15. "Un Árabe en un Quirófano" FARID ARAY Decido a verla, después de llegar esta misma tarde a la ciudad de Atlanta me arreglo pensando en ella. Aún recuerdo lo que le fascinaba verme ataviado con otra cosa que no fueran aquellos trajes de diseñador que en ocasiones llegaba a odiar. Pasadas las Diez de la noche me dispongo a ir al hospital en el que estoy seguro que Camil De La Fuente está de guardia. La pierna aún me dolía un poco, pero me había quitado la tablilla que la inmovilizaba, pues la comezón era realmente insoportable. El detective que contrate al parecer es un poco lento, pues en estos días de espera, hoy al fin se reunió conmigo al llegar. De hecho fue lo primero que hice… ir q si encuentro tan pronto desembarque en el aeródromo privado del areopuerto regional. Ese hombre me entregó casualmente la rotación de guardias de los cirujanos de este mes. Además me facilito los estados de cuenta de los bancos en Atlanta a nombre de Camil De La Fuente, me extrañó ver
16."Caballeros sin memoria".CAMIL DE LA FUENTE—Como le expliqué a la señorita enfermera, Marta… Si tú me suturaste la cabeza, lo más lógico es que tú también me saques los puntos de la sutura. ¿No te parece Camil?—me abordó tranquilo como si fuéramos solo médico y paciente. —No es gracioso que estés aquí Farid. Estoy trabajando y eso pudo haberlo hecho cualquier médico…—No conozco a ningún otro médico, incluso me parece raro que tú lo seas— comentó mientras me paraba justo frente a él—Aún no me acostumbro al hecho de que seas una súper heroina salvadora de vidas con un bisturí en una mano y una pinza en la otra. Además esa bata blanca te asienta más que aquellos atuendos de pasarela. —No soy una heroína…— murmuré acercándome a él para examinar el corte que estaba perfectamente sano. Los puntos de la sutura estaban listos para ser retirados sin ninguna complicación.—No pienso discutir eso contigo— replicó y lo vi callarse cuando mis manos tocaban su cabeza.Marta nos dejó solos
17."EL ALCANCE DE UN RAYO"FARID ARAYHay cosas que no cambian nunca y el tener a Camil temblando entre mis brazos, era una de ella. Por fuera siempre había sido como una serpiente venenosa, lista para atacarme, pero una vez que me hice inmune a su veneno y sobre todo adicto. Ahora nuestra historia se volvía a reiniciar de cero. Los impedimentos que veía antes ya no eran tan reales. A fin de cuentas, yo me había metido en la cabeza que no me podía enamorar de la hermana de mi único primo… pero por qué. A fin de cuentas todos siguieron con su vida, y fui yo el único que perdí tiempo valioso, porque aunque verdaderamente quise creer que si, no superé a Camil De La Fuente. Me mentí a mi mismo y le mentí a todos… porque hoy más que nunca Camil era la única mujer que veía junto a mi por más de una noche. —¿Que crees que estás haciendo Farid? — murmuró contra mi boca. Yo no quería que fuera así, sin que ella estuviera completamente de acuerdo, pero como había dicho antes, ella era exp
18. "Te me antojas"CAMIL DE LA FUENTESin saber cómo manejar el error que acababa de cometer, al permitir que Farid me besara, salí de la sala de cirugía menor dejando a Marta haciéndole compañía al árabe. De seguro mi mejor amiga se encargaría de echarlo del hospital, y de ser posible del país.Ese no era el modo de hacer las cosas, ¡por Dios! Yo no podía estar yendo por ahí besado al padre de mi hija, sin pensar que eso tendría consecuencias directas, si se llegara a desentrañar alguna vez la verdad. Si Farid no pensaba dejar Atlanta, yo tendría que tomar a mi hija y desaparecer hacia otro de los cincuenta estados, pero lejos de ese jeque, de su influencia sexual sobre mi y de esos besos que me robaban hasta las ganas de pensar.Farid podía ser muchas cosas, pero ninguna de ellas lo hacía fácil de evitar o de resistir.Y si… resistir era la palabra correcta…porque yo no podría evitarlo tanto tiempo o borrarlo aunque lo deseara con todas mis fuerzas. Farid era parte de m
19. "¿Una beba?FARID ARAYRealmente no había ido a aquel hospital con idea de besarla, solo quería verla, hacerme notar, pero una vez estando allí todo se desencadenó como una avalancha de nieve cayendo desde la cima de la montaña. Nunca conté con que nos quedáramos completamente solos, mientras que la tenía tan cerca. Las manos de ella sobre mi cabeza, aunque fuera por meros motivos médicos, fue más de lo que pude soportar. Camil era una cerilla capaz de prenderme desde una pequeña llama hasta convertirme en un incendio de grandes proporciones. En todos los años ninguna mujer me había hecho sentir tan hombre, con deseos tan violentos y desesperados por poseer. Después de regresar a casa prácticamente me tome una ducha de agua fría. Aún sentía a Camil en cada célula de mi cuerpo. Conciliar el sueño fue una tarea titánica. Cómo deshacerme de un fantasma... de un fantasma que tenía el provilegio de hacer despertar mis más feroces deseos sexuales. Desperté varias veces en med
20.“Un ángel de pelo negro”FARID ARAYTomé el expediente completo, pagué el total de los honorarios, y además dejé una jugosa propina. En mi actual estado mental no estaba pensando en nada más que en Camil, y en aquella bebé de la cual acababa de enterarse de su existencia.Bajé tan o más turbado que antes con aquella noticia, que evidentemente era lo ultimo que espere encontrarme. Me metí en el Ferrari que ilógicamente había rentado para impresionar Camil, y antes que nada revise aquellos documentos buscando la nota en que se encontraba la dirección de Camil. Estaba bastante lejos de la dirección en que me encontraba, pero bastante cerca del hospital. Tiré el expediente sobre el asiento del copiloto, y llevé las dos manos al volante tratando de sosegarme. Sin saber porque, no pude evitar sentirme traicionado. Un nudo se instauro en mi garganta, y si antes me sentía frustrado, ahora estaba desesperado por conocer la verdad sobre la verdadera causa de que Camil hubiese cambiado tan
21. "Mi sangre, un pedazo de mi"FARID ARAYLas vi alejarse por la acera, sin que Camil notara mi presencia, mientras los ojitos de la niña no dejaban de inspeccionarme de los pies a la cabeza. Aquella belleza de pelo negro era un pedacito de mi… era mi legado en este mundo.El alma se me estrujó al verla, así, observándome con aquella intensidad, como si me reconociera entre otros miles de hombres que había visto frente a ella en su corta vida. Algo había de diferente, ella lo sabía y yo también. Algo más fuerte que la hacía mantener sus hermosos ojitos verdes sobre mi, aunque su madre le estuviera hablando ella continuaba observándome por encima de su hombrito.«Mi hijita»«La vida después de todo no había sido tan mala conmigo» La mala había sido Camil. «Esa bruja ma había robado más que nadie en el mundo»El peso de la sangre no se disuelve solo por ocultar la verdad. Una mentira no borra el lazo inefable que me une a esa niña.Paso saliva emocionado hasta la médula, mientras o
22. “Conversaciones difíciles”FARID ARAYAterricé en Los Ángeles, cuatro horas después. Era demasiado tarde para tratar el tema que tenía pendiente con mi primo Liam. Así que solo bajé en la pista del areopuerto privado y fui directo a la mansión de mi tío en Bevery Hill…El mayordomo me recibió cerca de la media noche, y el resto de la familia dormía. Me fui a la habitación que sentía como mía en la casa de mi tío y exhausto me dejé caer en la cama tratando de buscar sosiego. Los descubrimientos recientes me mantenían con el alma pendiendo de un hilo. Así que no me quedaba más remedio que esperar a la mañana para darle la cara a quien quisiera escuchar la verdad. A penas logré pegar un ojo esa noche, casi que conté los minutos hasta el amanecer. Una pequeña carita decorada por dos gemas verdes esmeraldas me atormentaban, me apuñalaban el corazón cada vez que pensaba en ella, y en la falta que le había hecho durante todo este tiempo. Yo debí haber estado allí, sosteniendo la ma