QUERIDAS LECTORAS, LES AGRADEZCO DE TODO CORAZÓN SUS COMENTARIOS Y LES ANIMO QUE SIGAN LEYENDO MI NOVELA, YA QUE ESCRIBO POR Y PARA USTEDES DESDE MI PEQUEÑO CORANZONCITO. PERO QUIERO DECIRLE UNA COSITA SI ME LO PERMITEN. LA NOVELA NO ES COMO EMPIEZA O SIGUE, ES COMO FELIZMENTE VA A TERMINAR Y ESPERO NO DEFRAUDARLAS UN BESOTE GRANDE Y MIL GRACIAS
Aunque desconocía porque mi nona le dio aquella dirección al conductor del taxi, preferí no decir nada aunque no sabía porque no íbamos a mi casa en Miami, cuando el vehículo paró enfrente de unos grandes adosados mi nona le pagó al conductor bajandonos después del vehículo. Mi nona sacó unas llaves de su bolso y abrió la puerta de la vivienda, fijandome cuando entramos que los muebles y adornos que había en esa casa no eran los mismos que teníamos en mi casa anterior, nona me hizo acompañarla por unas escaleras que conducían hasta el piso de arriba, donde pude apreciar que estaban los dormitorio, entramos en uno de ellos y abriendo el armario mi nona, me pude dar cuenta de que toda mi ropa estaba bien colgada dentro, Después de dejar lo que trajimos de la clínica en mi dormitorio, bajamos las escaleras acercándonos hacia lo que parecía una cocina estilo americano, sentandonos en las sillas de cocina que allí se encontraban.— ¿Por qué hemos venido aquí en vez de irnos a mi casa de la
Cuando hablaba con Kevin por teléfono y me dijo que para ver a mi propia hija tenía que aceptar sus condiciones, sabía perfectamente que es lo que quería pero ¿que podría hacer yo contra Kevin? era mi hija y yo la necesitaba como ella me necesitaba a mi.— Está bien Kevin ¿cuales son tus condiciones? — pregunté aun sabiendo lo que quería, pero me quedé sin saber que responderle cuando me contestó— Por teléfono no mi amor, tienes que venir a mi casa y frente a frente hablamos, cuando quieras llámame para decirme cuando vienes a Kansas y yo mismo te recogeré en el aeropuerto, ahora tengo que dejarte, porque tengo mucho trabajo, llamame pronto cariño — me dijo colgando mi llamada— ¿Qué vas a hacer Alice? — preguntó mi nona que escuchó la conversación que mantuve con Kevin— No lo sé nona, sé que debería estar con mi hija, pero temo lo que Kevin me pida a cambio de poder estar con mi pequeña — respondíDurante varios días mi nona y yo íbamos a la clínica donde estaba ingresado Aaron,
Cuando kevin accedió a mi petición, no me lo podía creer, ya que él siempre me hacía ceder ante lo que él deseaba, me gustara o no, se acercó a mí pero ya no retrocedí porque vi en sus preciosos ojos verdes que ya no era él mismo de antes del accidente, ya que sus ojos brillaban como una preciosa esmeralda. Kevin me cogió de la mano llevándome hacia las escaleras que daban al pasillo donde estaban todos los dormitorios, abrió la puerta de un dormitorio fijándome en lo que mi nona tenía en brazos. Se acercó a mí dándome a mi hija, las piernas me temblaban, las lágrimas me era imposible retenerlas ya que caían por mis mejillas ellas solas.— Ven sientate en la mecedora, que estas muy emocionada — me dijo mi nona ayudándome a sentarmeMe quedé mirando a mi hija, besando su preciosa manita que me la tenía cogida como si no quisiera que la dejara, — Se parece mucho a ti cariño — me dijo Kevin— Es preciosa, — dije mirando como mi pequeña doblaba su cabecita buscando su comida— Creo que y
Una vez que examinaron a Aaron, las enfermeras se marcharon quedándome a solas con el doctor que lo iba a tratar, me acerque a su cama, cogiendo su suave mano acariciando su mejilla, mientras le decía cuanto lo amaba.— Señorita Anderson no se preocupe, todo está muy bien, temíamos que el viaje hiciera sus estragos, pero el señor Duncan, está estable — me dijo— Gracias doctor, supongo será el tiempo quien diga si saldrá mi prometido del coma — respondí— Tenemos grandes esperanzas en que el señor Duncan despierte, pero si, el tiempo lo dirá, espero que usted no pierda la esperanza — me dijo poniendo su mano en mi hombro, mientras sonreía.Después de estar varias horas sentada al lado de la cama de Aaron mientras le hablaba con la esperanza de que me escuchara, me levanté de la silla, acerque mis labios a los suyos, besándole con mucho amor. Gire mi cuerpo para marcharme de la sala, me fui hacia la zona de los ascensores, subí al primero que llegó para bajar hasta donde estaba la sali
