Justicia equivocada. Capítulo 41: El torbellino de la desesperación.

Payton estaba ansioso, por eso no pudo esperar más, deseaba saber de Beatriz, lo que pensaba, cómo había reaccionado frente al pequeño. Así que horas después, de haber dejado a Aquiles con Laica, decidió irse el mismo en el vehículo sin esperar ningún chofer.

Condujo hasta la casa familiar de Beatriz, el recorrido lo hizo en tiempo récord.

Cuando llegó, lo pensó por un momento, pero al final tocó el timbre y uno de los trabajadores salió a recibirlo.

—Buenas tardes, por favor, he venido a conversar con Beatriz —dijo tratando de contener la ansiedad.

—Buenas tardes, señor, lo siento, pero ella no se encuentra. De hecho no ha venido —pronunció el trabajador, con el rostro marcado por la indiferencia.

—¿Cómo es posible? En la mañana yo traje a mi hijo y a su niñera para que la vieran ¿Puede llamarla a ella? —pidió, frunciendo ligeramente el ceño y sin poder evitar sentir una repentina opresión en el pecho.

—Lo siento, pero ella tampoco está, señor ni siquiera la he visto.

El trabajador
Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo