—Lo siento Spencer, la verdad me siento bastante confundida, me duele la cabeza, no logro recordar, no puedo recordar ni siquiera quién soy mucho menos recordarte a ti, o una relación extramarital. —Lo sé, lo sé, sé que en estos momentos no puedes recordar nada, pero todo irá mejorando, verás como los recuerdos vuelven, pero deberíamos seguir con nuestro plan de huir.—No, no puedo ir, no así, no ahora, no en este momento no cuando no recuerdo nada, Spencer.—¿Es que acaso no confías en mí, mi amor?—Yo... yo la verdad no sé en qué confiar, en quién confiar o qué creer, ni siquiera puedo recordar mi nombre, ¿ cómo voy a recordar todo lo que he vivido, cómo voy a tomar la decisión de que creer Y a quién creer.?—Grace, mi hermano oculta secretos muy peligrosos, secretos que generaron en ustedes una pelea casi irremediable, de hecho cuando le hiciste el reclamo mi hermano se atrevió a golpearte.—¿Qué dices?, ¿ Izan me golpea?— lo miró aterrorizada. —No, no lo hace, bueno solo lo hizo
—Me dijo que estaría en su despacho.—Sí, pero mi hermano no te deja mucho tiempo sin supervisión— siguió con sus mentiras— así que no demorará en venir a ver, pero escúchame algo, debemos ponernos de acuerdo para vernos mi amor, te necesito— le dijo mientras la abrazaba— necesito de nuevo el calor de tu cuerpo, necesito que me lames de nuevo Grace, necesito sentirme seguro a tu lado, como solo tu sabes hacerme sentir, necesito saber que sigues amándome y que nuestros planes de estar juntos siguen en pie. —Es que, ¿cómo pueden seguir en pie unos planes que ni siquiera recuerdo?—Pero lo recordarás, amor, lo recordarás solo necesitas un poco de tiempo y no tengo apuros, puedo esperar, puedo esperar a que tú misma descubras la clase de hombre que es Izan— se alejó de ella un poco pero enmarcó su cara con su con ambas manos y mirandola directamente a los ojos le dijo— te amo Grace, te amo y no pienso perderte— y sin más se inclinó sobre ella apropiándose de su boca robándole un beso , l
Grace depositó un beso en la frente de Dylan y lo colocó con cuidado en la cuna. —No se preocupe, señora, le aseguro que el bebé estará bien— le aseguró la niñera, y la enfermera sentada al otro lado de la habitación asintió, ella le sonrió a ambas. —Muchas gracias— después de verlo dormir por algunos minutos, se fue directamente a la habitación, tomó una larga ducha y se fue a la cama, Izan después de la cena, le dijo que tendría que hacer algunas llamadas de trabajo, por algunos minutos se quedó mirando el techo de la habitación, intentando procesar todo lo que conocía hasta el momento de su vida. —Hola...— la saludó Izan entrando en la habitación. —Hola, estaba por dormirme, pensé que demorarias más. —Ha sido un día pesado, tenía algunos asuntos pendientes. —¿De trabajo?— le preguntó recordando las palabras de Spencer, él le había asegurado que Izan tenía una amante. —Claro— le sonrió— tenía algunos problemas con un crucero, pero lo solucioné. Además compré una
Grace, sentía como el calor se expandía en todo su cuerpo, no entendía porqué aquella reacción de su ser, pero ansiaba con desesperación la cercanía de Izan. Él se inclinó sobre ella y la cubrió con su cuerpo mientras profundizaba el beso, ansiaba unirse a ella pero tampoco quería acelerar las cosas Grace, quería disfrutar de tenerla allí colisionando contra su cuerpo, pero ella no era la esposa de siempre, había perdido la memoria, ni siquiera lo recordaba y aunque era evidente que su cuerpo lo reconocía, no quería sentir luego que se estaba aprovechando de ella.... después de una larga jornada de besos y caricias en donde Grace se permitió acariciar el cuerpo de su esposo, así como él recrearse en las curvas de su esposa sintió como su erección se volvía dolorosa y reconoció que había llegado el momento de detenerse, porque sufriría dolorosas consecuencias, cortó el beso alejándose de ella. —Cariño...— le dijo con ternura mientras acariciaba su rostro— me muero por hacerte el am