Como pude, puse mis manos en su pecho para apartarlo de mi, pero como no podía, levante una de mis piernas, dándole un rodillazo en sus partes nobles, haciendo que se encogiera sentandose en el suelo, cogi mi ropa marchandome deprisa de mi dormitorio al dormitorio de mi nona, cerrando la puerta con cerrojo.— Zorra, esto ya se acabó, me las vas a pagar Alice, lo que me acabas de hacer te juro que me lo vas a pagar muy caro — me gritaba Kevin dando puñetazos a la puerta despertando a mi pequeña.Una vez que ya estaba vestida, abri el cerrojo de la puerta, saliendo del dormitorio despacio por si Kevin me estaba esperando al otro lado, me dirigí al dormitorio de mi hija viendo que su padre la tenía en brazos. Cuando Kevin se dio cuenta que lo estaba mirando, dejó a mi hija en la cuna acercandose ami con el semblante muy serio.— Te casaras conmigo ¿me oyes? porque si no aceptas, te sacare arrastrando de mi casa, llamare a la policía, te acusa de intento de secuestro de mi hija y te pasar
Cuando Aaron me preguntó si lo conocía, creí morir en ese mismo momento aunque antes de entrar en la sala ya me avisó el médico que lo trataba que podía pasar que no me reconociera, pero yo confiaba en que no sucediera por como nos amamos los días anteriores al accidente.— Señor Duncan, soy su médico ¿no recuerda a la señorita Alice? — le preguntó— No sé quién es esta señorita doctor, ¿la tendría que recordar? — preguntó Aaron mirándonos él y yo fijamente a los ojos— No claro, no se preocupe de nada ahora, solo deseamos que se recupere — contestó el médico— Lo siento señorita, lo único que ahora deseo es mejorar de mis lesiones y poder volver a Londres y ver a mi abuela, sé que estará muy preocupada por mi — me dijo Aaron— Lo entiendo señor Duncan es muy normal, bueno yo me tengo que marchar y me alegro de que haya salido del coma — le dije intentando que las lágrimas que querían salir de mis ojos no las viera Aaron.— Te acompaño hasta la puerta Alice — me dijo el médicoCuando
Cuando escuche el llorar desesperado de mi hija, enseguida me senté en la cama para ir a calmarla, pero me retenía saber que Kevin estaba con ella, respire hondo y sacando fuerzas de donde no las tenía, me levanté de mi cama, marchandome de mi dormitorio hacia el de mi hija, viendo a su padre con ella en brazos intentando dormirla, mirandome a mi de abajo a arriba con lujuria ya que el camisón que llevaba no dejaba nada a la imaginación.— ¿Qué haces en mi casa? — cuando Kevin me preguntó, sentí un nudo en la garganta que no me dejaba respirar bien, pero no podía marcharme del dormitorio, ya que se le notaba que había bebido Kevin bastante y podía hacerle daño a mi hija aunque no fuera su intención ya que sabía que la amaba como yo— Quiero que me respondas ya — me dijo balbuceando por el alcohol que tenía en su cuerpo— No tengo donde ir ahora, necesito tiempo para encontrar un lugar donde acogerme — respondí enfrentándolo— ¿Y tu amorcito, ya no te quiere? — me pregunto sarcásticam
La mañana siguiente me desperté sola en la cama pero escuchando sonar un móvil y a mi nona hablando, me levanté como pude de la cama de Kevin ya que después de la noche que pase con él, tenia todo el cuerpo dolorido, tapando mi cuerpo con una de las sabanas de la cama, me marche del dormitorio de Kevin hacia mi dormitorio, entre en él dirigiéndome hacia el cuarto de baño, deje la sabana en la cesta de la ropa sucia para entrar en la ducha, despues de ducharme, cogí una de las toallas que habian limpias colgadas en el toallero, volviendo otra vez a mi dormitorio mientras me secaba el cuerpo, seguidamente me puse ropa interior y un vestido corto ya que hacia mucha calor. Me marche de mi dormitorio hacia el de mi hija, cuando entre en su dormitorio me di cuenta de que estaba dormidita en su cuna, me senté en la mecedora que habia al lado de su cuna mirandola fijamente con amor, como una madre mira a su hija.— Alice cariño ¿donde estas? — escuche a mi nonaPara no despertar a mi pequeña,