El vuelo tuvieron que cogerlo al día siguiente debido a que no quedaban para ese mismo día más pasajes.
Llegaron en torno al mediodía y el calor era insoportable.
Mientras Veronique iba en busca del equipaje, Christian llamó a Ferrara para avisarle de que acababa de llegar y no iba solo.
Tras media hora, la pareja iba en el coche de Ferrara rumbo a su casa.
-Verás que te alegrará haber venido con Christian- dijo el mayor.
Veronique miró algo contrariada a su novio quien también la miró a ella sonriéndole.
-Lo pasaréis bien, mi hijo conoce la ciudad muy bien y él puede haceros de guía turístico cuando gusteis en ir a algún sitio en concreto- continuó diciendo Ferrara.
Christian dejó de mirar a Veronique y se giró hacia el hombre.
-No sabía que tenía un hijo-
Ferrara se volvió a él.
-Sí, tengo un hijo, Elyan y...en la edad más complicada- repuso sonriendo.
-¿Quince años?- preguntó Christian.
-Diecisiete- respondió Ferrara cambiando de marcha.
-Bueno, diecisiete es casi un hombre- observó Christian.
-Tú lo has dicho- señaló Ferrara a su ex-alumno -Es casi un hombre- luego se echó a reír.
Veronique dirigió la mirada a su novio quien volteandose a verla solo dibujó una amplia sonrisa.
-Naaa, Elyan es muy maduro para su edad- alegó Ferrara -Me puedo sentir muy orgulloso de él. Oomm, comité de bienvenida- anunció mirando al frente.
Si a Veronique casi se le saltan los ojos de las órbitas, Christian se quedó boquiabierto.
Ante ellos apareció una enorme casa un tanto envejecida y de aspecto algo dejado.
Saliendo por la puerta vieron a una mujer mayor típicamente vestida como las antiguas mujeres del lugar además de otra bastante más joven y de ropas más actuales.
-Ellas son Rossana y Alycia- dijo Ferrara -Mi esposa es Alycia y Rossana es como de la familia-
La esposa de Ferrara, al ver aparecer el coche, sonrió y levantó la mano saludándolos.
-Buonasera-
Deteniendo el coche, Ferrara instó a la pareja:
-Vamos, tendréis hambre y también estaréis cansados, probablemente la comida esté casi lista-
Saliendo del vehículo, Christian y Veronique vieron como abrazó y besó a su esposa.
Christian notó un toquecito en uno de sus hombros por lo que se giró hacia atrás.
-¿¿Dónde demonios me has venido a traer??- increpó su novia.
-¿Qué...por qué dices eso?- se molestó él.
-¿¿Es que no ves la...casa??- señaló hacia la susodicha.
Christian regresó la vista a la casa para ladeando la cabeza objetar:
-No está tan mal-
-¿¿Que no está tan mal?? ¡Si parece que se vaya a derrumbar de un momento a otro!- reprochó ella.
-A ver, parece algo desvencijada pero estoy seguro que por dentro es todo lo contra...rio-
Una tercera persona asomó por la puerta.
Era un chico.
Alto.
De cabello castaño y rizado.
Por las vestimentas parecía que se dispusiera a ir a la playa o a algún lugar con agua pues tan solo llevaba un mini pantalón rojo por encima de la mitad del muslo y una amplia camiseta de tirantes blanca.
Desde el coche, Christian podía oírles hablar en italiano distinguiendo el nombre de Elyan.
Ese chico era el hijo de Ferrara.
-Lo que yo decía, por dentro no estaba tan mal- murmuró Christian sin dejar de mirar al chico.
Éste dirigió la vista hacia el coche logrando hacer contacto visual con él.
Fue un segundo.
Simple y rápido.
-Nada nada mal- siguió susurrando Christian.
-¿Qué dices? Pero si parece una granja abando...-
-¿Vas a callarte y comportarte?- cortó drásticamente Christian a su novia volviendose todo lo rápido que pudo a ella.
Veronique cerró la boca.
-Demasiado que Ferrara me ha ofrecido alojamiento gratis y un techo donde podamos quedarnos sin gastar ni un centavo- alegó él.
-Un hotel hubiera sido mejor- objetó Veronique.
-Bueno pues no se puede así que ten la poca vergüenza de ser amable y agradecida- apuntó Christian.
-¿No vais a salir del coche?- oyeron decir a Ferrara quien se había plantado al lado de la puerta del asiento del copiloto esperando a que Christian saliera.
Éste, rápidamente, abandonó el vehículo siendo Veronique la siguiente en hacerlo.
La esposa e hijo de su ex-profesor se acercaron hasta ellos hasta pararse al lado de Ferrara.
-Christian, Veronique, ella es Alycia y él mi hijo Elyan- presentó formalmente Ferrara a cada uno.
-Mi piace molto conoccerte- saludó ella.
