NICKOLAS BLAKE.
Sábado, 5 de octubre de 2024. El trago baja amargo por mi garganta. Aun no puedo creer la locura que estoy a punto de cometer. Aun no puedo creer que el viejo se haya salido con la suya. El toque en la puerta me hace levantar la mirada del piso, estoy en una habitación del lugar donde se llevará acabo la boda, mi no tan querida esposa debe estar en otra igual a esta. —Adelante. Aparece Liam con su prometida. Caroline me da una mirada de lástima, lo que me produce que quiera incendiar todo. —Primo… dentro de unos minutos tienes que salir —lo miro con ganas de asesinarlo—. Venga Nick, no me mires así, ya está bueno, ¿acaso creías que no traería consecuencias todas tus escapadas? madura de una jodida vez y acepta que por muy lejos que quieras volar tienes una correa atada en el cuello, como todos en esta familia. Caroline se incomoda ante sus palabras y no es para menos… dichas de esa forma pareciera que… «No vayas por ahí, Nick. Concéntrate en tu problema» —Liam, eres un… —Vamos otra vez con lo mismo —me interrumpe—. Dentro de unos meses, me lo agradecerás —dibuja una sonrisa divertida—. A Katherine Prior, si no la podrás manipular, ella no caerá ante ti, serás tú quien pierda la cabeza por ella, quien haga de todo para conquistarla. —Pff… —bufo—. Para eso tengo a Kiara. —¿Y por eso no son nada formal? Touché. Respondo para mis adentros. Salgo de la habitación. Necesito respirar aire libre. Veo a mis padres en la puerta del salón, los ignoro y sigo caminando hasta encontrar la puerta que da al jardín. La brisa me da en el rostro. Pero el aroma dulzón me seduce. Un amante de la naturaleza apreciaría lo bonito que está este jardín, pero yo… yo solo quiero desconectar antes de cometer el mayor error de mi vida. El móvil me vibra, lo saco del bolsillo del pantalón. Veo en la pantalla un mensaje de mi amante. Kiara: Amor, ¿dónde estás? Estamos en el salón esperando por la no tan feliz pareja. Joder… ¿qué hace así? ¿Acaso pretende impedir la boda? Perderé la cabeza. «Calma Nick». «Recuerda las palabras de Owen, tu vida no tiene por qué cambiar. Solo debes mantener contenta a la chica ». Me doy varios minutos antes de regresar, pero un pequeño gruñido llama mi atención. No se escucha muy lejos de donde estoy. Camino en esa dirección llevándome una sorpresa. Guau. A pocos metros tengo a mi prometida enfundada en un sexy vestido tratando de trepar una pared para escapar. Sin poder evitarlo una sonrisa divertida se dibuja en mi rostro. ¿Con qué esa tenemos? Me acerco con sigilo hacia ella, escuchando lo que murmura por lo bajo. —Primero muerta antes que casarme con ese imbécil —se quita los tacones, revelando unos delicados zapatos blancos de tacón. Echa hacia atrás el velo y coloca un pie en la pared. —Vaya… y yo que pensé que estarías derretida por mí. —digo, solo por fastidiarla. Su cuerpo se tensa, despacio voltea su cara, abre los ojos como platos cuando me ve con la ceja levantada. —Imbécil. —dice estando en el piso nuevamente. Me quedo sin aliento al contemplarla bien. Su piel blanquecina, sus ojos avellana, sus labios de color rosa, parece toda una… «Frena los pensamientos que se te va a parar la polla». —No pienso casarme contigo —me señala con su dedo—. No voy atar mi vida a la tuya llena de caprichos. Me carcajeo. —Aşkım, no has entendido que no tenemos escapatoria —le hago ver—. Para tu mala suerte tu padre te vendió a mi familia. Noto el momento exacto en el que si cara se transforma a una llena de ira, de odio. Soy un paso hacia atrás cuando se acerca peligrosamente a mí. Me da una sonrisa maliciosa que me indica que no me gustará lo que va a salir de sus labios. Me quedo atónito cuando siento su mano en mi mejilla. —En tú vida vuelvas a faltarme el respeto, Nickolas Blake—especta en mi cara. Sus ojos brillan, las aletas de su nariz se abren y se cierran, haciéndome recordar a un toro endurecido. «Llega a un acuerdo con la chica, Nick». —No voy a casarme contigo, prefiero huir antes que hacerlo —se da la vuelta y va de nuevo a la pared—. Así que dile a todos que escapé. Voy hacia ella, agarro su brazo, pero no mido en la fuerza con la que lo hago, la atraigo hacia mí. Termina estampada en mí, a escasos centímetros de mi cara. Respira profundo, llenando sus pulmones de aire o de mi olor, por un segundo noto como si mirada baja a mis labios y luego regresan a mis ojos, con mucha más rabia que al principio. La tensión entre los dos es palpable, así como las ganas de… —Prometo hacer todo lo que quieras —digo sin dejar de verla y de sostenerla por la cintura—. Prometo darte lo que me pidas, pero debemos volver al salón y casarnos, no podemos escapar de lo que nos han impuesto. —No… —Shh… piénsalo con la cabeza fría —la interrumpo —. Te doy mi palabra que haré lo que seas que me pidas, además, los dos