Capítulo LXXXVIIIUna vez ,que ya se instalan en el.interior de la ciudad todo comienza nuevamente a cambiar, era un ciclo, donde hacía falta renovación, porbdejarse llevar por las apatias, .monotonía, falta de interés sobre todo por parte de Carlos. Pero ya habían dado un paso avanzado en pro de la relaciónDe pronto llega un día cualquiera y Mercedes siente que tocan puerta de manera grotesca y de muy mal gusto. En eso ella se aproxima ya predispuesta y allí se da cuenta que som dos personas totalmente desconocidas para ella, y sin mediar palabras ni hacer ninguna previa presentación lo primero que hacen es preguntar–¿ En donde está mi hija? – si mi hija no aparece ya los voy a denunciar de secuestro.Grita una mujer robusta en la puerta mientras la golpeaba con sus manos dando fuertes palmadas.– abran la puerta ya , porqué si no llamo a la policía. Quiero ver a mi niña.– Señora le agradezco y a mi casa no me venga a molestar o quién va a llamar a la policía voy a ser yo.– y
Capítulo LXXXIXAl pasar de los años y para poder mantener a sus 4 hijos Mercedes tuvo que iniciar en el mundo de la costura; ella realizaba confecciones, arreglaba uniformes y muchas cosas más. Además de eso también transcribia textos y tareas. Mercedes buscaba la manera de poder cuidar de sus hijos pero no se daba cuenta que con tantos problemas y esfuerzos su salud estaba empeorando poco a poco.Un día su hijo Eduardo se lo dijo:-Mamá, tienes que descansar, trabajas y trabajas, eso no te hace nada bien. Pasas noches sin dormir, bebiendo, sin comer. Necesitas tratar de llevar una vida más sana. -Si hijo, ya lo sé, me siento muy cansada. Pero ¿Cómo hago? Si soy yo la que tiene que cuidar de ustedes. Ustedes no eligieron nacer, yo los traje al mundo y es está mi responsabilidad. – dijo Mercedes -Mamá pero también está mi papá, ese hombre solo te da mala vida. Sal de él. – Dijo Eduardo con desesperación al ver que su mamá no parecía cambiar de idea -Tu papá ha sido mi com
Capítulo XCAsí como José continúo con su vida, así mismo lo hicieron los demás hermanos. En este caso, Soledad, la hembra mayor de los 5 hermanos. Ella decidió dedicarle su vida a Dios luego de haber pasado por tantos problemas. Ella quedó con heridas emocionales, las cuales la hacen sentir mal a veces, se suele sentir deprimida o triste en algunas situaciones de si vida. A veces hasta sin un motivo aparente. Sin embargo, a pasar de como se sienta por dentro, lo triste que este o lo mucho que solo quiera estar acostada en su cama, comiendo chocolates y viendo películas hasta dormir, sale a la calle con una sonrisa enorme que se le contagia a quienes la conocen. Ella creció siendo un sol, como las primeras tres letras de su nombre.Aunque era una de las más inteligentes desde chiquita no pudo culminar una carrera universitaria, sin embargo siempre busco la manera de superarse. Ella aprendió a coser al igual que su madre, y trabajaba con eso, también solia vender cosas y eso la ayu
Capítulo XCILuego de que ya todos los hermanos habían hecho sus vidas decidieron hacer un reencuentro familiar. Todo empezó porque Soledad se encontró con Martin y le comentó que tenían mucho tiempo sin verse y que los extrañaba a todos. Y mientras hablablan se les ocurrió hacer un reencuentro familiar. Diciembre ya había llegado y la cena del 24 era en apenas unos días así que planearon. - Tengo mucho tiempo sin ver a los muchachos, Martin. Me hacen mucha falta. Siempre me acuerdo de ellos y de las cosas buenas que solíamos hacer juntos – dice Soledad en un tono de voz afligido. - Te entiendo, Sol. – responde Martin mientras mira con cariño a su hermana mayor – Yo también los he extrañado a todos. - Y ya vienen las fechas especiales. - ¡Es cierto! – dice Martin emocionado. – El 24 es en unos días. Podemos ponernos de acuerdo para que hagamos la cena familiar todos juntos. Sería una maravilla después de tantos años. - ¿Tu crees que se pueda? – pregunto Soledad, entre emocionada
El 3 de Abril de 1.939 en Caracas, Venezuela nace Mercedes, una inocente criatura, hija de Don Elías y de alguna mujer cuyo nombre aún es un misterio, al igual que no se sabe mayores datos ni detalles de su vida, solamente se sabe que algún tiempo atrás tuvo un romance con un hombre de contextura delgada, de piel trigueña, pero muy elegante y caballeroso, que a pesar de sus principios y muy buenos modales, se había permitido echar una “cana al aire” con esta mujer de procedencia dudosa, engañando así a su esposa, Eva. Una mujer blanca, muy religiosa, católica, perfectamente elegante, siempre con prendas de oro dejando ver su buena posición económica, pero siempre con el mejor estilo, muy delicada y sin extravagancias. Demostrando en todo momento ser toda una dama. Pero cómo ya se vuelve un infortunio casi normal en la sociedad donde los hombres no valoran lo bueno de sus esposas que tienen en casa y luego terminan traicionándola con alguna mujer de bajos principios de la calle.De est
Mientras que debatían Don Elías y Eva, en ese preciso instante llega La señorita Carlota a la casa, ella era hermana de Don Elías, su única hermana, quien, por no tener a sus padres con vida, su hermano decide hace ya algún tiempo atrás compartir su vivienda con ella. Esta era una mujer de unos 45 años de edad, quien nunca había conocido lo que era el amor, pues se había dedicado a cuidar siempre de su hermano ya que era ella su única hermana y la hembra. Una mujer muy cautelosa, de muy poco hablar, con pocos estudios, pero era la mejor en los quehaceres del hogar, nadie lo hacía tan bien como ella. De nobles sentimientos y siempre apegada a las buenas costumbres. Al entrar ella a la casa se percata de la situación y de lo alterado que se encontraban tanto su hermano como Eva y les pregunta, quedando atónita al ver a esa bebé recién nacida en los brazos de su hermano. –¿Qué sucede Elías? ¿Por qué están llorando y están todos alterados? ¿quién es esa bebé tan linda? Respon
CAPITULO III De esta manera finalizo el primer día, están todos agotados tanto Doña Eva como Don Elías, y hasta la señorita Carlota, de tanto trajín ocasionado por el corre corre de un día inolvidable como ese. Ya llegada la noche se encontraban Don Elías y Eva en su habitación. Don Elías dice,– Eva, no tengo palabras para agradecerte todo lo que hiciste.– Elías, quiero que te quede muy claro algo, que, si te di otra oportunidad, fue más por esa criatura, que por ti. Los bebes, son seres inocentes y no tienen la culpa de los errores de sus padres.– Te amo y de aquí en adelante seremos más felices, ya lo veras. Le dice Don Elías en susurro mientras la abraza, ella le corresponde el abrazo y en ese instante sus lágrimas corrían por sus mejillas. Luego en la mañana siguiente al amanecer, se despierta Don Elías, sin hacer ruido, mira hacia su reloj despertador que está sobre la mesa de noche y ve la hora. 6:15 a.m. luego se dirige a la cocina para preparar el café con l
Capitulo IV Habiendo transcurrido algunos días, ya Don Elías un poco más estable emocionalmente comienza hacerle todos los preparativos para el bautizo, sale de su casa temprano y se dirige a la Catedral de Caracas para comenzar con los trámites, se aproxima a la oficina y le explica a la secretaría–Yo quisiera bautizar a mi hija, ella apenas tiene una semana de nacida. Y responde la secretaria. – Perfecto no hay ningún problema. Por favor suministreme los papeles de la niña. – ¿Papeles? Pregunta Don Elías extrañado. ¿Cuales papeles?–Si, el acta de nacimiento de la niña original y copia , y la fe de bautizo de sus padres. Dice la secretaria,. Pero no tarda en refutar Don Elías –Pero... Pero señorita mi bebita no tiene ningún tipo de papeles, quiero presentarla ante Dios primero y luego hacer lo demás. –Pues no caballero, ¿cómo podríamos bautizarla sin saber ni su nombre? Primero debe consignar la documentación solicitada y luego le pondremos fecha al bautizo con gusto. Respondi