-Es una fortuna que fuera arrestada durante mi turno, Kala muchacha recapacita, tal vez la próxima no pueda librarte de esto
-Gracias – saliendo de la celda y acercándose a su hermana – hermana
-Vamos Kali – acariciando aquella mejilla con cariño – gracias comandante Anderson
-No tienes nada qué agradecer…pero haz que esa joven siente cabeza
La joven asienta mientras con su hermana se marchan, se han quedado sin dinero y ahora deben volver a su hogar a pie.
-Hermana…
-Kali, dime ¿de nuevo? Es la cuarta vez que te arrestan
-Hermana, tenemos que pagar el hospital de Miranda…
-Pero no tienen que ser así las cosas, Kali dime ¿Cómo crees que se pondrá Miri si se enterara?
-Hermana…por favor…esa idiota va a morir
-Yo no dejaré que eso suceda, ahora vamos a casa ¿tienes hambre?
-Pero no hay nada en la casa…
-Ya veré que te hago de cenar – besando aquella frente con cariño
Después de llegar a casa y de que Adriana suplicara a sus vecinos por algo para hacer de comer, la joven le prepara a su hermana su sopa favorita y después de arroparla y dejarla dormida se dirige hacia la sala en donde piensa en qué más puede hacer, pero decide que seguirá yendo a la empresa de Roger lo hará hasta que el hombre orgulloso y engreído se decida a hablar con ella, antes de dormir recibe la llamada habitual del hospital en el que le dicen que su hermana está estable y también le dicen ¿Cuándo va a pagar las facturas pendientes?
-Pronto, pagaré pronto, pero por favor no echen a Miri – colgando la llamada
A la mañana siguiente, Adriana se presentó muy a las ocho de la mañana en la sala de espera de la oficina de Roger.
Nuevamente pidió verlo como el día anterior, y la secretaria esta vez no la miró, la dulce joven se preguntó si sería el día en que podría ver a Roger, o peor sería el día en el que el hombre perdería totalmente la paciencia.
A las nueve de la mañana el asistente personal de Roger, Sammy Ivanov se acercó al hombre, quien como siempre había empezado puntualmente su jornada laboral a las siete de la mañana.
-La señorita Davies está aquí de nuevo, señor
Roger se tensó pero pasó inadvertidamente.
-¿Tienes las proyecciones del acuerdo con Londres? – le preguntó el hombre como si el dulce joven no hubiera dicho nada
El día continuó como si nada, Adriana estaba sentada esperando que el hombre se dignara a regalarle al menos cinco minutos de su preciado tiempo, pero nuevamente al caer la tarde la secretaria del hombre le dijo que…nuevamente se había ido, y por primera vez después de la muerte de sus padres experimentó una enorme oleada de frustración que deseaba gritar y arrojar todo por los aires.
Al tercer día, Adriana volvió a aquella oficina, hubiera querido al menos esta vez llevar algo de comer, pero eso hubiera alertado a Kala.
Pero para su sorpresa hacia el mediodía cuando regresaba de una visita al lavabo, se encontró con una taza de té y tres pasteles de carne calientes pequeños. Dio una suave sonrisa y la secretaria la miró con algo de compasión, la dulce joven estaba más que convencida de que todos en aquella oficina había pasado por el lugar simplemente para mirarla. Todos menos su persona de interés, Roger…
A las tres, la dulce joven había consumido lo que le quedaba de paciencia, estaba harta, y más que todo estaba desesperada. Roger pronto regresaría a Suiza y quedaría aún más lejos, así que sin importarle las consecuencias y sabiendo que su hermana depende de ella, pasó por delante del cubículo de la secretaria del hombre empezando a andar por el corredor hacia la enorme oficina del hombre.
-¡Señorita Davies, no puede pasar por ahí! – le gritó la secretaria
Pero Adriana sabía muy bien que desde el momento en que decidió hacer esto ya había marcha atrás, sabe que obligar a un hombre como Roger a encararla no era lo más prudente, ella sabe bien que a los hombres no les gusta ser encarados. Y más Roger quien podría reaccionar cual troglodita de las cavernas.
Cuando estuvo delante de las puertas y a punto de entrar, unas manos masculinas la sujetaron por los brazos, y por el aroma de ese sujeto, es alguien que ella conoce muy bien…
-Lo siento, señorita Davies, pero nadie entra ahí sin el permiso del señor – dijo una voz con acento suizo
-Isaac – dijo la joven, reconociendo la voz del guardaespaldas personal de Roger – por favor, por esta vez ¿no podría mirar para otro lado?
-Vuelva a su hogar, por la memoria de sus padres. Por favor señorita Davies, hágalo antes de que la devoren viva
Isaac dudó un momento, y Adriana sin pensarlo aprovechó la oportunidad, así que se soltó de su agarre y entró por la puerta.
Roger quedó en shock detrás de su mesa.
Adriana sabía que solo tenía uno o dos segundos antes de que Isaac volviera a intervenir.
-¿Eres un hombre o un cobarde que no se atreve a darle la cara a su exnovia? – le dijo con severidad
Adriana se dio cuenta de que se había excedido y Roger miró por encima de ella a su guardaespaldas con reproche.
-Perdón, discúlpame – dijo ella tratando de que sus nervios no la traicionen
-Isaac…
Aquel hombre simplemente hace una venia y salió de la oficina cerrando la puerta detrás de la joven.
-¿Por qué te estás humillando de esta forma? – preguntó el hombre sin más
-No lo he hecho..
- ¿De verdad? – dando una sonrisa burlona – si no fuera por el respeto que albergo hacia tus padres y Eduard, habría ordenado que te echaran desde el primer día
Adriana se queda mirándolo por un momento antes de tomar coraje para hablar – tengo una proposición para ti
-No voy a escucharte ¿Cómo tienes el descaro de mirarme a la cara?
-Es sencillo teniendo la conciencia limpia y sabiendo que nunca cometí ningún pecado – respondió ella con altivez y en tono desafiante
-Eres una puta desvergonzada
Adriana no se dejó afectar por esa acusación, que está tan lejos de la verdad, pero si le sorprendió que él siguiera necesitando humillarla tanto tiempo después de aquellos horribles acontecimientos, vio la ironía en que al parecer hubiera causado más impresión en él con su supuesta infidelidad que cuando formalizaron su relación.
Ella apenas dio una suave sonrisa, misma que molestó a Roger.
-Llámame como te dé la gana, pero de verdad estoy aquí para ofrecerte un trato de negocios-¿Ofrecerme un trato? ¿y bien qué tiene la pérdida que me puede interesar?-Industrias Davies…Roger queda en shock.-¿Desde cuándo eres dueña? Se supone…-Desde que mis padres murieron…Eduard debía de cuidar de esa empresa, pero como no tiene interés alguno en mis hermanas o siquiera en mí, me la dio hace ocho años…-Esa empresa ni siquiera tiene mercado, ¿Qué hiciste durante este tiempo? Dejaste morir el patrimonio de los Davies-Lo que hice o dejé de hacer durante diez años es mi asunto, no vengo a develar mi vida privada contigo, vengo a ofrecerte un trato- ¿Qué trato? Una empresa en la ruina no me importa además ¿Qué quieres a cambio de que yo me quede con esa miserable empresa?, sabes qué olvidado, sal de aquí…- ¡No me voy! – apretando sus puños con fuerza – tú ya tuviste diez años de venganza ¿es que no puedes siquiera escucharme?- ¿De qué demonios hablas?-Si te casas conmigo, te ceder
-¿Cómo me pondré en contacto contigo? – lanzó la pregunta el hombreElla se sonrojó de golpe y lo poco de orgullo que le quedaba reaccionó para salvarla.-Te daré un número de teléfono, pero no el mío, puedes dejar allí cualquier mensaje- ¿Por qué ese secretismo?La dulce joven ignoró la pregunta y escribió el número de Christian.-Me voy – diciendo antes de marcharse pues ya no le quedaba nada más que decirEl hombre simplemente se encogió de hombros.Cuando Adriana salió se cruzó con Isaac.-No me devoró viva – diciendo ella con una sonrisa – cuando su celular suena, es un mensaje del hospital – Oh no…-Señorita Davies ¿pasa algo?-Tengo que irme – haciendo una venia a Isaac para luego marcharse-Señorita, el amo Pedersen la devorará viva, hasta no dejar ni siquiera su alma….Adriana ha llegado al hospital, en donde Kala está esperando por ella, cuando la ve se acerca y se arroja a los brazos de la joven.-¿Cómo está?-Entró en coma, HermanaLos ojitos de la joven se llenan de lágr
-Esa noche, en el departamento…puede ser que me vieras follando con otra joven – viendo como la joven frunce el ceño – espero que no te esté avergonzando con este recuerdo infantil- ¿Por qué tendría que avergonzarme?-Entonces deja que llegue al fondo del asunto, dado que está picando mi curiosidad ahora – dando un sorbo a su ron – ¿te fuiste con Félix a mi cama porque estabas borracha y molesta por lo que pensaste haber visto, y él se aprovechó de tu estado? ¿o quizás?Adriana miró fijamente la lámpara de la mesa, estaba llena de rabia y resentimiento en contra de toda aquella m*****a familia en especial de esa m*****a mujer que dijo ser su amiga y el primo de Roger, vivió una pesadilla después de esos malditos eventos, todos la señalaban con el dedo, a ella y a sus hermanas como si estas tuvieran la culpa, aunque sus padres le decía que no le diera importancia a aquello simplemente no podía, Klaus; el padre de Roger movió todos sus contactos para arruinar a su familia, y eso nunca p
