Justicia equivocada. Capítulo 10: Hombre obsesionado

La mirada de Beatriz se endureció y su paciencia se agotó.

—¿Es en serio que me estás reclamando eso?, espetó, con incredulidad en sus palabras.

La mujer, de pie ante ella, con una mueca de desprecio, ¿realmente creía que podía hacer que Beatriz se acobardara? Después de enfrentarse al señor de la casa, cuyo aspecto infundía respeto y temor, aquello no era nada.

Había rozado el peligro, bailado con el peligro mismo; una simple subordinada no le aceleraría el pulso.

Colocando con cuidado al niño en la cuna, Beatriz miró a su adversario de frente, con la barbilla desafiante.

—En realidad no te acusé directamente, aunque ahora que lo pienso… —comenzó a decir pensativa porque si algo había aprendido en la cárcel es que si mostraba miedo, la debilidad, peor la tratarían. —sí que debí hacerlo, aunque todavía puedo.

La acusación flotó en el aire como una espada, preparada y lista.

—Porque lo que le hiciste a ese niño indefenso... solo lo puede hacer una persona cobarde.

La tensión entre
Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo