POV HEELAL
— Me agrada la vida que tengo Lisa, y no necesito enamorarme de alguien, casarme, procrear y todo eso. – Le digo mientras cenamos algo y ella quiso darme una lectura de cartas, le había dicho que no pero insistió. — Pues - Lisa hace una mueca. — Ya encontraste tu destino desde hace un año atrás y ha estado cerca de ti pero no te has dado cuenta, bueno creo que sí pero no logras identificarlo o verlo porque. – me da un golpe en medio de la frente con su dedo de en medio. — eres un ogro y no crees en el amor, pero créeme ella si que te ha movido el tapete, las cartas lo dicen. ¡Oh carajo! Entonces la voy a ignorar y voy a correr. – la cara enfadada de Lisa me sacó una carcajada. — Bien, hay que llegar al trabajo ya es tarde. —Eres un pesado Heelal. – Ella recoge sus cartas y las deja aun lado. — Sabes que cuando decidí ser tu tutora y quién cuidaría de ti no esperaba que de adulto fueses tan amargado. — Acaso de haber sabido, me hubieses dejado con esas escorias – me llevo la mano al pecho en son de burla. — Sabes que jamás hubiese hecho eso, aunque fue toda una lucha, me alegro que estés conmigo – me da una sonrisa con dejo de tristeza. A decir verdad pude tener un buen futuro gracias a ella, que luchó por mi custodia, apenas tenía ella 18 años y yo 9 aunque al principio estuve en una casa de adopción, pero gracias a su amiga la dueña de la empresa donde trabajo, ganó el caso y mi custodia. Ahora que recuerdo Lisa me había dicho que fuera amable y me hiciera amigo de la hija de Agatha, pero ni siquiera me la he topado ni cocido y para ser yo amable con alguien debo conocerlo demasiado bien. Me dirijo a lado de Lisa para la junta del trabajo, yo me quedo en la pared de atrás de la sala y ella va hacia enfrente. Una chica de cabello rizado castaño rojizo está ocupada poniendo la presentación, no logro ver su rostro, pero algo me dice que ya la he visto en algún lugar, comienza a hablar, pero sigo sin ver su rostro entonces es cuando la escucho decir su nombre y alza su rostro: — mucho gusto mi nombre es Eileen Roux Ingeniera a cargo de diseño del producto. – si, es ella la conozco la chica que ayudé en las carreras, la misma que se sentó sobre mi y luego ¡diablos! La sensación que me provocó en ese momento ¡Carajo! Solo es un deseo carnal Heelal. Es cuando me doy cuenta que es la hija de Agatha, tan imponente como su madre. Lisa me hace una señal con su mano y a lo que pude entender me decía que era ella, solo hice una mueca y puse los ojos en blanco lo cual le enfadó. Terminando la junta Eileen me pidió que me quedara para arreglar unos problemas del área, y yo tenía cierta curiosidad de ver cómo reaccionaba por aquella demostración de baile. — Dime, que es lo que pasa — Ocupo que me ayudes con el sistema de una de las máquinas de impresión ya que unos operadores quisieron arreglarla y lo que hicieron fue borrarle todo el programa, y así queda inservible, no sé si tengas un respaldo. – su gesto de preocupación, pero a la vez supiera que hacer me parecía bueno, pero no sacó nada del tema y entiendo, porque es trabajo. Llegamos a la máquina, pero no ve que hay un charco de tinta y se resbala, a lo cual pude alcanzarla y sostenerla entonces me regresa a la memoria el ver que la reconozco de hace poco más de un año, eso creo. Eileen en la cama del hospital en recuperación dos días sin despertar, recuerdo estar haciendo mi residencia en el hospital obviamente me tocaba arreglar el sistema de las computadoras y checar algunas otras cosas, pero ahí estaba tan débil con enormes ojeras alrededor de sus ojos y su piel muy pálida por la pérdida de sangre, tenía sus brazos vendados y una enorme marca en el cuello , recuerdo que enfermera a cargo de ella me dijo que la conocía y nunca se imaginó que tuviera problemas de depresión que siempre había sido una chica muy alegre y responsable, que nunca pasó por su cabeza que ella intentara quitarse la vida de esa forma, entonces me dijo como lo hizo y me asombré a decir verdad me dio tanta lastima, Ana la enfermera también me dijo que fue un milagro ya que es para que hubiese muerto que no había forma alguna de que hubiese sobrevivido y que todavía no era su tiempo al parecer. Los siguientes días a eso ella despertó y escuchar sus palabras entre arrebato con los enfermeros y su madre llorando, diciendo que se calmara, que no dijera que quería morir, ver como la sedaban y volvía a dormir, a lo ultimo que supe es que la iban a llevar al psiquiátrico dos meses para rehabilitación y saber que fue lo que la motivó a hacerlo ya que no lo quería decir. Un mes después me llamaron del lugar donde estaba Eileen, pensé que era ahí porque es el único que hay en la ciudad. Por lo que me dijeron tenía que arreglar el sistema de unas cámaras ya que algunas no se veían y descargarles un programa a todas la computadoras. Al tercer día de estar ahí ya que me habían encargado más cosas, me tocó estar en el consultorio de una psicóloga dentro del área donde estaban los pacientes, estábamos checando que la señal diera hasta el ipad que traía y no se fuera, ya que les habían dado un programa que les escribía en un documento todo lo que se hablaba con el paciente al mismo tiempo y se agregaban notas para su evaluación. De repente un manojo de rizos rojos apareció por la puerta con enormes ojeras en los ojos ya hinchados. La doctora le preguntó que si le incomodaba que yo estuviera ahí y le dijo que no importaba. Su voz sonaba tan vacía. Al parecer venía tan medicada, su mirada estaba perdida como si no hubiese alma en ese pequeño cuerpo. Empezaron la sesión y por lo que entendí ella había tenido un colapso nervioso, a causa de un trauma de pequeña que tenía que ver con su padre y su madre. Yo solo pude apretar los labios y tragar saliva, ya que contó mucho más. De repente alzó la mirada hacia mi y me dio una pequeña sonrisa apretando sus labios y luego miro de nuevo el suelo. La doctora me comentó que tenía que firmar un papel de confidencialidad, ya que había estado en la terapia de Eileen, con tristeza en sus ojos me dijo que ella era muy buena, que de hecho demasiado y el mundo no la merecía. Le pregunté si de pura casualidad podría venir a visitarla y me dijo que no, solo familiares. Después de eso solo me dediqué a mirarla de lejos, o por las cámaras, pero solo fue una semana. Porque mi trabajo ahí se había acabado. Y la veo ahora aquí, más viva que nunca.POV EILEENDespués de comentarle a Heelal lo sucedido, nos dirigimos a ver la máquina a reparar.Por ir tan a prisa ya que tenemos la producción del libro encima no pude ver un charco de tinta que salía de esta, y he aquí de nuevo, resbalo y Heelal me atrapa en sus brazos, a lo cual me pone de pie rápidamente y con una voz muy seca me dice: — Puedes procurar en tener más cuidado, pareciera que quieres morir todo el tiempo.Mi cara de desconcierto, y a la vez de vergüenza hizo que me girara y me pusiera en marcha hacia la oficina.En realidad ¿así parecía? Yo salí de ese lugar oscuro hace ya un tiempo y juré no volverme a hacer daño.Una lagrima cae sobre mi mejilla. Una silueta pasa enfrente de mi oficina la cual claramente pude distinguir y es la de Heelal, pudo ver que se dirige a su oficina, en cambio Ares toca y le digo que pase.— ¿Estás bien? Eileen. - en sus ojos hay algo de preocupación, pero también hay una sonrisa juguetona en sus labios.— Le sonrío y asiento, mientras abro
— Buenas tardes princesita. - la voz de Nix inunda mis oídos, mientras que mis parpados dan una seria pelea para poder abrirse y mi boca solo emite un quejido. — Anda vamos, hoy invitaré el almuerzo. - al mismo tiempo me lanza una almohada y entonces se da cuenta que fue un grave error, una mirada de odio cruza por mi rostro lo cual nota y sale corriendo hacia el closet, pero yo en cambio al tratar de levantarme enredé mis piernas en la cobija y caí al suelo.— ¡Auch! - sale de mi boca mientras trato de apartarme las cobijas, Nix asoma su cabeza por la puerta del closet y comienza a reír a lo que sale y se acerca a mí para levantarme, es el momento perfecto dijo mi mente, entonces lo hice, le apliqué a Nix una llave enredando mis piernas a su torso y mis brazos alrededor de su cabeza, con su mano hizo seña de rendición.— ¡Diablos, siempre caigo! - una sonrisa se dibuja en mis labios, y ella empieza a tomar bocanadas de aire. Las dos a los 16 años nos habíamos inscrito a Artes Marcial
El fin de semana llegó sin previo aviso, así que decido ir a caminar al parque que está dentro de la residencial, no es para nada pequeño, tiene muchas áreas verdes donde puedes traer picnic disfrutar de las estrellas por las noches y la tranquilidad que siente en el es lo que más disfruto, ya que a los vecinos al parecer no les gusta. Mis manos yacen en los bolsillos de sudadera deportiva que traigo puesta, ya que no me molestaría correr un rato. Después de darle unas cuantas vueltas al parque decido ir lento ya que mis pulmones arden. Bajo mis brazos para sostenerme de mis rodillas y quedo mirando al piso, cerca de mi hay una banca solo son unos pasitos que tendré que dar, pero necesito agarrar aire primero.— ¡Oh, vaya que acosadora me saliste! ¿Acaso llegaste corriendo tras de mí? - El dueño de esa voz tan fastidiosa no puede ser que esté aquí. Lo miro de reojo y me tiene puesto una mirada desafiante.— Parece que no puedo deshacerme de ti Heelal, ¿verdad? ¿Acaso me estás siguien
