El vuelo directo desde las vegas a los ángeles solo duro aproximadamente una hora.
En el corto tiempo, Damián se sentó en la parte de adelante. Allí, nada más estuvo sumergido en sus pensamientos. Al llegar al hangar privado, subimos a una camioneta con destino desconocido para mí, ya que Damián no ha dicho nada desde la salida del hotel.
Es como si el gato le hubiera comido la lengua.
Nuestra salida de ese lugar fue un caos.
Mientras estaba sentada lo más alejada de Damián me tome el tiempo para leer algunos titulares en las diferentes columnas de chismes. Cada uno de ellos no me dejaba bien parada a mí. En cambio, dejaba como una víctima a Lucas el mismo que me había dejado algunos mensajes pidiendo explicaciones de lo sucedido.
¿De verdad?
¡Qué cara tan dura se debe tener para exigir explicaciones estando con otra mujer!
Resoplo y continuo con la medición de daños. Pero lo más me molesta es que los medios están haciendo ver a Lucas como un buen hombre y a mí como la mujer malvada que lo engaño.
«Cara engaña a Lucas.»
«El actor Damián Anderson, es la manzana de la discordia.»
«¿Desde hace cuánto engañaban a Lucas Jones?»
«¿Cómo podrá superar esto Bella?»
El que más me molesto fue el que decía:
«Declaraciones del portavoz, asegura que Lucas está destrozado.»
Seguro que sí.
Está destrozado en los brazos de Brenda.
Pero, que sabrán ellos.
Vamos en la parte de atrás de una camioneta y por la ventana observo como atravesamos la ciudad. Miro a un lado y veo a Damián con una expresión interrogante.
—¿A dónde se supone que vamos?
—A mi casa, en Calabazas.
—Necesito ir a la casa que compartía con Lucas por el resto de mis cosas—digo algo cansada.
—No creo que debas ir en este momento— me responde—La prensa de seguro espera ese movimiento.
Me siento de lado mirándolo directamente a los ojos.
—No entiendes. Debo ir por mis cosas—niego—En necesario, allí tengo algo importante que no quiero que caiga en las manos de Lucas.
Frunce el ceño y sus ojos se llenan de interés.
—No me digas que son videos de ustedes dos juntos teniendo sexo.
—¡No! —exclamo mirándolo mal—No es nada sexual por si te preocupa. Por cierto, mi vida privada no es asunto tuyo. Además, si lo hubiera ¿Qué importa? —mi tono es frío —Te recuerdo, que en tu película saliste prácticamente desnudo en más de una ocasión —de repente recuerdo algo más. Algo en lo que no había pensado— ¿Es cierto que estás saliendo con tu co-estrella?
La prensa los ha emparejado desde que la película salió y en realidad ambos tienen una excelente química. Bella Green es una de las mujeres más hermosas dentro de Hollywood en este momento.
Arquea las cejas.
—Primero. Puedes estar tranquila, Bella y yo solo somos buenos amigos—no digo nada —Segundo. En cuanto a la película, si me desnude era trabajo—una sonrisa secreta se extiende en sus labios—¿Viste mi última película Cara?
Resoplo.
—¿Quién no la vio? —me encojo de hombros y miro a un lado antes de devolverle la mirada, antes de volver al tema inicial—Necesito ir a esa casa y recuperar todas mis cosas.
—Primero debo esperar mi representante. Él ira a casa—se queda pensando—La única forma de ir a la casa de tu ex, es por la noche sin que nadie nos vea.
Lo miro mal.
Suspira.
—Si la prensa nos ve allí, saldremos más sucios de lo que ya estamos.
—No puede pasar de esta noche. Lucas se va a presentar de nuevo en las vegas antes de regresar—continuo—Se supone que asistiría a una premiación antes de la boda. Así que esta noche iré por mis cosas. Si o si—ladeo la cabeza en modo hostil.
—Está bien. Iremos esta noche.
—Gracias—murmuro aliviada antes de volver a mirar por la ventana.
—Entonces, ¿Te gusto mi película?
¡Insiste el jodio!
Pongo los ojos en blanco mirando el tráfico de LA.
—Digamos que mi amiga me insistió y la vimos —hago un gesto para restarle importancia —Créeme no fue la gran cosa.
