Cuando por fin pude marcharme a mi dormitorio, entré en él asegurándome de que estaba el pestillo bien puesto, pues no quería que Kevin entrara sin más en mi dormitorio para volver a hacerme suya sin yo poder remediarlo. Me senté en la cama, sacando de mi bolso mi móvil para llamar a Aaron, marcando su número escuché como intentaban abrir la puerta de mi dormitorio, tocando después despacio escuchando la voz de Kevin llamándome.

— Alice cariño, ¿cómo estás? — escuche la voz de Aaron

— Estoy bien y mi hija también, pero te llamo por otra razón y es que, Kevin está en casa, ha venido con su esposa y mis padres, Aaron te necesito cariño — le suplique

— No te separes de nona, ahora mismo voy al aeropuerto y salgo de Londres en mi avión, tranquila cariño, dentro de unas horas volveremos a estar juntos — me dijo

— De acuerdo, pero por favor ten cuidado, te amo — le dije terminando los dos la llamada

Deje mi móvil encima de mi mesita dirigiendome despues hacia la puerta, abri el pestillo per