POV HeelalEl sol se oculta lentamente por el horizonte mientras camino por la solitaria calle hacia mi nueva casa. Las luces de los faroles iluminan el camino, pero mi mente no me deja en paz nombrando a Eileen y trae los recuerdos de estos días y los anterior a conocerla formalmente.Recuerdo claramente el momento en que la vi por segunda vez hace un poco menos de un año, en aquel sombrío psiquiátrico. Ella parecía tan frágil y vulnerable, luchando contra sus demonios internos. A la vez me pregunto como en tan poco se ha hecho fuerte y resiliente.Mientras me sigo enredando en los recuerdos, me he dado cuenta de que ya llegado a casa y en automático. Me dirijo a la habitación de Lisa a la cual encuentro sentada en su cama, con la mirada perdida al vacío, solo existiendo. Al tocar su puerta, levanta la vista y me mira con seriedad.- Heelal necesito hablar contigo. - sus labios formaron una línea.- ¿Qué pasa? Lisa, ¿otra vez te preocupas por mi interacción con Eileen? - frunzo el ce
El rugido de los motores llena el aire mientras me preparo para la emocionante carrera contra Heelal, nunca contesté que vendría así que quiero ver su estúpida cara cuando me vea en la línea y también la quiero ver cuando le gane. Las motocicletas brillan bajo el sol de esta hermosa tarde, justa para desafiar la velocidad y poner a prueba mi coraje.Me coloco el casco y subo a la motocicleta, sintiendo correr la adrenalina por mis venas. Por mi mente solo pasan las palabras hirientes de Heelal, la imagen de Lisa en su casa, su novia ahí y el coqueteando instantes antes conmigo, la actitud desafiante que siempre ha tenido conmigo. A pesar de ello y de que sé que no debo hablarle quiero respuestas.La multitud vitorea y los motores rugen aún más fuerte, y de pronto a un lado mío Heelal se une a la línea de partida. Su mirada lo ha dicho todo, está sorprendido de verme.- Vaya, pero que sorpresa. Pensé que era tu amiguito Ares el que iba a competir. - me da una sonrisa burlona. Lo único
El lunes llega y con el, la rutina laboral a excepción que Eros es el nuevo integrante de Recursos Humanos, mi madre lo había dejado trabajar, pero con la condición de que terminara la carrera, Eros por suerte había salido a los 17 años de la preparatoria así adelantando sus estudios por los cuales solo le hacían falta dos años para terminar. Mi madre por suerte nunca dejó que los gemelos tuvieran tanto tiempo libre así que los metía a cursos que les ayudaría en su vida profesional.Ares se acerca a saludarnos ya para entrar, a lo que pide hablar conmigo a solas, Eros y Nix sonríen cómplices.Ares me mira sonrojado, lo cual se ve tan tierno en él. - Quería preguntarte, bueno no. - hace ademán de negación con las manos. - Quiero preguntar si. - se rasca la parte trasera de la cabeza. - Quieres salir conmigo, es decir, una cita, salir a conocernos. - me da tanta ternura y mi cara roja es imposible de ocultar. Su mirada se levanta a lo que hace que voltee, y Heelal estaba parado unos poc
Me encuentro frente al espejo, ajustando mi vestido nerviosamente. A pesar de lo que ha pasado con Heelal, siento que es buena decisión salir con Ares, aunque me arriesgo a complicar aún más las cosas. La noche es cálida, y el cielo estrellado crea un ambiente algo romántico y no sé si lo veo así porque es una cita, o solo es lo que es. Hace unos 15 minutos Ares ya había llegado, pero el que quiere azul celeste que le cueste. Después de un rato más al ponerme maquillaje ligero pude bajar y ver a Ares jugando videojuegos con Aker, a lo cual carraspeé con la garganta y le hice seña con la cabeza a Ares que ya nos fuéramos. Ares emite un silbido al tomarme de la mano y darme una vuelta. - Pero que guapa te ves Eileen. - Gracias. - respondo. No puedo evitar sonrojarme. Me toma del brazo y nos subimos a su coche. El me había comentado que era una sorpresa y había hecho una reservación en un restaurante que tenía buena comida. - Bien, llegamos. - Sonrie de oreja a oreja. Trago saliva f
Ya han pasado cuatro meses desde que me salí de casa, renuncié a mi trabajo y me vine a vivir al departamento. Hace tres meses pude conseguir un empleo, el cual implica muchos viajes de negocios gracias a que sé varios idiomas. En cuanto a Heelal, Nix me comentó que seguía asistiendo a las carreras y que le insistió tres meses completos preguntándole cuál había sido la causa a lo que ella respondía que solo necesitaba tiempo que tenía muchos problemas, igual pedía mi dirección. Lamenté mucho no poder comunicarme con él, no contestarle los mensajes, pero me odiaría si supiera la verdad de todo, no querría estar conmigo.A mis hermanos solo los veía cuando llegaba de los viajes, salíamos a cenar y le llevaba souvenirs a cada uno. Aunque insistían en saber dónde vivo nunca les dije ya que se les podría escapar y decirle a Agatha. Y a Ares le comenté a Nix que no le dijera nada, ya que Agatha había sido por lo que imaginé quien preparó la cita, así tratando de manipularme como un títere.