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07: Conquistar? Ya yo te conquisté

ELIHANA:

En realidad quería mostrarle a Lev que no soy tan caprichosa como para dañar un hermoso vestido, cuando tuve la oportunidad huí de su vista en busca del vestido más esplendoroso que pudiese hallar.

—No me habías invitado a la reunión de hoy— Le digo mientras conduce

—No pensé que te gustaría venir, la última vez...— Corta la frase y termina de habla

—No lev, la última yo no dañé ese vestido— Le reitero y decido cambiar de tema —Además como tu esposa debo estar a tu lado, que no se te olvide y me dejes a un lado

—No te dejaré a un lado— Esboza un sonrisa —Si hoy te portas como la esposa más enamorada del mundo

—Yo me portaré felizmente si tu actúas como alguien que me ame, mirame como si solo yo existiese y hagamos de nuestro matrimonio una realidad— Él me mira —Una realidad por una noche

—¿Quieres hacer un trato?— Vuelve a posar su mirada al frente —Está bien y como vamos a empezar ya mismo yo me bajaré de auto, y tú esperarás que yo te abra la puerta ¿Entendido?

Yo asiento con la cabeza, él baja del auto y esplendorosamente camina hasta la puerta por donde saldré, abre está con un sonrisa fingida a lo que yo respondo igual, tomo su brazo y caminamos hacia el salón donde todas las personas se nos quedaron observando, Lev vió a sus amigos así que caminemos hacia su mesa.

—¡Lev!— Saluda un hombre de ojos azules, un poco intrigantes para mí pero no me llama la atención —Veo que vienes acompañado, después de la boda por fín volvemos a ver a tu hermosa esposa

—Es cierto— Otro sujeto de ojos marrones habla —No sé cómo te conseguiste el amor de esta bella dama— Me mira y sonríe formalmente

—Si, ella quería acompañarme para estar a mi lado siempre, no pude decirle que no— Comienza a fanfarronear mi esposo —Ya vez Andrew tengo mucha suerte al estar casado con ella— Sigue hablando cosas inciertas

Lev me muestra mi lugar y me ayuda a tomarlo, él se sienta al lado mío y comienza a hablar con sus amistades.

—Y cuéntame Elihana— El más simpático de todos me habla —¿Lev es buen esposo?

—No me puedo quejar— Actúo y tomo la mano de Konstantin —Es todo lo que una mujer quiere, guapo, responsable, me escucha cuando lo nesesita, es increíble

—¡Eso me encanta!— El ojos azules sonríe felizmente —Lev es un amargado pero parece que tú lo haz logrado conquistar

—Callate Pete— Mi esposo lo Interrumpe, pero noto que no lo hace con ira —Estamos en una reunión de negocios

—Oye Pete— Andrew le habla y este lo mira —Falta preguntarle cómo es en la cama ya que estás tan hablador sobre el tema

Por un momento esa pregunta me hizo sentir incómoda pero en realidad todo era una broma, el hacedor de esta se estaba riendo y sus compañeros también.

—¿Les cuento Lev?— Dije sencillamente para ponerlo incómodo y lo miro con satisfacción sabiendo que lo logré

—¡Rayos lev!— El ojiazul se sorprende —Tu esposa es muy osada

—Eso es algo que me encanta— Mi esposo no dura mucho intimidado y vuelve a tomar el control —Ella es tan valiente que hasta yo me sorprendo —Me mira con sus oscuros ojos, toma mi mano y le da un leve beso

—Soy tan valiente como tú amor— Le respondo con una sonrisa —Por eso me amas

—Es cierto— Me responde, lentamente me acerco a él y dándole un beso como respuesta al suyo, en su mejilla

—Ya vuelvo— Les sonrío a los compañeros que están con nosotros y me pongo de pié

—No te tardes cariño— Lev me habla hipócritamente

Me dirijo al baño pasando por las miradas de varias personas, algunas con cariño, otras con deseo, las chicas con cólera y ya me estaban hartando, entro al baño rápidamente y decido quedarme ahí por unos minutos.

Luego salgo, mirando hacia la mesa donde estaba sentada, mi esposo me mira y en ese momento choco con otro sujeto, él me mira extrañado, los ojos del desconocido son verdes, su cabello es castaño, un poco ondulado y su mirada muestra supremacía.

—Lo siento— Me responde tomando mi mano son darme cuenta —Su belleza me impactó a la velocidad de la luz haciendo que mis sentidos se entorpecieran

—No se preocupe— Intento disculparme igual —Yo estaba entretenida y no noté su presencia, le pido una disculpa

—No la disculpo— Me sonríe —Lo haré si acepta una salida conmigo un día de estos

—Sería algo interesante— Sonrío amablemente —Pero no me conquistará tan fácil

—Digame lo que tengo que hacer para conquistarla y lo haré, no tengo intenciones en rendirme

—Se nota que no lo sabe, mis gustos son muy especiales y además estoy casada

—Así es— Alguien interrumpe nuestra conversación —Ya está completamente comprometida, creo que no podrá hacerle caso— Lev le habla al otro sujeto mientras se acerca a mí y posa su mano en mis caderas

—Si es así procure no dejarla sola, su belleza es tanta que podría perderla fácilmente si la pierde de vista

—No la dejaré sola ni un segundo, usted no vuelva a acercarse o no seré tan amable como lo soy en este momento— Noto como sus ojos se oscurecen y un aura muy pesada comienza a sentirse

Esto puede salirse de control en cualquier momento, todos nos están mirando y estos dos sujetos parece que tienen una batalla de miradas, no puedo dejar que esto continúe y una pelea empieze.

—Ya no importa mi amor— Intento que mi esposo se calme, vamonos, tus amigos nos esperan— Acerco mi mano hacia su rostro

Lo miro y noto que aún no lo puedo convencer, limito el espacio entre nosotros y sin que se lo espere decido darle un suave beso, el cual se convierte en algo más duradero, sus labios son extremadamente suaves y su forma de besar es única, decido separarme rápidamente de él ya que estamos en un lugar público y poco a poco logro sentir su aliento recorriendo mi cuello.

Lev vuelve a mirar al sujeto que seguía frente a nosotros y este decide alejarse, tomo la mano de mi esposo y caminamos hasta nuestra mesa nuevamente.

LEV:

¿Que acaba de pasar?

Pues es una pregunta un poco fuera de lugar porque sé perfectamente lo que pasó, aunque no logro entender, manejo nuevamente hacia la mansión y Elihana no me ha dicho una palabra desde que se despidió de mis amigos.

Su beso fué tan inesperado que no pude evitarlo, por un momento mi cabeza quedó en blanco y quería continuar pero fui detenido por ella, habían muchas personas y todos nos miraban eso no era bueno.

—Lev— Me habla primeramente con un tono de preocupación leve —Mira

—Que— Noto que está señalando el retrovisor, hay dos motocicletas detrás de nosotros

—Nos están siguiendo— Me dice mientras comienza a ponerse nerviosa aún más

—No te alarmes, cambiaremos de ruta y así sabremos que pasa

Acelero un poco más pero siguen atrás, decido cambiar el rumbo y tomar varias desviaciones para aclarar las dudas de Elihana, lamentablemente es verdad, nos están siguiendo.

—Dame tu arma— Me dice abriendo la palma de su mano

Yo estoy manejando así que se la doy rápidamente, mi esposa abre la ventana y comienza a disparar contra los desconocidos de las motocicletas, como era de esperarse ellos hacen lo mismo.

—¡Acelera!— Me grita

Sin ánimos de discutir lo hago mientras ella vuelve a disparar ferozmente, no pensé que mi esposa tuviera tales talentos.

Debí imaginarlo pues es la hija de un mafioso, debe saber cómo defenderse, sigo conduciendo pero una camioneta aparece de la nada y se atraviesa en la carretera haciendo que frente en seco.

—¡Mierda!— Le arrebato el arma a la pelinegra —Toma esto— Le doy una navaja que traigo en mi bolsillo

—¿Salimos?— Me cuestiona rápidamente

Los desconocidos de las motocicletas para y se acercan al auto.

—Si— Le digo y salimos rápidamente

¡Joder! Son muchos, cuatro sujetos para un hombre y una mujer, además de eso otro par sale de la camioneta que se atravesó frente a nosotros, no me puedo arriesgar a que le hagan nada a ella, tenemos que darnos por vencidos.

—Elihana— Alzo mi voz y ella me mira —Suelta el arma, alza tus manos

Los tipos de las motos simplemente nos miran, no los conozco y tienen casco, es imposible saber quiénes son y que quieren, me acerco hacia ella lentamente dejando caer mi pistola, quedamos los dos con las manos arriba rodeados de desconocidos.

—Maldito, te hemos hallado— Uno de ellos me habla

Se acerca a mí y me golpea con fuerza en el rostro, esto dejará grandes marcas, vuelve a hacerlo acompañado de una patada a mi estómago y otro nuevamente en mi cuello.

Esto hace que pierda fuerza y mis rodillas toquen el piso, de un momento a otro un nuevo golpe me impacta, su pié hiere mi rostro y mi nariz comienza a sangrar ¡Mierda! Si intento algo Elihana saldrá lastimada, tengo que resistir.

—¡Déjalo malnacido!— Grita desesperadamente mi esposa, no pensé que le importara

—Hey— La persona que me golpea llama a otro sujeto —Calla a esa perra, me están molestando sus gritos

Se acerca a ella y la toma de su cabello, ella simplemente lo mira con rabia y desprecio, otro tipo se acerca por su espalda y la golpea fuertemente haciendo que pierda el conocimiento.

—¡No porfavor!— Intento detenerlos aunque no sirve de nada —No le hagan daño a Elihana, déjenla ir

—Tu cierra la m*****a boca— El tipo frente a mí me habla —Callado puedes hacer mucho más

Vuelve a golpearme en repetidas ocasiones hasta que caigo al suelo simplemente mirando el rostro desmayado de mi esposa, se ve tan vulnerable, no aguanto el dolor, cierro mis ojos y todo se nubla.

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