Christian extendió una mano pero por sorpresa se vio abrazado por la mujer además de recibir dos sonoros besos.
Veronique evitó que la mujer le hiciera lo mismo dando un paso atrás.
-Alycia...ella es muy cariñosa- repuso Ferrara.
-Lo siento pero estoy acostumbrada y...disculpa si he sido muy lanzada Christian- se excusó ella.
Christian observaba a Elyan quien abriéndose paso entre sus padres sí que le extendió la mano.
-Encantatto- saludó el chico estrechando la mano de Christian.
-Ya me esperaba otro abrazo- bromeó.
-Elyan es más...tímido e influye que se haya criado en Estados Unidos- contestó Ferrara.
Soltando la mano del moreno, Elyan se la ofreció a Veronique quien amablemente la aceptó.
-Hola- saludó ella.
-Bueno, hechas las presentaciones ¿Por qué no vamos a comer?- repuso Ferrara -Luego Elyan y nosotros os acompañamos a vuestras habitaciones-
-¿Ha-habitaciones?- titubeó Veronique.
Elyan se tapó la boca escondiendo una risita aunque sin apartar los ojos del moreno, el cual, a su vez, también le miraba.
-De momento ésta noche tendréis que dormir separados- dijo Alycia -Elyan tiene dos camas que se pueden unir en su cuarto así que mañana os cambiamos a la suya-
-No, eso...no hace falta- negó Christian.
-No pasa nada- habló el chico llevándose las manos a la espalda -A mí no me molesta-
Veronique rodó los ojos disimuladamente.
En su interior se lamentaba del lugar a donde había ido a parar solo por querer pasar el verano con su novio.
-No lo veo bien eso de echarte de tu cuarto cuando yo solo vengo de paso- apuntó Christian.
Elyan no respondió.
Al menos no a él sino que dirigiéndose a sus padres anunció:
-Vado a nuotare per un po'. Ciao-
Procurando que Veronique no se diera cuenta, Christian no perdió de vista al chico mientras éste dando un beso a cada uno de sus padres le obsequió con una última mirada.
-Ciao- se despidió de la pareja pero con sus ojos fijos en Christian.
-Ciao...bello- musitó éste viéndolo alejarse.
Veronique pudo oírle.
-¿Qué has dicho?- preguntó curiosa.
Rodando los ojos, Christian la miró.
-Adiós, en italiano- respondió.
-¿Solo adiós?-
-Me muero de hambre- evadió la pregunta de ella Christian.
Ferrara y su esposa se aguantaron una sonrisa.
-Obviamente, ven, acompáñame Chris- empujó afablemente el hombre a su ex-alumno por el hombro.
Alycia, acercándose a Veronique le mostró el camino para que la siguiera diciendo:
-¿Vienes?-
Veronique, aunque a regañadientes, acompañó a la mujer.
Guiados por Elyan y su madre escaleras arriba, la pareja subía detrás de ellos.Christian, ascendiendo tras el chico, no dejaba de recorrerle de arriba abajo prestando especial atención en su retaguardia, la cual se marcaba bajo la tela húmeda del short además de transparentarse sus nalgas gracias al color de dicha tela.Blanco.Christian era consciente de que Elyan era menor pero no consideraba, en absoluto, recrearse en la figura del chico y por algún motivo se le antojaba muy…Curvea.-¿Alguna vez habéis estado aquí?-La voz de Alycia hizo perder la concentración en el trasero de Elyan en Christian quien agitando la cabeza y ganandose una mirada de reproche por parte de Veronique, la cual se había dado perfecta cuenta de hacia donde miraba, habló a la mujer:-No, nunca-Alycia giró la cabeza hacia él para dedicarle una sonrisa.-Es un lugar bonito, máxime si vienes con tu pareja para pasar un verano de ensueño- dijo
-Si lo llego a saber no hubiera venido-Christian dejó de comer al oír las palabras que Veronique le susurró al oído.Agradeció que tanto Ferrara como su esposa no les prestaban atención.Cada cual con su móvil colgado en la oreja parecían tener una conversación bastante seria con quien fuera que les había llamado.Elyan no había aparecido después de llevarle a él al dormitorio que provisionalmente sería donde dormiría.Luego, antes de cenar, sí que lo vio totalmente acicalado y oliendo a lavanda dirigirse a su madre para decirle que no iba a cenar en casa pues había quedado con un tal Enzo.-Santa Madonna, uff, esto de tener una hermana casada con un hermano de tu marido...jooo- Alycia acababa de colgar y dejó el móvil a un lado de su plato.Ferrara, al igual que ella, la mir
Como si se hubiera bebido dos botellas de whisky.Así se despertó Christian.Propinando una patada a la ropa de cama, quedó en calzoncillos sobre ésta.No sabía ni la hora que era pero supuso que tarde pues el sol entraba a raudales por la ventana.Escuchó abrirse la puerta tras dos golpecitos en ella.Ni se molestó en mirar a ver quién era y menos mal porque la mirada que le echó Elyan podría haberlo fulminado en polvo.-Buongiorno cabronazo- saludó.-Mmm, qué humor- rió entre dientes el moreno.-¿Qué pretendías anoche tirando una piedra a Enzo y a mí?- inquirió Elyan cruzado de brazos y apoyado en la puerta.-Se me escapó, no era mi intención- dijo Christian.-Ya- asintió el chico.Metiendo una mano en uno de sus bolsillos del mini s
Oía pero no escuchaba muy bien lo que Ricarddo le decía sobre su opinión acerca de su presentación.Christian prefería observar por la ventana de la sala a Elyan tendido al borde de la piscina tomando el sol.Ahora ya conocía el sabor de sus labios y lo tiernos y redondos que tenía sus glúteos.Le vio darse la vuelta para mostrarle esas pompas que sus manos habían tocado apenas una hora antes.Se recreaba todo lo que podía en él y su cuerpo, soñando despierto lo que le gustaría hacerle por todo él.Y lo primero que le gustaría hacerle sería morderle en el...-¿Christian?-La voz de Ferrara le hizo volver de sus fantasías.-Sí, perdón, estoy un poco...ido- se disculpó.-No sé qué prisa tienes, acabas de llegar hace ni un día y ya
-¿Cariño, dónde...a dónde vas?-Alycia vio bajar a su hijo de dos en dos los escalones para aterrizar frente a ella.-Voy a salir- respondió Elyan sonriente y medio bailando.-Ummm, y ¿Solo o es posible que venga al...-El sonido de la campanita que pendía de la puerta principal hizo no solo a Alycia y Elyan mirar hacia ésta sino que Ricarddo junto con Christian y Veronique asomaron por la puerta del salón.Viendo que ninguno iba a abrir, Rossanna dejó lo que estaba haciendo y se dirigió hacia la puerta farfullando:-Sempre uguale. Se non vado io, non va nessuno-Abriendo la puerta se quedó a cuadros cuando vio a un joven de cara risueña y con ropa de calle.-Buonanotte, Elyan è qui?- preguntó el joven.-¿E chi sei tu?- quiso saber Rossanna.-Sono Enzo, un piacere signora Ferr
Por suerte se conocía el camino hasta la casa de Ferrara pero obviamente éste estaba bastante oscuro y el que Elyan no dejara de dar patadas y gritar empezaba a sacarle de quicio.Así que escogió ir a otro lugar donde no armara tanto jaleo por lo que tomó un estrecho camino que ignoraba a dónde llevaba.-Tampoco, si me pierdo con él siempre puedo comérmelo- habló en voz alta para que Elyan le oyera.Y pareció surtir efecto pues el chico cesó de patalear.Pronto llegaron a un lugar donde había una laguna rodeada de grandes árboles.Parándose junto al tronco de uno de los árboles, Christian se apeó al chico del hombro para depositarlo en el suelo.-Muy bien, hablemos peque...-Un fuerte puñetazo le impidió terminar la frase al moreno quien al no esperarlo se tambaleó.Ely
-Vaya, buongiornno- saludó su padre al ver aparecer a su hijo bajando por las escaleras.Elyan esbozó una sonrisa mientras se frotaba la cabeza.-Buenos días- respondió.-Aún llegas a tiempo para desayunar- repuso Ricarddo.Elyan volvió a sonreír y se encaminó hacia el patio.Al salir, a quien primero vio fue al moreno el cual cruzó la mirada con él.-En serio, no sé dónde te meterías anoche- decía Veronique.Alycia se la quedó mirando divertida.-Ma quello pasó?- preguntó.-¿Ehm?--Que por qué dices eso- tradujo Alycia.-Ésta mañana cuando cogí su ropa para bajarla a la cesta de la ropa sucia vi que tenía todas las rodilleras de los pantalones manchadas de verde- respondió Veronique.Christian y Elyan no ha
Oyó y vio la manivela de la puerta de la habitación moverse.Christian, sentado en mitad de la cama, levantó la vista del borrador que muy amablemente Ferrara le había hecho sobre la presentación que él había escrito y que en ese momento pasaba a limpio, para ver entrar a Veronique con dos grandes bolsones.-¿Más ropa?- se molestó él.-Ay, solo se puede hacer eso aquí- resopló ella cerrando con el talón y caminando hacia la mesa donde soltó las bolsas.-Nada- repuso Christian contrariado.-Eso hay, nada- resolló Veronique.-Digo que nades en la piscina, o ve a dar un paseo y ve la naturaleza, o toma el sol, no sé, Elyan hace muchas cosas y no está cada dos por tres llenándoles a sus padres de bolsas y bolsas de...ropa-Veronique se apoyó en la mesa con una mano para colocarse la otra en la cintura.-Le pones mucha atención a Elyan-Christian la miró por encima de sus gafas mientras sostenía el bolígrafo en u