sabemos que no pasará nada entre nosotros, no tendrás que responderme como mi esposa porque para eso tengo a otras mujeres. Noto como sus engranajes trabajan a toda hora. Su semblante en pensativo. Me alejo unos centímetros de ella antes de dejarme embaucar por su olor dulzón y terminar cometiendo una locura. —No he tomado una decisión y no pienso atarme a ti —Sus ojos avellana destellan enojo, es algo digno de ver y donde está todo su atractivo. —Katherine, te aseguro que es mejor esto a qué mi familia te cace de por vida, por deshonrarnos. A los dos nos irá mal si no vamos a ese salón y terminamos con esto. Respira profundo, muerde su labio inferior. —Haré lo que yo quiera y no lo que tú me impongas, estoy cansada de hacer lo que los demás quieren… —¿Qué significa eso? —No sé… dedúcelo tú. Utiliza ese cerebro Que Dios te dio.Martes, 1 de octubre de 2024.Katherine Prior. Los gritos en la cocina me despiertan, sobo mis ojos mientras veo el cuerpo de mi hermana menor, sigue dormida a pesar de los lloriqueos de mamá y mi hermana mayor.Siempre le he rezado a un Dios para que nos quite la miserable vida que llevamos viviendo desde que nacimos, pero parece que no existe. Porque si existiese, no tuviera que ver cómo mi madre es abusada constantemente por mi padre, como mi padre nos maltrata cada que quiere algo y no salen las cosas como él lo desea, no tuviéramos que ver como padre llega borracho y descarga su ira con mi madre.Respiro profundo al escuchar mi nombre.—¡Katherine Prior! ¡Ven inmediatamente!Me levanto como un resorte de la cama, me pongo las pantuflas, me preparo psicológicamente para lo que me espera.En la cocina está mi madre con la cara hinchada, la mano de papá adorna su piel blanca. Mi hermana mayor se mantiene con la cabeza gacha y las manos hacia atrás. Los ojos de padre se dirigen a mí
NICKOLAS BLAKE —No puedo creer que tu abuelo te pida eso —veo a Kiara, servirme otro trago—. ¿Sabes que eso será un problema en nuestra relación?Respiro profundo para no perder la cabeza.—¿Nuestra relación? —pregunto sin dejar de verla.—Venga, Nick. Sabemos que somos algo más que folla-amigos —se sienta a mi lado, toca mi hombro—. ¿Por qué no nos casamos tú y yo?Abro los ojos como platos. La veo como si se hubiese vuelto loca.—Mujer, ¿acaso perdiste la cabeza? —me levanto del sillón, sin poder creerlo.—Nick, pero no es tan descabellado —viene hacia mí. Toma mi rostro entre sus manos—. Amor, así te quitarías a tu abuelo de encima. No tendríamos que vernos en mi departamento a escondidas de la prensa.Respiro profundo. Tomo sus manos y las quito de mi rostro.—Kiara, no me pienso casar. Ni contigo ni con nadie. —asevero. Su rostro se contrae, pero eso no produce nada en mí—. Además, ¿Qué son esas tonterías que estás diciendo?—Amor, pero piénsalo.Niego con la cabeza. Me termino
NICKOLAS BLAKE.En el momento que puse un pie en esa sala nuevamente, debí intuir que algo andaba mal, más con la sonrisa burlona en la cara de Liam.Cuando Caleb Prior dijo aquellas palabras creí que me estaban jugando una broma, pero al ver la seriedad en el rostro de mi padre y tío, supe que no, que era cierto.¿cómo una cena de negocios termina en un matrimonio arreglado? ¿acaso ya lo tenían planificado antes de venir? ¿Cómo pude ser tan estúpido para no verlo?El segundo golpe vino después. Cuando reconocí a la joven frente a mí. Venga… esto definitivamente tenía que ser una jodida broma.¿La chica de la academia?La detallo. Percatándome que no tiene la misma actitud que de esta mañana. Vaya… por lo visto no soy el único que piensa que este matrimonio es una locura.—Ven hijo, toma la mano de tu esposa. —siento como están clavándome puñales por la espalda.Noto el movimiento de su pecho, sus manos cerradas en dos puños. Sus ojos avellana me devuelven la mirada. Sufro el mismo ti
KATHERINE PRIOR.Me parece estar en una película de terror. Luego de que los Blake se fueron de casa, tuve una discusión con papá. No pienso casarme con ese engreído. Con razón me pareció conocida su voz cuando estaba en la cocina escuchando a escondidas, con razón al ver a Liam Blake se me hizo conocido, fue el hombre que estaba apoyado en el marco de la puerta cuando salí de aquel salón.Respiro profundo, pensando en todas mis opciones. No pienso casarme… algo debo hacer para evitarlo.No puedo atar mi vida a un desconocido. Sencillamente no puedo. En algún momento deseo sentir la magia del primer amor, del primer beso. Pero con ese tipo obviamente no será.¿Por qué me pasa esto a mí?Me siento una mala persona por desearle esto a mi hermana, pero sé que a ella si le hubiese gustado. Claro que sí, Zahira no es como yo, ni como Kendra.Ahora todos mis sueños y metas las veo imposibles. Esa familia no me dejará cumplir mis sueños. Saldré de un calvario para entrar en otro. La prueba d