—Para donde vamos Venco—le pregunto, ya que me guía no se a donde.—Ya lo veras.No tengo miedo, por alguna razón no siento que deba desconfiar, pero si tengo mucha curiosidad.Nos detenemos y frente a el, me pongo mas nerviosa, quien me muestra una llave maestra que brilla en su mano. Me siento intrigada y curiosa, y no puedo evitar preguntarle:—¿Por qué me muestras esto?Venco sonríe y me mira con una expresión seria.—Te muestro esto porque confío en ti completamente —dice—. Confío en ti más que en nadie en este reino.Me siento un poco sorprendida por sus palabras, pero también me siento halagada. Venco sigue hablando:—Además, quiero mostrarle algo. Algo que creo que debes ver.Me entrega la llave maestra y me señala una puerta que se encuentra a unos pasos de distancia.—Abre esa puerta —me dice.Me siento un poco nerviosa, pero también curiosa. Me acerco a la puerta y inserto la llave en la cerradura. La llave gira suavemente y la puerta se abre con un clic.—¿Qué encontraré
Me quedo en silencio por un momento, esperando a que Ocaso diga las palabras que tanto anhelo escuchar. Y cuando finalmente las escucho, mi rostro se ilumina de felicidad y emoción.—Sí, me casaré contigo —dice Ocaso, con una sonrisa en su rostro.Me siento como si estuviera flotando en el aire, como si todo mi mundo hubiera cambiado en un instante. Me acerco a Ocaso, tomo su mano y deslizo el anillo rojo sobre su dedo, sintiendo una sensación de satisfacción y completitud.Ahora me levanto y miro a Ocaso a los ojos, sintiendo una conexión profunda y emocional con ella. Sin decir una palabra, me inclino hacia adelante y le doy un beso apasionado y romántico, sintiendo que mi corazón late con fuerza en mi pecho.El beso es como un sellado de nuestro compromiso, un símbolo de nuestro amor y dedicación mutua. Me siento como si estuviera en el cielo, como si nada pudiera hacerme daño mientras estuviera con Ocaso.Finalmente, me separo de Ocaso y la miro a los ojos, sonriendo.—Me encantas
Me detengo en seco, mis sentidos en alerta, mientras la red se alza frente a nosotros. Es una trampa, una emboscada. Me doy cuenta de que hemos sido engañados, que alguien nos ha estado esperando.—¡Es una emboscada! —grito, deteniendo a mis hombres—. ¡Cuidado!Ryker, Orion y Kaid se vuelven hacia mí, sus ojos escaneando el entorno, buscando el peligro. Pero es demasiado tarde. Los lobos de Morax salen de la nada, sus dientes afilados y sus ojos brillantes de rabia.Me preparo para la pelea, mis músculos tensos y listos para actuar. Ryker, Orion y Kaid se colocan a mi lado, formando un círculo defensivo alrededor de mí.—¡Vamos a matarlos! —grita uno de los lobos de Morax, un gran lobo gris con una cicatriz en la mejilla.—¡No si nosotros tenemos algo que decir al respecto! —responde Ryker, mostrando sus dientes.La pelea comienza, los lobos de Morax atacando desde todas direcciones. Me muevo rápido, esquivando los ataques y contratacando con mis propias garras. Ryker, Orion y Kaid lu
Me dirijo hacia la casa del cerrajero, el hombre que creó todas las cerraduras y la llave maestra de nuestra manada. Es el único que sabe cómo cambiarlas y repararlas. Me siento un poco ansioso, esperando que pueda ayudarme a encontrar una solución para recuperar la llave maestra perdida.Al llegar a la casa del cerrajero, me doy cuenta de que algo no está bien. La puerta está abierta y no hay señales de vida. Me acerco con cautela, llamando al cerrajero, pero no obtengo respuesta.Entro en la casa y me encuentro con una escena horrorosa. El cerrajero y su familia están muertos, asesinados de manera brutal. Me siento un golpe en el estómago, no puedo creer lo que estoy viendo.De repente, me doy cuenta del por qué de esta trampa. Morax, mi peor enemigo, ha estado detrás de todo esto. Dejó que descubriera el campamento cerca de la manada del río negro, sabiendo que yo iría a investigar y dejaría la manada sin defensas.Y ahora, ha matado al único hombre que puede cambiar las cerraduras
