona representante de Dios, si en este momento dijera que no tal vez nuestro futuro sería mucho peor.—Acepto— Declara el hombre de ojos negros —Para amarla y respetarla por toda la eternidad—Elihana Miller ¿Acepta a Lev Konstantin como su esposo? Para am-....— Iba a seguir con su sermón pero lo detengo alzando mi mano con una sonrisa, como pensé antes, quiero que esto se acabe lo más pronto posible—Acepto— Digo rápidamente con voz alta—Los declaro marido y mujer, lo que Dios unió que no lo separe el hombre— Termina de hablarMi esposo y yo nos miramos fijamente, con frialdad él toma mi mano y entrelazamos nuestros dedos, me da un rígido y ligero beso en los labios, para después disponernos a caminar hacia la salida de la iglesia mientras todos nos miran con envidia, aunque con una sonrisa en sus rostros.Subimos a su auto rumbo a mi nuevo hogar, la mansión Konstantin donde será la fiesta de la compuesta boda, en el camino no nos dirigimos una sola palabra, él simplemente se concentraba en la carretera y yo solo miraba por la ventana del auto los árboles pasar rápidamente, no es necesario hablar, nisiquiera nos conocimos antes de hoy porque no quisimos, solo queríamos que esto pasara rápido, para que fuese solo un sutil disgusto.Llegamos a la hermosa casa, rodeada de árboles y un gran jardín cubierto de flores de todos los colores, en realidad es muy bella y me la imaginaba totalmente diferente, allí estaban los invitados esperándonos, agarrados de la mano sonreímos incómodamente y hablamos sobre nuestro amor.—¡Que bonita pareja!— Nos habla un amigo de mi padre —Que su felicidad dure—¡Gracias!— Le respondo con una sonrisaSe nota que mi padre no le ha mencionado nada, y así es mejor, yo tampoco se lo dije a nadie, simplemente decía que estaba conociendo a alguien y que estaba muy enamorada, así ya el rumor creció y no fué una sorpresa al decir que me casaría.—¡Muchas gracias— Responde Lev rápidamente—Que bueno que su amor haya acabado con la enemistad de las dos familias, ya era hora de que los imperios Miller y Konstantin se unieran—Es verdad, el amor de mi esposa y yo lo puede vencer todo— Responde mi esposo hipócritamenteSe nota que Lev sabe cómo aparentar, lo veo y en su mirada parece que mira a todos como simples hormigas y estoy segura que le encantará alentar de la esposa que tiene, como ya me había dicho es un total patán y narcisista.—¡A bailar el vals tortolitos!Mi amiga, la hija del sujeto que hablaba con nosotros llega para llevarnos a bailar, en realidad no quiero pero tenemos que hacer un buen teatro, con baile de novios y todo.—Vamos— Mi reciente esposo habla y camina sin invitarme hacia los invitados—¡Que guapo es!— Exclama Violeta con una gran sonrisa de felicidad —Que suertuda eres, debiste haberme presentado a tu esposo antes—Queria que fuera una sorpresa— Afirmo intentando dar una explicación al porqué jamás lo conoció —Sabes que no me gusta alardear y quería que todos quedaran maravillados con mi esposo hoy—Pues lo lograste porque eres la envidia de muchas invitadas el día de hoy, lo juro— Mira alrededor a las demás invitadas, con su mirada noto como las está juzgando —Son unas estúpidas hablando de tu esposo a tus espaldas—Lo sé amiga y me gusta— Sonrío con hipocresía —Todas estas chicas les encantaría un esposo como él, pero no será así—Vallamos donde tu esposo mejor— Toma mi mano —Quiero conocerlo mejor para saber cómo trataMe dice mi amiga y yo caminamos hacia donde se encuentra para acabar con este baile de una vez, en el centro de los invitados nos encontramos bailando lentamente mostrando lo felices que somos.—Vestida de negro ¿El día de tu boda? Que indecente— Musita en mi oído crudamente—Me caso contigo por obligación— Respondo con seriedad— Si fuese por amor traería un hermoso vestido blanco—Los dos nos casamos por obligación— Me mira con sus penetrantes ojos oscuros —No vuelvas a usar negro en mi presencia, es algo triste, no me gusta—No me interesa si te gusta o no— Lo miro desafiando con la mirada sus ordenes —Uso los colores que me apetezcan, y me encanta el color negro—En mi presencia no usarás color negro— Refuta nuevamente—No podrás impedirlo, toda mi ropa es de este color y no cambiaré todo mi estilo porque así lo dices— Me acerco a su rostro—Entonces tendré que quemarla lamentablemente— Amenaza con una sonrisa para que nadie sospeche lo que me dice—¡No te atrevas!