C68: Sobre mi cadáver.

Transcurrieron los días y Arantza y Landon trabajaron pacíficamente sin tocar el asunto de Lenya. Landon decidió respetar la posición de la muchacha y no presionarla para que ésta tuviera el tiempo y el espacio suficiente para llegar a una elección.

Por supuesto, la ansiedad se había convertido en su compañera habitual nuevamente, pero intentó llevar las cosas con calma. Si atosigaba a Arantza con lo mismo, ella podría terminar apartándose definitivamente.

Aun así, se demostraban su amor con pequeñas acciones, mediante miradas y toques suaves, sin cruzar ninguna línea. Sin importar las circunstancias, Arantza seguía amando a Landon con todas sus fuerzas y era inevitable transmitírselo en cada gesto.

Cierta mañana, Arantza ingresó a la oficina de Landon para entregarle unos documentos, pero en lugar de regresar a su puesto, permaneció observando a su jefe durante unos minutos.

—¿Sucede algo? —preguntó Landon al notar la mirada insistente de su secretaria.

—No… Quiero decir, sí —titubeó
Sigue leyendo en Buenovela
Escanea el código para descargar la APP

Capítulos relacionados

Último capítulo

Escanea el código para leer en la APP