Me quedo sentado en la oscuridad, sumido en mis pensamientos. La verdad es un peso que me oprime, un secreto que he mantenido oculto durante tanto tiempo. Me duele admitirlo, me duele reconocer que mi peor enemigo es alguien muy cercano. Es alguien que tiene acceso a información que nadie más tiene, alguien que conoce mis debilidades y mis fortalezas. Es alguien que ha estado cerca de mí todo el tiempo, alguien que ha estado esperando el momento perfecto para atacar.Me duele pensar en ello, me duele admitir que alguien tan cercano a mí puede ser tan peligroso. Me siento traicionado, me siento engañado. Pero es hora de enfrentar la verdad, es hora de admitir que mi peor enemigo es alguien que está muy cerca de mí. Es hora de tomar medidas para proteger a mi manada y a las personas que amo. Me levanto de la silla, decidido a enfrentar la verdad y a tomar medidas para proteger a mi manada. Me dirijo hacia la puerta, listo para salir y para enfrentar lo que venga. Estoy listo para admiti
Me quedo parada, esperando que Venco comience a hablar, que me diga la verdad sobre lo que está pasando. Pero en lugar de palabras, siento sus labios sobre los míos, su boca atacando la mía con un beso apasionado. Me sorprendo, no esperaba esto. Pensaba que íbamos a hablar, que íbamos a resolver los problemas que nos están separando. Pero Venco no parece interesado en hablar, solo en besarme, en tocarme. Sus manos recorren mi cuerpo, acariciando mi piel, enviando escalofríos por mi espalda. Me siento débil, mi resistencia se desvanece ante su contacto. Me dejo llevar, me dejo besar, me dejo acariciar.Pero en algún lugar de mi mente, una voz me recuerda que esto no es lo que quería. Quería la verdad, quería saber qué está pasando. Pero Venco no me da palabras, solo besos y caricias. Y yo, débilmente, me rindo a su pasión.Me tira a la cama sorprendiéndome, y Venco no espera, viniéndose sobre mí, su cuerpo restregándose contra el mío. Me siento abrumada por la pasión que emana de él, p
PROLOGOMe desperté sobresaltada por la algarabía que llenaba el aire. Gritos, murmullos, desespero..Olor a sangre, a muerto y desolacion.Mi corazón latía con fuerza mientras me acercaba a la ventana para ver qué estaba pasando. ¿Qué está sucediendo? Pensé con el corazón en la garganta.La imagen me devasto y era como si me atrevesaran una estaca en el centro de mi pecho.Mi manada, mi pueblo, estaba siendo atacado. La escena era caótica, con figuras oscuras corriendo y gritando por todas partes.Sangre, gritos, caos. mi cabeza iba a explotar mientras absorbía la imagen que me desgarraba por dentro.Mi mente se llenó de pánico mientras corría hacia la puerta, mi único pensamiento era llegar a mis hermanitos gemelos. Tengo que protegerlosLa mansión estaba siendo invadida, podía escuchar los gritos y el ruido de espadas chocando contra las paredes.Intenté correr más rápido, pero un consejero me atrapó por detrás, cubriendo mi boca con su mano. lo conocia, sabia quien era, pero aun a
Estoy en medio de la selva, rodeada de árboles altos y densos. El sol filtra a través de las hojas, iluminando el claro donde estoy entrenando. Mi corazón late con fuerza mientras me enfrento a mis oponentes, un grupo de lobos hombres que me superan en número.Soy una loba ahora, después de 5 años de entrenamiento y dolor. La tragedia que sufrió mi familia me hizo buscar refugio en mi lado salvaje, y ahora soy una guerrera poderosa.Mi instructor, un lobo hombre llamado Thorne, me observa desde la sombra. Me ha estado entrenando durante meses, enseñándome técnicas de combate y estrategia.—¡Vamos, Ocaso! —grita Thorne—. ¡Muestra lo que has aprendido!Me lanzo hacia adelante, mis garras extendidas. Los lobos hombres se dispersan, intentando rodearme. Pero estoy lista. Me muevo con rapidez, esquivando sus ataques y contraatacando con fuerza.Uno de ellos se acerca demasiado, y lo derribo con un golpe de mi zarpada. Otro intenta morderme el cuello, pero lo esquivo y le doy un golpe en el