Grace abrió los ojos lentamente acostumbrándose a la tenue luz que se colaba en la habitación, parpadeó para luego encontrarse con que Izan la miraba fijamente con una sonrisa dibujada en los labios. — Buenos días— lo saludó ella. —Buen día, hermosa— le respondió sonriendo—¿ cómo es posible que amanezcas siempre tan guapa?, debería ser ilegal— le regaló una gran sonrisa. —¿Quiere decir eso que acostumbras a vigilarme mientras duermo?— le preguntó con una sonrisa confundida. —Es un gusto que no siempre puedo darme, pero que cuando puedo hacerlo no desaprovecho la oportunidad, me encanta verte dormir. —Lo tomaré como un halago. —Lo es, no podría ser menos que eso, esposa mía. —Tomemos una ducha y dispongámonos para iniciar el día, hoy tengo unos asuntos que atender con Noah. —No te preocupes, no saldré de casa. Mucho tiempo más tarde después del desayuno, Noah e Izan se habían marchado, Spencer no parecía dar señales de vida y aquello tranquilizaba a Grace, cierta
—¿Qué?, ¿ lo dices en serio? —No me atrevería a jugar con algo como eso, Grace, padre estaba furioso de que hubieses arrastrado nuestro apellido, según sus propias palabras había te habías encargado de enlodar nuestro buen nombre, te echó a la calle sin piedad y he de decir que aunque sentí pena no hice mayor cosa por ayudarte y lo siento mucho pero, creo que de no haber sido así las cosas no se hubiesen dado como hasta ahora... terminaste buscando ayuda en Izan y él te apoyó por mucho tiempo, en vista de que ya no estabas disponible para casarte con Noah, Izan le exigió a padre que yo debería tomar tu lugar y aquello me hizo sentir muy triste porque aunque no lo recuerdas yo tenía un prometido en ese entonces; Ian, él había sido lo único real que yo tenía en mi vida y realmente estaba enamorada de él, por eso casarme con Noah era una tortura para mí y el día de la boda fue un desastre, mi ex prometido llegó y expuso que nuestro matrimonio era una farsa total y que solo me estaba ca
—Bienvenido León — lo saluda Izan caminando hacia su amigo que llegaba, para luego estrecharle la mano, Noah contempló aquella imagen permitiéndose ver por segunda vez en su vida al legendario León ruso; aquel hombre del que todos hablaban para bien o para mal, si hablábamos del mundo legal Nikolay Kozlov, era un hombre muy importante en los negocios a nivel nacional dentro de su querida Rusia e internacional a través de todo el mundo se decía que era implacable en los negocios con un fuerte sentido para los negocios, no en vano había amasado una enorme fortuna legal, conocido dentro del mundo ilegal como el gran León ruso, decían que era un hombre fuerte, despiadado, implacable y que no ofrecía segundas oportunidades. Noah, lo observó y se sintió un poco intimidado, el ruso era un hombre grande, muy alto y con un aura imponente y oscura. —Aquí me tienes, lobo americano— sonrío estrechando la mano de Izan— es bueno verte en persona después de tanto tiempo. —Lo mismo digo. ¿Rec
Si todo lo que Spencer le había dicho era cierto, si ellos habían sido amantes, quizás, sólo quizás, aquella fuese una oportunidad de oro para dejar atrás una vida de adulterio... sin embargo, si todo aquello era cierto, solo confirmaba también todo lo malo que él le había dicho de Izan y aquello... realmente le entristecía, porque quería creer que tenía un buen matrimonio. —Spencer...— pero él no esperó, se lanzó contra su boca, Grace se vio prisionera de aquella boca que la reclamaba, Spencer presionó todo su gran cuerpo contra ella arrancándole el aliento, no sabía como responder a aquel beso, y se sentia aun peor alli de pie, con las manos a los lados incapaz de sentir algo a traves de aquel beso. Spencer se alejó y la miró con ojos llenos de dolor. —Siento que ya no me amas, tú... ni siquiera respondes a mi beso y... ¿Qué pasa mi amor? —Estoy confundida — dijo con frustración, sintiendo las lágrimas bailar en sus ojos, era realmente desesperante no entender nada de su vi