Capítulo26
Julien tenía los ojos llenos de lágrimas de rabia.

Solo Dios sabe lo que estaba pasando en ese momento.

Una tentación tan fuerte, ¿cómo podía resistirse?

—Lilita, todo está bien… aguanta un poco más… —su voz era grave, mientras apartaba una y otra vez las manos de ella que lo tocaban sin control.

Finalmente, la sentó sobre sus piernas para poder agarrarle las manos.

Así, por fin aguantaron hasta llegar al hospital.

—¿No entiendes o te haces el bobo? En ese estado, lo único que debiste hacer era acostarte con ella. ¿Por qué te molestas en traerla aquí? —Thiago Vargas salió de la habitación, mirando a su amigo con una mezcla de resignación y burla.

Los dos se conocían desde pequeños, más de veinte años de amistad, sabían todo el uno del otro.

Julien ignoró su actitud.

—¿Cómo está? ¿Le paso acaso algo más?

Thiago echó un vistazo a los resultados.

—En realidad, no hay ningún otro problema. Solo que…

—¿Solo qué? —los ojos profundos y oscuros de Julien se entrecerraron.

—Solo que… ¿acaso t
Sigue leyendo en Buenovela
Escanea el código para descargar la APP

Capítulos relacionados

Último capítulo

Escanea el código para leer en la APP