Ofrezco disculpas por la tardanza, tuve un día muuuy ocupado. Apenas vengo llegando, por lo que tendrán dos capítulos de una vez. Gracias por no lincharme ;)
Los clavos chocaron contra el asfalto al ser lanzada la alfombra metálica, la cual se atravesó condenando el destino que ya de por sí sería atroz para quien ostentó provocar a hombres entrenados de forma obsesiva por sujetos que los volvieron rápidos y hábiles. Asben Zane contó los segundos mentalmente para el momento que preparó, concentrándose tanto en eso, que olvidó porque el coronel era un elemento de armas tomar en el ejército y la razón del porqué llegó al lugar que ya tenía, y muchos respetaban.Pues no esperó que su conductor frenara con brusquedad al tratar de esquivar la alfombra de clavos que lo hizo barrer los neumáticos, sin servirle de mucho cuando al girar sin el mínimo control, el auto blanco tuviese que derrapar hasta que dio la vuelta girando en dos ocasiones, mientras las grandes de humo fueron lanzadas desde algún punto.Asben tosió en el suelo con el cuello lastimado, herido de la cabeza y su conductor con la cara deshecha contra el cristal frontal. El humo ent
Con mucha paciencia y celebrando un triunfo que aún no culminaban de verdad como tal, en una llamada que los tenía con una posibilidad para seguir, Amaranta tenía una sonrisa de oreja a oreja, como Brandon tomaba lo que encontró en un sitio al que envió a Peralta. Bell, cómo se llamaba el hombre con la obsesión enfermiza del cuchillo que tenía en la mano, como si el filo no fuese suficiente aún, imaginando lo fácil que sería atravesar el pecho del hombre que lo hizo quedar en ridículo en una pelea. Pues para un Kall que un contrincante sobreviviera era signo de incompetencia.Y Chang fue capaz de resistir tres puñaladas, como también de dejarle una rodilla dañada en un enfrentamiento. Brandon sabía de la calidad de hombres que tenía en ese momento, por lo que no contaba con los hombres que le ofreció Amaranta o su hermano, ya que estos fueron abatidos muchas veces por los mörder.Si pelea siempre estaría en desventaja, porque los hombres que Bastian reservó para casos que no control
Kiara pasó tiempo con su hija, haciendo que la niña apenas se diera cuenta de lo que estaba pasando, pues no debía sentir ese peligro del que todos querían librarla. Ella sonreía y eso le daba la energía que perdía con el resto de cosas que la rodeaban. Sus abrazos sanadores le eran la pila cargada que necesitaba para continuar, pues Nessi amaba verla sonreír y su madre le daba gusto con ello. Elsa era de gran ayuda, pero recibir la misma atención que le brindaba a su hija no pretendía cambiarlo por nada ni nadie y de alguna forma eso a Bastian lo tenía tranquilo porque era justamente lo que esperaba que tuvieran.Él cuidando de las dos como era su papel en la familia de tres que tenían. Las cámaras las mostraron estando en el dormitorio y por ello continuó su búsqueda. Ellas estaban bien, él se concentraba. Así funcionaba. Nessi estando protegida por Kiara y ambas siendo cuidadas por el alemán que las veía desde una pantalla. Además que se esmeraron en lograr que todos pensaran
Brandon se embelesó por el cuerpo voluptuoso de la mujer a quien abrió de piernas en ese lugar, preso del deseo que no contuvo ni pudo detener, limpiando su nariz a la vez de la sustancia que inhaló. Jamás cambiaría a Peralta, pues este siempre lograba conseguir lo que fuese en donde fuese y tanto el alcohol como las botellas de licor que repartió entre todos, siendo cantidades moderadas que solo impulsarían su instinto de matar, mientras a él le aumentó las ganas de follar con la mujer que se puso a su disposición totalmente. El narcotraficante se sumergía en el abismo del placer, a la vez que los autos estaban listos para movilizarse por las calles oscuras, en un convoy único del cual el primero estaba habilitado para resistir contraataque, el segundo para apoyar con una metralleta instalada y el resto con el blindaje necesario que resistía las mismas balas a un nivel que asombró a mucho cuando las pruebas se hicieron.__ ¿Es un sitio estudiado? - le preguntó Kiara a su marido mie
__ No, escúchame. Dame a mi hija. - no la quiso alterar, mostrando que no estaba armada ni era un peligro para ella. - Elsa, podemos encontrar una solución. __ No hay soluciones, señora. De verdad lo siento… No puedo dejar que me quiten a mi familia __ Lo entiendo, ¿bien? Sé que cuando de ellos se trata nada importa, pero no puedo dejar que te la lleves. - se quiso acercar. - Si me dejas pensar en algo, tal vez… __ El tiempo se agota, me envían una foto con ellos amarrados cada minuto, los van a matar. - Kiara vio las posibilidades de que una bala se le escapara y dañara a su hija.__ Llévame a mí, ¿bien? - propuso. - Llévame en su lugar, deja que mi hija permanezca segura. Llévame por ella y no opondré resistencia. __ El Don va a matarme cuando lo sepa. - pasó saliva con dolor. __ No lo hará. Esto lo haces por tu familia, como él y yo hacemos todo por nuestro pequeño mundo, pero déjame ir en su lugar. - era imposible no comprenderla y odiaría tener que hacer algo en su contra, e
El fuego se desató entre tres bandos. Rivalidad entre dos de ellos, deseó por llevarse la victoria de la agencia que estaba presente, tratando de ubicar a la cabecilla de ambos grupos criminales. Bastian posicionó el arma en su sitio, colocando el hilo de cobre que enredó en el gatillo de su fusil, a la vez que se puso de pie, tomando una de las pistolas modificadas que llevaba con él, yendo en dirección del grupo que estaba entre las balas cruzadas que no se detuvieron. El temporizador tenía solo cinco minutos, por lo que debía dar con Brandon antes de ese tiempo y tomar la ruta donde nadie pudiese detenerlo. Saltó entre los balcones cayendo en el asfalto, sin frenar los pasos que lo hicieron avanzar, quitando el seguro de una de sus armas, a la vez que buscó la otra, mientras movió su cuello con la descarga de adrenalina que eso le daría. Pudo escuchar su propia respiración a medida que avanzó, cada músculo de su cuerpo respondió al punto flexible de su deseo casi ansioso por
Bastian fue llevado a una sala donde los cuatro metros se veían como un espacio muy pequeño para él y la pequeña mesa en la que fue esposado. Su espalda permaneció derecha y sus manos atadas, su mirada plagada de ideas y su mente resolviendo cada una de ellas. Brandon estaba en la misma situación, solo que la inquietud con la que se movía, les hizo ver que ese sitio no era algo que esperaba. __ Nombre. - la pregunta se hizo en las dos celdas. El único que respondió fue Brandon, el cual con ironía miró al agente. __ Nombre. - repitió el agente que estaba frente a Bastian, a lo que él ni se mosqueó. - Dije… __ Fuiste quien me capturó, me esposó leyendo mis derechos y quien me entregó a al grupo de oficiales. Mi nombre lo sabes, como también donde nací y la serie de preguntas que tienes en esta bitácora. - exclamó con ese léxico que lo dejó en silencio. - Pregunta lo que en verdad quieres y ahorremos tiempo. __ Muy sabelotodo. __ No, solo no me gusta que alguien me pregunte c
__ Tienes una suerte muy grande, Blackwood. El ministro no está disponible para firmar la orden que te sacará del país. - le dijo Kord, el agente supervisor a Bastian. - No sé porqué me sorprende. De seguro…__ ¿Aún tienes en custodia a Brandon? - lo interrumpió.__ No podría escapar. - se burló de él y este no pareció interesado en ello. - ¿Qué te preocupa? - no recibió respuesta, entonces este hizo una señal a las cámaras e inmediatamente la luz roja que indicaba estar grabando dejó de parpadear hasta que se apagó. - ¿Sabes que puedo desaparecerte? ¿Estás consciente que puedo matarte aquí y no tendría el menor impacto en mi carrera? Porque no existirías. Cuento con el poder suficiente para hacerlo. __ Tanto poder que aún buscas una firma para moverme de aquí, agente. - lo retó. - Si estoy aquí es por voluntad propia. Puedes matarme, pero antes de eso quiero ver morir a la escoria que tienes en la otra sala. __ ¿Tanto odio para tu hermano? Dicen que el dolor que tiene uno lo puede