Keyla.
Había comenzado mi amistad con Keyla cuando fue contratada para diseñar la imagen de Lucas. La mujer y yo nos llevamos bien desde el inicio y hasta el día de hoy es mi mejor amiga.
Un tiempo después dejo el trabajo por diferencias con Martín seguimos en contacto y cuando nos juntamos me la paso muy bien.
Eso me recuerda que no he abierto ni sus mensajes ni los de mi madre. Mucho menos contestado sus llamadas. No estoy lista para darles una explicación. Si yo misma no sé qué coño me poseyó para casarme con este extraño sentado a mi lado.
Ignoro la mirada brillante que Damián me dedica. Sé que mi comentario le ha dado justo en el ego. Oculto mi sonrisa y lo ignoro.
Unos minutos después, no me sorprende ver la residencia de Damián. Es todo lo que imagine. La casa que compartí con Lucas hasta hace poco es solo unos metros más pequeña ubicada en Santa Mónica.
Creo que Lucas quería alejar los recuerdos de su infancia. Un chico que vivió con su madre en un parque de remolques. No tenía nada de malo, logro superarse y es uno de los cantantes de Country más populares en la actualidad.
El interior de la casa de Damián es impresionante, pero como antes no es nada que ya no haya visto antes. Entradas majestuosas y pisos hermosos, la decoración es actual en blanco y negro con escaso mobiliario.
Definitivamente, aquí vive un soltero.
Una mujer de mediana edad con gesto serio y solemne aparece vistiendo un uniforme de falda negra y camisa blanca abotonada completamente y su cabello está severamente recogido en un moño apretado.
—Cara. Ella es Celeste, mi ama de llaves —hace un gesto hacia ella.
—Un gusto Celeste—Saludo.
Su mirada de condena me barre antes de mirar a su jefe.
Oculto la mueca.
—Señor. Su madre ha llamado durante toda la mañana—Es el turno de Damián de hacer una mueca.
—Debí contestar sus llamadas de antemano—murmura en voz baja. Sin embargo, logro escuchar claramente lo que dice.
¡Vaya! Al parecer, no solo yo huyo de una madre intensa.
—¿¡Dime en qué coño pensabas Damián!? —ambos damos la vuelta para encontrarme con un hombre, unos años mayor que Damián.
Su cabello es negro y sus ojos oscuros están atentos. Viste un traje a medida que le sienta bien.
—Zane —el tono de Damián es cansado—No me digas nada que ya no sepa.
Él niega y avanza hasta mí.
—Así que tú eres la esposa de Damián—comenta en tono de censura mientras sus ojos me estudian con desconfianza.
—Cara Miller.
—Lo sé—ladea la cabeza— De hecho, sé mucho de ti Cara—Me da una sonrisa falsa.
Si cree que me va a intimidar, está equivocado.
—Pues, es bueno que lo sepas—respondo—Estoy segura de que podrías contarme cosas de mi vida que de seguro no sé —mi tono desborda ironía. Miro a Damián—Solo vine aquí para evitar un escándalo que me afecte más a mí —digo las palabras con énfasis —No te equivoques Damián Anderson. Tú y tu carrera me tienen sin cuidado—sus ojos echan chispas—Mantén la correa de tu perro o saldré por esa puerta y mañana a primera hora recibirás la petición de divorcio.
Su cuerpo se tensa y escucho la maldición ahogada de parte de Zane.
—Zane. Espéranos en mi oficina.
—Damián—musita este.
El mencionado desvía la mirada y la clava en su represéntate.
—Hazlo Zane—desvía la mirada hacia mí —Creo que tienes un punto, pero no pienses que cederé a todas tus demandas.
—Ídem—respondo con simpleza dándole mi mejor sonrisa de cabrona.
Si no quiero que me pasen por encima como un tren de carga, tendré que plantarles cara. Veo como resignado Zane se aleja, lo mismo sucede con Celeste que ha presenciado todo el intercambio sin inmutarse.
—Bien. Pongamos las cosas claras—anuncia Damián haciendo un gesto hasta lo que parece el salón principal.
Ha llegado la hora de negociar y establecer mis demandas. Si no quiere que su carrera se hunda en un escándalo más penoso, tendrá que hacer una muy buena oferta.
POV DAMIÁN.Cuando me preguntan a qué se debe mi éxito.Simplemente, respondo que es gracias a mis buenas decisiones. Me jacto de ser un hombre que piensa cada detalle de su vida y que solo asume los riesgos necesarios.Mi carrera la he construido con trabajo y mi imagen impecable me ha abierto puertas. Comencé en esto como modelo, pero mi sueño siempre ha sido conquistar Hollywood. Desde que soy un niño, mi meta era aparecer en una pantalla.Mis primeros trabajos me dieron la experiencia para saber que quería hacer dentro de la industria plagada de aves de rapiña, que únicamente esperan la caída de alguno para ellos subsistir. Sí, es un mundo salvaje, pero cada papel que interpreto lo hago como si fuera el último. Mi trabajo es todo.Por eso, cuando recibí el llamado para un casting que se llevaría en las vegas no lo pensé, hice mi maleta y partí. La última película había sido difícil para mí.Zane me insistió en que era una excelente oportunidad, pero jamás imagine que el papel de p
Decirle al hombre más cotizado de la industria de Hollywood que seguirás casada con él por compasión no tiene precio.Es la guinda del pastel para este caos en el que me he metido.Siempre he sido un imán para los problemas. Pero creo que esta vez me he pasado y estoy metida en uno enorme.Por lo poco que he vislumbrado de la personalidad de mi nuevo marido. Puede darme cuenta de que es un tipo vanidoso, sabe lo que representa y por supuesto esta consiente de su atractivo.Un engreído total.Sin embargo, también me pregunto por qué accedí a seguir casada con él, cuándo lo que debería hacer era mandar todo al carajo e irme. Quizás porque mi ego herido no me permite exponerme de nuevo a las habladurías.—¿De verdad Cara? —susurro acostada en la cama de la habitación de invitados.Después de publicar el comunicado y de ir por mis cosas a la casa de Lucas, volvimos. Una sonrisa tira de mis labios al imaginar su cara cuando vea su comic de la primera aparición de Thor que le costó treinta
Sorbo de mi bebida mientras tomo algo de sol.Al menos ahora puedo tener un poco de tranquilidad luego de tanto estrés.Sí, hablar con mi madre me hace pensar en tantas cosas y termino sintiéndome como una mala persona.Así que, después de un desayuno delicioso, Celeste se retiró a terminar sus deberes y me quede en la piscina con mi libreta escribiendo algunas notas, las mismas las deje a un lado tratando de pensar cuál será mi próximo paso.Después de mi conversación con mis padres, sé que debo idear algo para arrastrar a Damián hasta mi casa.El problema es, ¿Cómo lo hago?También le escribí a Keyla y nos veremos al finalizar la semana cuando venga a LA.— Veo que estás disfrutando tu mañana — la voz de Damián irrumpe el silencio.Me quito las gafas de sol y me siento en el camastro para ver a Damián caminar hasta mí.Viste vaqueros desgastados y una camiseta blanca, todo el atuendo es despreocupado junto a sus botas de combarte desgastadas.El hijo de puta es sexi y eso no es nego
— ¿Lista para esto? — inquiere Damián cuando estaciona en el lugar indicado detrás del restaurante.— No alarguemos más esta agonía — digo ganándome una risa de su parte.Bajamos del coche y somos guiados hasta el inicio de la alfombra verde dispuesta para que la prensa haga su trabajo.Mis manos sudan y miro alrededor para notar como nos miran las personas.Unos con sonrisas.Otros con escepticismo y están los que nos miran mal.— Bien. Creo que oficialmente soy la peor ramera en este momento— susurro sintiendo un hueco en el estómago. Damián me mira frunciendo el ceño.— No eres nada de eso. Solo tienen envidia.— Vale. Ahora se le llama envidia.— Venga. Es el momento— dice cuando una de las organizadoras le hace una seña. Respiro profundo y cuando entramos a la alfombra, los reflectores y el flash de las cámaras me dejan casi ciega.Las personas gritan preguntas y otros dicen cosas que no entiendo.Es un maldito caos.— ¡A tu derecha Damián! — grita una voz masculina.Poso con mi
