—¡¿Más hijos?! ¿Tú quieres tener hijos conmigo? —Aurelio fijo sus ojos en ella de manera sutil.—Por supuesto que quiero tener hijos contigo, ¿Qué clase de pregunta es esa? —sonríe un poco.—Pero…—Estamos casados, claro que deseo que tengamos más niños. No entiendo porque eso te sorprende, tú eres importante para mí, y realmente me gustaría formar una familia contigo.Ella niega levemente.—¿Por qué? —Aurelio guarda silencio entre tanto la observa.—Te amo, Fiorella. No sé en qué momento ocurrió, pero es lo que siento hacia ti.No era un confesión cualquiera, aquella era la verdadera de las confesiones. Tanto así que le costaba creer lo que había oído, Fiorella pestañea a la vez que los latidos de su corazón se hacían más fieros que antes.—Lamento mucho si te he asustado o incomodado con esto, de verdad es que no era mi intensión hacerse sentir insegura o presionada.—No, no —ella toma sus mejillas —. No me siento así —Fiorella muerde levemente sus labios al mirar esos ojos tan cau
El rubio se impacta por las palabras de Aurelio, sin embargo no ejerce ningún tipo expresión ante lo que había dicho.—¿De qué demonios me estás hablando?—Sabes bien de lo que te hablo, somos personas adultas que conocemos cada uno de nuestros errores.—Yo no he cometido ningún error.—Incendiaste mi galpón, Mattias, ¿quieres saber cuántos años de cárcel te espera? ¿Conoces al menos la cifra que tu familia quedará debiéndome por los daños causados a mi propiedad?Mattias palidece en el acto.— El seguro no cubre todo, Mattias —Aurelio se inclina hacia atrás mientras le sostiene la mirada —. Tengo que cubrir la mayor parte de los daños, así que, te imaginas como quedará tu familia cuando les toque pagar por todo.—No sé de qué demonios estás hablando.—¿No? —el castaño toma la carpeta de su escritorio y empieza a hojear —. Veamos, creo que mi mano derecha ha hecho una excelente recopilación de información. Y queda muy acentuado que tú has sido el causante del daño a mi propiedad.El c
El doctor guarda silencio un momento mientras observa minuciosamente el monitor, frunce el ceño y luego sonríe.—¡Es una niña!Aurelio ensancha la mirada mientras que observa aquel monitor del cual no entendía absolutamente nada.—¿Esta seguro? —se cerciora.—Por supuesto, es una niña.Fiorella observa un brillo especial en la mirada de su esposo que la complace mucho, él quería que su bebé naciera bien, pero ahora que sabía que era una niña su felicidad rebosaba.—¿Has oído? ¡Es una niña!—Ya he escuchado —responde sonriente la castaña.Aurelio se inclina hacia ella plantando un beso en sus labios que llena de felicidad el corazón de Fiorella.—Bueno disfruten de un bebé sano, felicidades —añade el médico después de la revisión.De regreso a casa Aurelio conversaba con Fiorella sobre cómo deberían modificar el cuarto para la niña, ella notaba que él estaba muy entusiasmado con la llegada de su bebé. Pero algo había dejado pasado por alto, y era que aún no elegían el nombre para el be
—Si has venido a llorar aquí, lárgate de una vez. Ya tengo suficientes problemas como para tener que verte llorar como idiota.La castaña observa al hombre a espaldas de su hermana y siente que todo aquello parecía como si fuese una pesadilla.—Enzo, ¿Por qué me has hecho esto?—Lo que me faltaba, la estúpida hermana menos viene a reclamarme.El hombre hace a un lado a Laura de manera bruta consiguiendo que ella golpeara su espalda contra la puerta.—Veo que lo que decía la idiota de tu hermana era cierto, te embarazaste de mí y conservaste al mocoso bastardo —Fiorella sujeta su vientre —. Es increíble el nivel de idiotez de ustedes las hermanas. ¿Por qué se empeñan en traer al mundo a mocosos?—¿Cómo pudiste hacerme esto Laura? Sabías que Enzo era mi novio, sabes que él es el padre de mi bebé, y aun así te has metido con él en la cama.—Fiorella, ¿Por qué siempre tienes que actuar como idiota? —responde su hermana.A ella le costaba creer que ese miserable se hubiera metido con su he
