[AREN]Dos días después: 30 de agostoEl tiempo muchas veces pareciera estar en mi contra, para algunas cosas pasa rápidamente, y para otras pareciera que la agujas no se mueven más. Lo que sí se puede decir de estos últimos dos días es que finalmente esta pesadilla esta llegando a su fin. El juicio ha empezado ayer y avanza a paso firme hacia la sentencia que promete ser justa a los crímenes cometidos. Mientras tanto, yo me estoy enfocando en lo que debo; en los negocios y mi familia.Leer la propuesta de Haizea me ha abierto los ojos a la posibilidad de hacer que la empresa vuelva mucho más fuerte que antes. Ella no se da por vencida con sus ideas y eso me encanta. Entre nuestras conversaciones subidas de tono, hemos conseguido enfriar la mente por momentos y hablar de los negocios, algo de lo que por supuesto quiero que ella forme parte.—Señor Aren, ¿esta seguro que no quiere que yo lo lleve al aeropuerto? —me pregunta amablemente Noel y vuelvo a negar con la cabeza mientras que m
[AREN]No sé si es la euforia del reencuentro o la hermosa noticia de que tendremos dos bebés lo que nos tiene así. Lo único que sé es que entramos a la casa en medio de una guerra de besos que por momentos nos deja sin aire.—Me alegra mucho que no haya nadie en la casa —dice en una breve pausa.Sonrió sobre su boca y vuelvo a atacar mientras que mis manos se enredan en su cabello evitando que su cabeza se golpee con la pared que hay detrás suyo.—A mí también me alegra —replico y llevo una de mis manos al final de su vestido para comenzar a levantarlo con urgencia.—Te extrañaba tanto… —habla entrecortado y muerde mi labio inferior.—Y yo a ti… —menciono y en medio de esta deliciosa guerra de besos la levanto en el aire para que enrede sus piernas en mi cintura—. Te amo con locura —digo agitado y sonríe.—Yo te amo mucho más —rebate y en nuestro camino hacia el cuarto algunas de mis prendas desaparecen a causa de sus sensuales y traviesas manos.Las palabras sobran cuando son nuestr
[AREN]Una semana después: 6 de septiembreLas cosas de a poco han ido tomando su rumbo, las pruebas presentadas durante el juicio han limpiado por completo mi nombre haciendo que todo vuelve a la tranquilidad. Por otra parte, el plan de Haizea para producir las partes en la fabrica esta marchando de maravilla y eso hará que las ganancias remonten para así seguir creciendo.A pesar de todo lo que esta pasando en el trabajo y con el caso, nada de todo eso pareciera tener relevancia para mi cuando lo único que tengo en mi cabeza es a ella, nuestros hijos y poder volver a casarnos lo antes posible. Sé muy bien que ha tenido que contratar a una planeadora de bodas para que le ayudara a tener todo listo con la prisa que queremos, pero para mi aun todo sigue dándose muy lentamente. No veo la hora de estar nuevamente casado con ella, de que todo esto que comenzó como un simple trato, ahora se formalice de la manera que debió hacerse siempre. Me imagino los días que vendrán a su lado y no de
[AREN]Dos semanas después: 20 de septiembreTodavía no lo puedo creer mañana Haizea y yo estaremos casándonos nuevamente. El camino no ha sido nada fácil, pero aquí estamos disfrutando de una exquisita cena en el jardín mientras despedimos nuestra temporal soltería.La observo y muero de amor con cada detalle suyo, sobre con esa barriga que cada día se evidencia un poco más. Ella esta feliz, no solo por nuestra boda, sino porque el juicio ya ha concluido liberándonos de todas aquellas acusaciones, y también por todo lo que esta pasando en la empresa. Me encanta verla tan involucrada y desarrollándose como la profesional que es, me hace sentir demasiado orgulloso.—Te ves hermosa —digo de repente y sonríe.—Esto de la boda te tiene muy romántico, ¿no? —bromea haciéndome reír.—Digamos que me siento muy orgulloso de compartir mi vida con una mujer única como tu —me defiendo y alzo mi copa—. ¿Brindamos por nuestra ultima noche de solteros? —propongo sin dejar de verla a los ojos.Ella e