Nuestro objetivo fue cumplido con éxito.La prensa ha quedado encantada con nuestra aparición y tiene de que hablar por unos cuantos días.Muchas personas se acercaron a durante la noche y Damián las deleito con una historia que podría ser considerada para una adaptación cinematográfica.Al parecer lo nuestro fue amor a primera vista.¿De verdad?¿Se puede ser más hortera?Decidí seguirle la corriente.Sin embargo, no es como si me interesara agradarle. Siempre he sido muy hermética con la información que hago de conocimiento público. Damián por su parte, es una persona muy sociable y destaca entre la multitud. Es obvio porque ahora es el preferido de Hollywood.—¿Quieres algo de comer? —escucho que dice Damián junto a mí.Aunque acabamos de salir del restaurante. Como es Los ángeles, solo se sirvieron mini platos de degustación. Fue divertido ver la mueca de Damián.Al parecer, el hombre prefiere algo más sustancioso. La verdad es que yo también tengo ganas de algo más.— Muero por n
POV DAMIÁN.Esta mañana salí de casa muy temprano. Al detenerme junto a la puerta de Cara no escuche ruidos. Lo que quiere decir que todavía estaba dormida. Ayer, después de ese beso compartido nos conduje de regreso a casa. Durante el trayecto no dijo nada. Al parecer mis últimas palabras la desconcertaron.No es la única sorprendida por la confesión. Fui sincero cuando le dije que ella era una mujer capaz de poner mi mundo de pies a cabeza.¿Por qué?Míranos ahora. Casados cuando un matrimonio nunca ha estado en mis planes. Tampoco me considero material de esposo, pero veme aquí. Esposo de una mujer que apenas conozco. Cara me intriga, es brillante, capaz de sobreponerse a situaciones estresantes en un milésimo de segundo. Además de ser hermosa e intrigante.Sí. Intrigante.Hay algo que no he podido descifrar. No me pasa desapercibido que esconde algo, pero ¿Qué? Si quiero descubrirlo, debo ser muy sigiloso y tener paciencia porque Cara tiende a desconfiar de las personas a su alred
Término de escribir las últimas notas de la canción en la que estoy trabajando cuando decido que es suficiente por hoy. He pasado el día en la habitación tocando y escribiendo. Desde que estoy aquí, he podido componer una canción entera y tener una a medio camino.Es sencillamente fantástico.Mi mirada se va de nuevo a mi móvil. Damián me escribió más temprano queriendo saber qué hacía. Como no estoy preparada para decirle, evadí mi respuesta como siempre.Sin embargo, él tiene razón. Es extraño que siendo mi esposo no sepa lo que hago.Es solo un falso matrimonio.Asoma la cabeza mi feo subconsciente. Lo ignoro y guardo mi desorden. Me levanto del piso donde he estado trabajando y me estiro para aliviar el dolor en mi espalada. Había almorzado arriba sola. Celeste fue amable en traerme algo. Al principio me dio vergüenza que viniera hasta aquí con mi almuerzo, pero me dejo claro que no le importaba.Miro por la ventana y me doy cuenta de que está anocheciendo. Así que decido bajar. M
Dejo atrás a Damián y hago el camino de regreso a la casa para encontrar a Celeste en la cocina, aún estoy algo cocada por lo que acaba de pasar, pero debo reponerme y enfrentar la situación que tengo en frente en este momento.— Ya espera en la oficina de Damián— anuncia Celeste algo incómoda.— Gracias —murmuro pasando por su lado. Cuando llego afuera de la oficina de Damián respiro profundo y abro la puerta. Encuentro a Martín frente a la repisa de premiso que Damián tiene en exhibición. Es extraño que en el resto de la casa no hay nada que lo haga ver como un fanfarrón. De hecho, todos están en esta oficina.— Algo estrafalario ¿No? — comenta Martín sin mirarme.Cierro la puerta detrás de mí.— Al menos, no tiene un cuadro de sí mismo dominando toda la chimenea del salón principal — comento en tono seco refiriéndome a Lucas. — Admítelo. Te encantaba— me mira desde su posición con una sonrisa arrogante.Martín es un hombre bajo y delegado. Tiene el cabello algo encanecido y si no