Algunos días después, Aurelio baja de su coche para encaminarse a una cafetería de la ciudad. Con pasos firmes el CEO ingresa en aquel lugar mirando hacia todos lados justo para reconocer a alguien a quien le estaba siguiendo los pasos desde hace varios días.Se aproxima hacia donde se encontraba sentado el imbécil de Enzo, en ese momento coqueteaba con una joven camarera que se le notaba por encima la inocencia. Aquello enfureció aún más al castaño.Estaba como si nada hubiera hecho, andaba por la vida destruyendo a las personas y no le importaba absolutamente nada…Cuando Aurelio llego a su mesa, la camarera lo observa fijamente.—¿Qué le puedo servir?—Ve atender a otra mesa—responde el CEO sin siquiera ver a la joven.—¿Quién diablos te crees para tratar a mi novia de esa manera? —Enzo se pone en pie mostrándose intimidante —. Vienes aquí con tu traje fino y le hablas de esa manera a mi novia, ¿quieres que te parta la cara?—Veo que tienes una larga lista de novias a las que suele
Al pasar los meses, Fiorella trajo al mundo a una hermosa niña que llevaba por nombre Bella. Aurelio pensó que ese nombre le quedaba muy bien a su pequeña bebé. Una que al mirar por primera vez no sintió ningún tipo de aborrecimiento por ser la hija de un desgraciado.Fue todo lo contrario, al ver a esa niña tan pequeña e indefensa se enterneció por completo. Y supo que el verdadero padre de ese bebé era él y nadie más. Era suya y seria él quien la protegería de todo.Estaba completamente enamorado de su hija, era lo más bello que había visto en su vida… después de que Fiorella fue dada de alta, los tres regresaron a casa y fue él quien se encargó de todo.—Has aprendido muy rápido, yo siento que no sé cómo atender a mi hija.—Debes descansar cariño, yo me puedo encargar de todo mientras tú te recuperas.—¿Y la empresa?—Fabián se ha estado haciendo cargo, de vez en cuando trabajo en mi despacho. No te preocupes por eso.Le responde a su esposa mientras mese a su hija en sus brazos.—
—Aurelio, ¿crees que esto sea muy necesario? —Por supuesto que lo es, es la única manera de que podamos llevar el control de todo —ella observa a su esposo atentamente. —¿Poniéndole un rastreador a Bella? —pegunta con tono sarcástico. —Tiene 18 años, ¿Qué esperas que haga? —No deberíamos abrumarla tanto, ya tiene mucho con entrar en la universidad. —A eso es a lo que le temo. La castaña observa como su esposo hace un artilugio espectacular para colocar un rastreador que Fabián consiguió para Bella. —Aureliano asistirá a la misma universidad, él puede cuidarla, es su hermano. —Pero con esto, sabremos si ella se escapa con sus amigas sabrá dios a donde —la castaña pone los ojos en blanco. —Eres muy protector. —¡Es mi hija! ¿Quién más lo va a hacer?, bueno ya está listo… —deja su bolso donde estaba—. Dudo mucho que se dé cuenta de esto. Su esposa lo duda ya que Bella era una chica bastante astuta… ya tenía 18 años al igual que su hermano Aureliano, ambos habían comenzado la uni
Algunas lágrimas se deslizan por la mejilla de Fiorella al ver como su madre está siendo sepultada. La joven siente un profundo dolor en su alma que le es imposible de explicar, no esperaba que su mamá se fuera tan pronto de ese mundo. La joven gimotea cuando algunas amistades depositan una rosa sobre su lecho de muerte, y seguido de eso palmean su hombro para darle sus condolencias. Fiorella solo consigue asentir, pero sin apartar la vista de la tumba de su madre. Limpia sus lágrimas al mismo tiempo que traga saliva, trataba de contener el llano, pero le resultaba imposible. La castaña levanta la mirada y ve a su hermana a su lado, Laura no derramaba ni una sola lágrima, es que no expresaba ningún tipo de conmoción por la pérdida de su madre. La castaña mayor levanta la mirada para verla de soslayo y frunce el ceño. Ambas se miran fijamente y es como si fuesen un par de desconocidas. —¿Qué te pasa? —Tú… ¿no te duele la muerte de mamá? —¿Qué clase de pregunta estúpida es esa? —N