— Le susurro la nuevamente a su oído —Soy capaz de hacer muchas cosas si tú haces eso—Pues ya verás cariño— Parece que está decidido a dominarme—Ya veremos mi amor— Le respondo con una sonrisa, dominar a Elihana Miller no es fácil, soy un ave rapaz ............Los invitados se han ido, yo estoy en mi habitación dada por mi suegro viendo como el auto de mi padre sale de este lugar dejándome sola, ahora estoy casada, soy la señora de Konstantin y tengo que mostrar lo feliz que estoy aunque no sea así, no tengo sueño, quiero morir maldición.Me quito los tacones negros que tenía al igual que mi vestido cambiándolo por otro más cómodo del mismo color, salgo hasta el balcón y un ruido me hace volver a mirar hacia la puerta, parece que alguien ha entrado sin mi autorización, creí que solo yo tenía la llave pero parece que hay una copia.—Parece que estás de luto— Lev entra y comienza a hablar —¿Quien se murió?— Pregunta sarcásticamente —Tu esposo aún sigue vivo así que no te sientas tan miserable—Así es, estoy de luto porque mi libertad a muerto— Le contesto con frialdad —Mi esposo no ha muerto, eres tú, pero el amor de mi vida si está bajo tierra—Eso es ridículo— Se acerca a mí —Yo nunca tuve libertad y no me quejo— Agrega —Tu tampoco eres el amor de mi vida—Yo sí me quejaré, quieras o no— Evado su observación —No me interesa ser el amor de tu vida, jamás lo sería—Haz lo que te plazca, mientras sigas fingiendo que eres la esposa más feliz del mundo no me importa que te quejes ni que no seas el amor que quiero—Eso haré, pero no porque tú me lo haz pedido, lo haré porque quiero— Volteo mi mirada hacia la ventana —Tu no podrás ordenarme Lev—Mañana saldremos— Me dice a punto de retirarse dándose la vuelta hacia la puerta —Ya estás avisada—No— Le respondo cortantemente—No te estoy pidiendo autorización alguna, te estoy avisando para que vallas buscando un atuendo que no sea negro—No tengo atuendos de otro color— ¿Quien se cree? Parece que no entiende que solo uso negro —Ve solo, yo no iré a tu salida—Pues primero iremos a un centro comercial entonces, pero irás conmigo, es mi última palabraNuestras miradas chocaron por un momento hasta que una chica la cual había visto mirándome desde que llegué aquí se acerca a él, parece ser parte de la servidumbre por su ropa, su cabello es negro y corto, con mechones los cuales cubren su frente, mirada tímida y dulce pero para mí así es como mira una víbora, de dulce y tímida no tiene nada.—Señor, su padre lo nesesita— Le habla con una dulce voz y una mirada llena de amor —Lo está esperando en su oficina— Termina la frase y sonríe, algo que mi esposo nisiquiera nota—Eliahna, prepárate— Me dice antes de irse —Gracias— Pasa por su lado y eso es todo lo que le diceLa chica que miraba tiernamente a Lev se queda mirándome aunque noto que no lo hace con cariño cómo lo hacía con él, esta chica es más hipócrita que un lobo disfrazado de oveja, parece que me quiere matar con la mirada y deduzco porqué.—Lev solo se casó contigo por obedecer a su padre— Me habla con odio —No eres nada para él, nunca lo serás así que ve acostumbradote a que te trate como un cero a la izquierda—Yo igual— Le respondo —Tambien me casé con él porque amo a mi padre y me pidió que lo hiciera— Me acerco para mirarla mejo —Lev no me tratará como un cero a la izquierda, eso lo hace contigo —Le sonrío sin gracia —Tal vez te guste pero es mi esposo—¿¡Quien te ha dicho que me gusta!?— Noto como se exalta, quiere ocultarlo pero ya lo he descifrado, se ha enamorado del patán con el que me caséUna carcajada sale de mis labios y me río como si ella no estuviese aquí, solo veo su serio rostro mirándome con cólera.—¡Porfavor! Se nota que mueres por él, pero yo soy su esposa aunque sea por un acuerdo, no te acerques— Intento demostrarle el interés que no tengo por mi esposo —Ya es mi hombre, no puedes hacer nada—O ¿¡Que!?— Me desafía con la mirada —Eres una desconocida y yo llevo aquí años, nadie confiará en tus palabras—¿Quieres averiguarlo?— Me acerco a ella que está en la puerta de mi habitación —Llevas años aquí y no haz conquistado a Lev, puedo notar que no eres una rival digna para mí —En realidad sólo me estoy invirtiendo con esta mujer—No está conmigo porque no he querido, si me hubiera puesto ese objetivo yo sería su esposa pero no lo hice, porque no me gusta —Sigue negándoseYo simplemente sonrío para ver su cara llenarse de más rabia aún.—¡Largate!— Le ordeno a la pelinegra de ojos oscuros para proceder a cerrar la puerta con fuerza frente a su caraAhora tengo que soportar a un esposo que piensa que el mundo gira a su alrededor y a su enamorada que me odia por casarme con él ¡Que fastidio! .Abro mis ojos rápidamente y me acuerdo de todo lo que había sucedido el día anterior, mi nueva vida de hoy en adelante, mi boda, mi nueva casa y como ya había encontrado personas a las cuales no les caía muy bien, la verdad sobre las personas a las que no les caigo bien no me interesa, pero esta vida será difícil.Me pongo de pié en dirección al baño, mi cabello negro estaba alborotado así que procedo a desenredarlo, me doy una ducha esperando que el tiempo pase y que cuando salga Lev no esté por ningún lado, procedo a vestirme y salir a saludar a la familia aunque no desee ver a Lev hay que hacerlos, soy su esposa, no era broma cuando le dije a mi esposo que toda mi ropa es negra, en realidad es así. Bajo las escaleras lentamente, todo es muy lindo y demuestra mucha belleza con un toque clásico, miro hacia el pasillo y veo a pasar a una mujer de cabello negro, con verías canas, rostro cariñoso pero parece que está apurada, por eso camina rápidamente, como no tengo nada mejor que hace
Sonrío levemente en respuesta a ese comentario, rayos, ese comentario fué demasiado para mí, no pensé que cosas así pudiesen salir de su boca, su mirada lo delata, está concentrado en mis ojos, baja hasta mis pechos, continúa con mi cintura terminando en mis piernas, si digo que no me gusta que me mire estaría mintiendo, pero no lo puedo demostrar.—Lo sé, lo sé— Es lo único que le respondo para después voltear la mirada y cambiarme nuevamenteMi esposo se queda esperándome y yo mientras pongo mi ropa nuevamente pienso ¿Es la primera vez que lo veo sonreír? Es un tipo tan serio y amargado que noto que es la primera vez que arquea sus labios en forma de una sonrisa aunque solo fuese por un instante, creo que nisiquiera está acostumbrado a hacerlo, sonrío pensando que tal vez su rostro le duela cada vez que sonríe.—Vámonos— Le digo apenas lo veo observando su teléfono, tal vez tiene otro compromiso y yo aquí haciéndolo perder el tiempo —Está bien— Me responde mientras mete la mano con
ELIHANA: ¡Mierda! En realidad el vestido si me encantó, sería algo atípico destruirlo, yo no lo hice pero tengo la certeza de saber quién fué, y si no me estoy equivocando la persona que lo hizo se nota que no me conoce y no sabe los estragos que puedo causar en su vida por un simple vestido.Salgo de la ducha y veo mi vestido aún tirado en el piso desde anoche, empiezo a recoger cada una de sus partes con indignación, después de hacerlo lo arrojo al bote de basura y comienzo a prepararme.Me cambio de ropa utilizando un conjunto de color oscuro para luego proceder a salir de la habitación, no quiero llegar al comedor, tal vez Lev esté ahí y sería desastroso como lo fué ayer, aunque traté de ser amable con él lo único que hizo fué que perdiera las ganas de verle su rostro nuevamente.Bajando lentamente las escaleras veo pasar nuevamente a Paty con lo que parece ser ropa la cual lavará ¡Que buena casualidad! Preguntaré antes de encontrarme con mi cruel esposo. —Paty— La llamo, ella se
—No te metas en esto papá, esta necia acaba de abofetearme— Habla Lev intentando justificar su forma de actuar —Así es, lo hice porque quemó toda mi ropa— Me defiendo mostrando mis prendas las cuales aún están en llamas —No tiene vergüenza y ahora no le deja libre —¡Como te atreves Lev! Tú ira no deja que pienses las cosas claramente, suelta a tu esposa que le estás haciendo daño— Habla mi suegro enojandose —Las cosas no tienen que ser de esta manera, hablando pueden llegar a un acuerdo—¡No! Ella tiene que aprender que no es una Diosa y que tiene que hacer lo que diga— Mi esposo sigue sin soltarme —Se hace lo que yo diga, no me importa quien sea, tú sabes eso papá —Elia no tiene que obedecerte hijo, suéltala ya porfavor— Rick trata de no aumentar su cólera —Los dos pueden hacer lo que quieran, ella no te ordena nada, tú tampoco puedes —Te he dicho que no lo haré ¡Maldición!— Su agarre aumenta pero intento no demostrar mi dolor —La llevaré arriba y ahí se quedará hasta que sepa qui
—Llegas más de una hora tarde— Me dice Lev apenas me ve con una expresión fría y detestable —Agradecele a tu sirvienta que bajé— Volteo mi mirada hacia arriba, ella está viéndome desde el piso superior —Si no hubiese sido por ella, seguiría en mi habitación porque ganas de salir con el estúpido que quemó mi ropa no tengo—Como sea— Parece que a mí esposo no le importa ni en lo más mínimo —No me arrepiento de haberlo hecho— Habla de mi ropa —Vamos que ya estamos retrasados Salimos de la mansión Konstantin y subo al auto el cuál él maneja, no pienso hablarle así que solo observo por la ventana mientras él no quita la vista de la carretera. —No llevarás ropa negra, podrás tener todos los colores a tu antojo pero ese no— Vuelve a darme la orden que me ha dado desde el día que lo conocí—¿Porqué odias tanto el negro? No entiendo que tiene de malo, además lo estás usando en estos momentos— Mi mirada señala su traje, el cual es de ese mismo color con una corbata vino tinto —Ya te he dicho
ELIHANA:En realidad quería mostrarle a Lev que no soy tan caprichosa como para dañar un hermoso vestido, cuando tuve la oportunidad huí de su vista en busca del vestido más esplendoroso que pudiese hallar.—No me habías invitado a la reunión de hoy— Le digo mientras conduce —No pensé que te gustaría venir, la última vez...— Corta la frase y termina de habla —No lev, la última yo no dañé ese vestido— Le reitero y decido cambiar de tema —Además como tu esposa debo estar a tu lado, que no se te olvide y me dejes a un lado —No te dejaré a un lado— Esboza un sonrisa —Si hoy te portas como la esposa más enamorada del mundo —Yo me portaré felizmente si tu actúas como alguien que me ame, mirame como si solo yo existiese y hagamos de nuestro matrimonio una realidad— Él me mira —Una realidad por una noche —¿Quieres hacer un trato?— Vuelve a posar su mirada al frente —Está bien y como vamos a empezar ya mismo yo me bajaré de auto, y tú esperarás que yo te abra la puerta ¿Entendido?Yo asien
¡Rayos! Todo mi cuerpo duele, parece que mi nariz ha dejado de sangrar pero todo mi rostro está manchado, en estos momentos me arrepiento de salir solo, Elihana es valiente pero no podía arriesgarme a que le hicieran algo ¡Diablos! ¡Elihana! ¿¡Donde rayos está!? Comienzo a buscarla con la mirada, estoy en el piso con los brazos atados a una viga que sostiene lo que parece ser un lugar abandonado.Empiezo a tactár como mis dedos, una cuerda me tiene inmovilizado por el tronco de mi cuerpo, tras de mí toco unos suaves dedos ¡Elihana! Parece que sigue inconsciente, no la puedo ver, solo siento sus manos, por lo que noto estamos atados a la misma viga pero opuestamente, ella no puede verme y yo no logro visualizarla tampoco.—¡Elihana!— La llamo esperando respuesta pero no obtengo ninguna —Vamos, despierta, tenemos que huir de aquí— Sigo insistiendo pero es imposibleNo veo ninguna persona además de nosotros dos, continuo tocando sus manos intentando hacer leves movimientos para que vuelva
Un auto entra a una hermosa mansión, los jardines adornados de pinos hermosos, otro sujeto de cabello gris por las canas de los años lo espera en la entrada, se nota que está extrañado por esta visita, tal vez no la esperaba.—Rick ¿Qué pasó?— Pregunta apenas lo ve rápidamente el hombre de ojos miel —Mi hija está bien ¿Verdad?—¡Lev y tú hija han sido secuestrados!— Dice con cólera el hombre que acaba de llegar— Lo siento, mi hijo es muy imprudente —¿¡Quien lo ha hecho y porqué!? Saldré ahora mismo, los voy a encontrar y mataré al desgraciado que se atrevió a dejar cautiva a mi hija— Mira hacia su derecha —¡Milo!— El sujeto de ojos verdes lo mira esperando su mandato—Ese es el problema— Responde el padre de Lev mientras camina con su compañero —Yo sé quien es, y lo que pide para no hacerles daño, no intentes nada porfavor, va a ser peor—Te estás demorando en revelarme el nombre de ese bastardo ¡Hazlo ya o moriré de la sosobra!—Es el mejor amigo de Lev— Le confiesa para proceder a