-Tu sugerencia de casarnos y luego separarnos inmediatamente después de la ceremonia es absurda y carece de fundamento, aunque no lo creas a Eduard le puede dar algo él se preocupa por ustedes – viendo la sonrisa burlona de la joven – él no aceptará algo como eso, y yo no estoy dispuesto a engañarlo de ese modoElla sintió como su todo su cuerpo fuera atravesado con daga ¿Qué habló ese hombre con Eduard?-Entonces ¿Qué sugieres?-Vas a vivir en una de mis casas en Suiza…al menos durante un tiempo considerableAdriana pensó de nuevo en Miranda y Kala y asintió.-Y lo más importante, me darás un descendiente, que por supuesto será un varón…Adriana quedó en shock y apenas su boca se abrió en una perfecta O.-Sí, ya has escuchado – declaró el hombre – yo necesito de un hijo y heredero, viendo que te presentaste a mí en bandeja de plata, bien puedo aprovechar la oportunidad- ¡Estás loco!Roger apenas levantó una ceja.-El hijo es también algo no negociable y a no ser que yo decida cambiar
- ¿Eh? ¿de qué hablas?-Lo que hiciste hace diez años, arruinó el nombre de los Davies…en especial el nombre de Jeffrey…lo que hiciste distanció a los Hansen de los Davies, tengo entendido que hasta estaban hablando de matrimonio entre los herederos Hansen y tus patéticas hermanas, y mira todo lo que causaste zorra. Pero sobre todo lo que me hiciste a mí te lo voy a cobrar y con creces-Lo que pasó no fue culpa mía, fue una farsa “¡No me toques! ¡Félix déjame soy la novia de tu primo déjame! – dijo ella y se le salieron las lágrimas-Me avergüenzas – dijo el hombre mientras mira con asco a la joven – las mentiras no te van a proteger- ¡Me estás asustando! ¡basta, deja de recriminarme algo que no hice!Roger la tomó de las manos y la hizo levantarse con cuidado.-No puedes decir todo eso enserio – mientras hipea-Sí, lo digo enserio. Pero no me gusta ver a llorar a una mujer, así sean lágrimas de cocodrilo – dijo el hombre acercándose-No ¿Qué tienes en mente? Roger…-Sí…pero te voy a
-¿Cómo se encuentra?-Amo Hansen, Miranda está en cuidados intensivos, hace apenas unos minutos salió de cirugía…-Pero ¿vivirá?-Amo Hansen…ella vivirá, después de esta cirugía pasaremos de forma inmediata a la quimioterapia…pero tengo que decirles algo- ¿Qué pasa? – diciendo ambos hermanos Hansen-Tuvimos que retirar el aparato reproductor de la jovenRobert queda en shock…-¿Es…es estéril?-Tristemente…pero era la única opción…la metástasis había hecho estragos…-Rob – tocando con cuidado el hombro de su hermano- ¿Cuánto será el costo del tratamiento?-No hace falta que ustedes cubran los gastosAmbos hermanos se miran y luego miran al médico…-Un donante anónimo pagó todo el tratamientoAmbos hermanos quedan en shock…para después sentir la mirada de piedra de Eduard y por la forma de este de mirarlos está molesto.-¿Qué hacen ustedes acá?-Tío…-Tío vine a ver a Miranda…- ¡¿Por qué no entiendes que esa joven es indigna?! ¡debe ser igual o peor que su descarriada hermana!-Tío…lo
-¿Eh?...Roger…-Creo que mi novia debería hablarme de modo más cariñoso – tomando la mano de la joven para besar su dorso – ¿y tu anillo?-Lo dejé en casa, el sector donde vivo no es muy seguro y no quiero que me lo roben – dijo ella sonrojándose de golpe-Bien – tomando su celular y empieza a hablar en suizo por él, cuando cuelga vuelve la vista hacia la joven – deberás hablar con quien atiende en la entrada del edificio- ¿Eh?-Claro para que saquen tus pocas cosas y las de tus hermanas, van a vivir en un mejor edificio…la novia de Roger Pedersen no puede vivir en una pocilgaEl sonrojo de la joven aumenta.-Así que también llama a tu otra hermana, Isaac pasará por ella para llevarla a su nuevo hogar…-No…no hace falta-Claro que hace falta – frunciendo el ceño – ¿crees que dejaré que mi futura familia viva en la miseria? Que ustedes hayan decidido vivir como miserables no es mi problema, pero desde que firmamos este contrato ustedes pasaron a ser mi responsabilidad-De acuerdo…¿pued
-Por favor, senior Hansen…joven Hansen, pasen ¿Quieren algo de beber?-Una taza de té está bien…-Le agradecemos su hospitalidad, Señorita Davies…-Pasen – dando una sonrisa….Miranda abre sus bellos ojos grises cuando se topa con una mirada dorada que la observa con la mayor de las devociones – ¿Qué haces acá?-Miranda, vine a verte- ¿Te escapaste de tu tío verdad?Robert no responde…-Hasta para ver a esta pobre joven agonizante tienes que escabullirte – girando su rostro – vete…-Miranda…-Vete…no quiero verte, me dejaste cuando más necesitaba de tu apoyo…preferiste obedecer a tu tío-De verdad no quise…Miranda… -Además ¿ya para qué quieres estar conmigo? Si como mujer ya no sirvo- ¿De qué hablas? – mirando a la joven con preocupación-Ya sé que tuvieron que quitarme mi útero…el cáncer hizo estragos, soy estéril, tu tío que es tan recto y ejemplar no aceptará a una joven que no podrá dar descendencia-Miranda…- ¡Vete! ¡cuando necesité de ti nunca estuviste! ¡no te necesito ahor