Esto no puede estar pasando, por favor dios ayudame

Mi corazón se aceleraba mientras corría, dejé escapar un grito de pánico cuando escuché que se abrían varias puertas del auto.

Me quité los tacones cuando comencé a correr, doblé por un callejón y clavé los pies en las afiladas rocas de la grava.

Los bordes de la piedra me cortaron los pies y la cabeza me martilleó de ansiedad y terror.

Escuché sus pasos corriendo detrás, mi corazón latía a través de mi pecho mientras corría.

Eché un vistazo y vi a cuatro hombres detrás de mí. Doblé una esquina y maldije en voz baja cuando llegué a un callejón sin salida, una valla metálica me bloquearon la entrada.

La mayoría de las chicas se rendirían, se acurrucarían y llorarían mientras estos hombres hacen Dios sabe qué, pero yo no soy la mayoría de las chicas. Hace tiempo en Italia entrene artes marciales, aprendi a soportar dolor y pensar rápido para salir victoriosa de mis oponentes, no soy una experta pero algo se me debe haber quedado y era hora de ponerlo en práctica.

La adrenalina me atravesó mientras corría hacia la cerca y clavé los pies en los cables, contuve un grito cuando sentí que el metal  me cortaba el pie. Me mordí la lengua y me levanté sobre la enorme valla, me dolían los brazos mientras trepaba.

Miré detrás de mí y los vi doblando la esquina. Escuché gritar a uno de los hombres y su acento casí me hace caer de culo.

Hablan italiano... ese porte... santo dios, son de la mafia... estoy jodida

Me tragué el miedo mientras saltaba desde la parte superior de la cerca.

Golpeé el suelo con fuerza. Sentí que mis rodillas cedían al absorber el impacto y me caí al suelo. Un dolor punzante me inundó mientras las lágrimas caían por mi rostro, me dolían las piernas y sentí como si hubiera caído sobre mil cuchillos. Las rocas afiladas de la grava me cortaron la carne mientras la sangre corría por mis rodillas.

Me tragué las lágrimas mientras me empujaba del suelo a tiempo para observar que los hombres corrían hacia la cerca. Cojeé y grité cuando sentí un dolor insoportable fluyendo por mi cuerpo.

Jadeé en busca de aire mientras corría, cada paso sentía que una parte de mí se rompía, nuevas lágrimas fluían por mi rostro mientras corría, mi pierna derecha me dolía cuando llegué al final de la pared y me volví para ver luces cegadoras.

¡Había un coche! Podria ayudarme, dios esta buenas conmigo.

-¡Ayuda!- Grité cuando vi a alguien salir del auto.

Era un hombre, frunció el ceño al verme correr hacia él.

-¡P-por favor! Hay unos hombres tras de mi y.. y están tratando de...- rompí a sollozar mientras corría hacia él.

Corrí detrás de él mientras sostenía mis hombros

-Cariño, ¿estás bien? ¿Qué está pasando? ¿Estás herida?

Lágrimas calientes inundaron mi rostro, mientras señalaba las cuatro figuras que emergieron de la oscuridad

-Están tratando de atraparme

Me empujó detrás de él mientras miraba a los hombres que se acercaban.

Bang

Sentí que algo me rocio la cara cuando el hombre frente a mí cayó al suelo.

Me congelé. Ellos lo mataron. Los hombres se acercaron a mí y el que disparó al tipo deslizó su arma en la chaqueta de su traje. La sangre del hombre muerto se roció sobre mí mientras estaba allí, las lágrimas caían por mi rostro mientras estaba en estado de shock.

-Shhh. Está bien- Uno de ellos me arrulló.

Negué con la cabeza cuando se acercó, mi cuerpo temblaba mientras trataba de dar otro paso atrás. Extendió la mano y me agarró, sus manos agarraron mi muñeca mientras trataba de alejarme.

Traté de dejar escapar un grito, pero me tapó la boca con una mano enguantada. Me tomó con un agarre de acero y dejé que mis lágrimas calientes cayeran libremente.

La comprensión de lo que estaba pasando me atravesó mientras luchaba.

Me dio la vuelta, mi espalda estaba presionada contra él mientras me sostenía en su lugar, su mano enguantada todavía firme alrededor de mi boca. Sentí su mano libre meter mi cabello detrás de mi oreja.

-Shhh, se terminará pronto...

Mis ojos se abrieron, pero antes de que pudiera procesar nada, un paño blanco me presionó la nariz y la boca. Dejé escapar un grito ahogado mientras luchaba, me dejé flotar, pero en lugar de caer, sentí que alguien agarraba mi cuerpo y me sostenía mientras me agitaba. Contuve la respiración, pero sentí que los químicos de la tela inundaban mis sentidos.

Mis piernas patearon y agité los brazos, pero en el segundo que inhalé, sentí que disminuía la velocidad. El dolor se desvaneció, el escozor de los cortes en mi pierna se volvió insensible.

XXX

Cuando se sufre la pérdida de la vista, se mejoran otros sentidos.

Todo lo que vi cuando desperté fue oscuridad, lo que me hizo temer lo que vendría después. Abrí los ojos para encontrar la bruma que llenaba mis ojos y mi mente ardía.  Sentí algo cubriéndome los ojos y me di cuenta de lo que sucedia. Me secuestraron, por mi culpa un inocente murio y ahora vuelvo estar en contacto con la mafia de la que quise huir. La ansiedad se apoderó de mi mente mientras tiraba de mis muñecas, algo se apretó sobre ellas y gemí.

Estoy atada.

Me congelé cuando escuché voces.

Hubo varios pasos y me quedé perfectamente quieta mientras hablaban.

- Ella se resistio, fue entretenido pero la perra esta buenisima, vale la pena 

Están hablando de mí. ¿Qué quieren decir con "vale la pena"? Me mantienen con vida, pero ¿por qué razón? Veamos, son unos matones de la mafia italiana que recogen mujeres al azar en la calle y no temen nada, ellos son la ley y si no les gusta algo, la mano no les tiembla para matar lo que sea que se les atraviese.

Contuve un grito mientras me concentraba en escuchar.

-Límpiala y que se ponga hermosa para la subasta, llevala con las demas chicas

Ay Dios mío. Dejé escapar un grito involuntario y me congelé cuando dejaron de hablar.

-La perrita ya despertó, esto será entretenido

Sentí que alguien se acercaba a mí y lloriqueé cuando me arrancaron la venda de los ojos.

Entrecerré los ojos cuando mis ojos se adaptaron a la habitación, tres hombres estaban frente a mí. Respiré profundamente y me apreté contra la pared detrás de mí. Eran hombres macizos, sus rostros ocultos en las sombras de la habitación de piedra.

-Cariño, ¿cuál es tu nombre?- Preguntó el hombre más cercano a mí mientras se arrodillaba ante mí.

Me estremecí ante su acento, era fuerte parecia que venía de Sicilia, su rostro era severo y su piel morena delataba que era alguien del sur de Italia posiblemente si era de Sicilia.

Estoy en la mafia italiana y ellos eran peligrosos sin importar lo que dijeran o el encanto que trataran de mostrar.

Mataron a un hombre que intentaba ayudarme, sin preguntas, sin vacilación, solo lo hicieron como si fuera un insecto. Si no me mataban posiblemente moriria por un paro cardiaco o por lo que sea que tuvieran planeado para mi.

Debo jugar bien e intentar huir

AL menos tratar de no morir en el intento