Mauricio
Desnuda…
Completamente desnuda…
Así se encuentra la mujer que yace sobre la cama sin ningún tipo de pudor.
«¿Quién se iba a imaginar que una mujer con cara de ángel y sonrisa encantadora sería capaz de semejante bajeza?»
—¿Se puede saber qué carajo fue lo que pasó anoche? —interrogo con la sangre hirviendo en mis venas, girando sobre mis talones para posar mi mirada en sus ojos.
—Creo que la pregunta está de más… —se encoge de hombros—. ¿Acaso no es obvio lo que pasó anoche? —señala su cuerpo desnudo mientras sonríe con malicia y muerde su labio inferior—. Lo único malo fue que mientras me hacías el amor no dejabas de llamar a una tal Sabri
SabrinaLos días siguen pasando, trato de realizar mi trabajo con normalidad. Porque decir que es gratificante trabajar con la cabeza hecha un desastre es satisfactorio es una completa mentira.Después de recibir aquel paquete quedé totalmente devastada, no sé el motivo por el cual llamé a Rodrigo. No quería sentirme sola y hundirme en un mar de tristeza que no sería bueno para mí y mucho menos para mi bebé.Las palabras de aliento de este loco CEO me llenaron de tranquilidad, una que solo sea estando junto a ese traidor del cual no vale la pena mencionar su nombre.Mis amigos no han dejado de preguntarme sobre todo lo que ha pasado, la extraña desaparición de Mauricio, el traslado de mi padre, mi repentina relación con el amigo del doctor. Son cosas que me martirizan y para no entrar en detalles les respondo que mi vida ha cambiado 180º y ha sido para mejorar muchos
RodrigoQuien crea que ser el CEO de una de las compañías más grandes del país está completamente loco. Para alcanzar este puesto se requiere de mucho esfuerzo y dedicación.Han sido muchos los años que me he dedicado en mantener o mejor dicho hacer crecer el legado familiar. Me siento muy orgulloso por todo lo que he logrado y qué mejor recompensa que tomar el mando absoluto de todo.En este momento me encuentro sumergido entre un montón de documentos. Todo por adelantar el trabajo que se va a desarrollar dentro de dos meses. El responsable de que me encuentre en esta situación es nada más y nada menos que mi gran abuelo, el patriarca de la familia Evans. Recuerdo sus palabras como si las estuviera acabando de pronunciar.FLASHBACK—Rodrigo, sabes que vas a tener mucho trabajo por ha
SabrinaEl paso de los días ha sido una completa tortura, entre las guardias y todos los preparativos no he podido tener descanso. Agradezco al cielo que mi futura suegra, Katya y la mamá de esta última me hayan ayudado mucho.Juro que si no hubiera sido por estas mujeres, en ese momento estaría ingresada en un centro de salud mental. La prueba del vestido de novia fue una absoluta locura. Esas mujeres tomaron no sé cuántas botellas de champaña mientras veían el desfile.Pasaron de estar totalmente serias a estar muertas de la risa en un abrir y cerrar de ojos. Todo eso lo atribuyo a que tomaron copas de más y según palabras textuales de ellas “la vida es una sola y hay que disfrutarla”. El compartir con estas mujeres me ha hecho conocer un poco más de ellas, al igual que ellas de m&iac
Rodrigo—¿Sabes lo feliz que me haces Rodrigo? —interroga mi abuelo con una gran sonrisa que ilumina su rostro—. Ya eres todo un hombre de familia, así que de ahora en adelante espero que hagas lo correcto y no la vayas a cagar.Niego con un leve movimiento de cabeza, sabiendo que mi abuelo dice la verdad.—Lo sé, abuelo, pero te puedo asegurar que esto no lo hago solo por el ultimátum que me pusiste. —me froto la nuca—. En realidad esa hermosa mujer me ha cambiado la vida y de una manera que nunca llegué a imaginar.—Entonces eso me llena de felicidad, muchacho. —deja dos palmadas sobre mi hombro—. Al fin encontraste una buena mujer, vamos que debes cuidar de tu esposa y tu hijo.Ambos caminamos hacia la mesa en donde se e
SabrinaDespierto envuelta en una calidez reconfortante, pero mi sueño se desvanece al sentir una presión en mi vientre. Al abrir los ojos mi vista va dirigida a la parte baja de mi vientre y con ello confirmo quién es el causante de dicha interrupción.El brazo de Rodrigo reposa sobre mi cintura, siendo su mano la que se encuentra sobre mi vientre. El solo acto hace que mi corazón se me estruja y de repente me imagino que el hombre que yace recostado a mi lado y brindando calor a mi pequeño tesoro es Mauricio.Me permito imaginar ese momento por un corto instante, pero luego vuelvo a la realidad y sé que nunca lo vamos a poder vivir juntos. Repaso mi vista por todo el cuerpo de Rodrigo. Aún tiene puesta la ropa del día anterior. Tal vez por el cansancio no le dio tiempo de quitarse la ropa y optar por una
Si en algún momento llegué a imaginar que pasaría la mañana durmiendo plácidamente en mi cama acurrucada a mi cobija de conejito y mi almohada de Hello Kitty era una maravillosa sensación, estaba totalmente equivocada. Rodrigo me despertó muy temprano con besos por todo mi rostro, claro a excepción de mis labios. Haciendo que mi mal humor se acrecentará con el pasar de los minutos. Hizo que me levantara para que me diera una ducha y que lo hiciera lo más rápido posible porque quedaban pocas horas para ir al aeropuerto. Esas últimas palabras me desconcertaron completamente, sabía que íbamos a ir de viaje a un lugar no muy lejos para pasar nuestra supuesta luna de miel, que más bien sería un descanso de tanto estrés que me produce trabajar en la clínica y que a él alivia de tanto trabajo en la compañía. Todo alegando que era una gran sorpresa y que estaba seguro de que me iba a gustar tanto que lo amaría por la eternidad. «Cada vez se vuelve más loco o es que ya lo estaba y no me hab
Exactamente, una hora y media después nos encontramos aterrizando. Agradezco que esta vez la turbulencia no haya hecho estragos en mí como en el momento del despegue.Creo que Rodrigo tiene toda la razón al decir que eso es falta de costumbre y también el saber manejar los nervios.—¿Preparada para nuestro viaje? —interroga con una amplia sonrisa—. Te advierto que te vas a sorprender, pero primero debemos llegar al hotel y luego partiremos al lugar al que quiero llevarte.—¿Preparada?... —dudo por primera vez al estar a la expectativa de lo que pueda suceder en este viaje—, no mucho, pero hay que vivir la experiencia.—Así me gusta, esa es la aptitud.Sin más nos encaminamos hacia la salida del aeropuerto, no me di cuenta en que momento Rodrigo saco el equipaje. Lo cierto es que se ha vuelto muy hábil para muchas cosas.«—Y eso que no has explorado otros escenarios. —habla la voz de mi conciencia que como siempre aparece en
Rodrigo«¿Qué mierda es esta?», es el primer pensamiento que llega al ver semejante espectáculo. Parte de mi cuerpo se ha quedado en estado de shock, totalmente paralizado, pero no todo, hay un amigo que acaba de cobrar vida queriendo ir de fiesta. Por acto reflejo trato de tapar mi entrepierna para que ella no se dé cuenta, pero al parecer mis esfuerzos han sido infructuosos porque lo hice demasiado tarde. Este momento ha sido demasiado bochornoso para los dos, solo espero que no vaya a tomar represalias contra mí después.—Cierra los putos ojos, Rodrigo. —grita con exasperación—. ¿Acaso no sabes tocar la puerta antes de entrar?—Lo siento amor, no sabía que te encontrabas en ese estado. —afirmo con nerviosismo cerrando los ojos como ella pidió.—Entonces sal y espera a que pueda cambiarme.Como puedo giro sobre mis pasos y termino saliendo de la habitación, no puedo negar que fue una gran vista la que mis ojos acaban de contemplar. Pude admirar esas maravillosas curvas que se gasta