El fruto prohibido
— ¿ Está hecho?

— Sí señor, cómo usted lo ordenó.

— Muy bien, gracias Rocco. Ahora encargáte de que todo permanezca en silencio...¿ entiendes lo que te digo?

— Por supuesto señor...

— Déjame solo. — Lorezo suspiró acomodando la cabeza en la almohada con una sonrisa complacida en los labios.

El sol se ponía en el horizonte, mientras Zafiro lloraba mirando fijamente al teléfono. Su nueva vida se desplomaba por completo y ella permanecía congelada en aquella cocina, incapaz de mover un músculo. Finalmente el teléfono sonó cuando la oscuridad empezaba a invadirla por completo , pero no era la llamada que estaba esperando.

— ¿ Amor, estás ahí? — preguntó la voz de Eduard desde el otro lado de la linea.

Zafiro permaneció en silencio. No podía imaginar nada peor que tener que fingir que todo iba bien y estaba decidida a terminar la llamada sin dar razones.

— ¿ Milena? — Reclamaba Eduard en tono confunso.

Zafiro colgó el teléfono con una lágrima rodando por su mejilla. Un
Sigue leyendo en Buenovela
Escanea el código para descargar la APP

Capítulos relacionados

Último capítulo

Escanea el código para leer en la APP