[AREN]Al día siguiente: 21 de septiembreLa primera vez que me case con ella todo fue muy frívolo, pero es que yo no era yo… estaba destruido por dentro y ella de cierta manera también lo estaba. Sien embargo, ahora todo es distinto… me miro al espejo mientras termino de colocarme el esmoquin y noto esta enorme sonrisa que ella genera en mí.—¡Amigo! ¡Pero que elegante luces! —exclama Lucas acercándose a mí.—Gracias, no sabes lo nervioso que estoy —digo con sinceridad.—¿Nervioso? —intercede Alex quien también se acerca a nosotros—. Pero ¿si te estas volviendo a casar con Haizea? —menciona con un tono burlón mientras lleva una de sus manos sobre mi hombro.—Saben muy bien como se ha dado la primera vez, esta es la que cuenta, la que nosotros queremos —comento y me dan una palmada.—Eso sí, aunque ya has comido el buffet completo antes de la boda —se burlan.—Oigan, más respeto es mi futura esposa y madre de mis hijos de la que están hablando —señalo y respiro profundo.—Sabes que es
Regresar a la empresa después de que ella me dejara plantado en el altar, se ha convertido en toda una pesadilla. Los empleados no dejan de murmurar a mi paso, y las miradas repletas de lastima se han convertido en algo común. “El perdedor”, esas son las dos palabras que me persiguen desde hace un mes, pero ¿qué más se puede esperar cuando la boda estaba catalogada como la boda del año? 500 invitados, la iglesia más grande e importante de Miami, y por supuesto el servicio de planeación de bodas más costoso de todos.No hago más que entrar mi oficina, y cerrar la puerta de un portazo para luego comenzar a quitar los portarretratos que enmarcan nuestras fotos juntos al igual que los regalos que ella me dio y yo, con mucho amor atesoraba en esta oficina.—No puedo creer lo que me has hecho —le hablo a su foto y sin más rodeos, tiro todo al cesto de basura.Una vez que hago mi intento por acabar con el pasado, me siento en mi silla y observo todos los papeles y periódicos que se han acumu
Haizea y yo estamos sentados frente a frente alrededor de una de las mesas más alejadas de todas, una que esta de manera paralela a los enormes cristales de este lugar. La vista de la bahía y los rascacielos nos hace compañía, y la luz del sol hace que sus ojos azules cambien a una tonalidad parecida a la que lo hacen los ojos de los siberianos.—Usted dirá, ¿de qué negocios quiere hablarme? —cuestiono rompiendo finalmente el silencio que se hizo presente entre los dos.Ella termina de beber un sorbo de la copa de vino que recogimos de camino aquí, y la apoya sobre la mesa.—¿Sabe realmente quien soy yo? ¿a qué me dedico? ¿o es que solo ha escuchado lo que todos dicen de mí? —pregunta con autoridad y su carácter me agrada.—¿Y qué es lo que dice la gente de usted? —rebato con interés.—Que soy una joven ilusa que tiene la intención de meterse en un mundo que no encajo, que solo busco una fortuna para que la gente me tome en serio —señala haciéndome sonreír ampliamente.—¿Y no es eso l
Al día siguiente: 8 de junio—Revisa ese reporte de venta antes de enviarlo a contaduría, necesitamos que los números estén correctos —le pido a Francisco, y él asiente.—Por supuesto señor Danek —responde sin dudar y luego se da media vuelta para salir de mi oficina y apenas lo hace se encuentra con Inés.Ella sonríe al verlo, y luego pasa a mi oficina.—Señor Danek, la señorita Haizea Alarcón está en la recepción y quiere hablar con usted —me informa y miro la hora.«Eso fue rápido» Pienso y trato de no sonreír.—Hazla pasar, y por favor tráenos dos cafés —le pido amablemente.—Por supuesto —rebate y sin más, ella se retira mientras que yo acomodo la corbata color negra que llevo puesta.«Bueno, llego la hora de hacer el trato más importante que he hecho jamás» En solo cuestión de minutos alguien llama a mi puerta e inmediatamente voy a abrir para encontrarme con su aproximadamente metro setenta de altura vistiendo un vestido azul que hace juego con sus ojos.—Señorita Alarcón, bie