POV DE BIANCA.Se persuadían con la mirada, y yo estaba en medio de la discusión como si fuese la culpable de que divina pareja se molestara.—No puedo creer que hayas traído a esta mujer a nuestra casa ¿Por qué no le hiciste firmar el divorcio allá? —Ahora comprendo todo, es por el divorcio. ¡Qué estúpida Bianca! ¿Cómo se te ocurrió pensar que el rescate fue porque en verdad quería a Luz? Más aún ¿Cómo pudiste creer que te había traído a su hacienda porque en verdad estaba arrepentido?Él te odia, odia que sea una Vargas, obviamente también odia a Luz, ya que es una mezcla de su sangre con la de un Vargas, y seguramente nos trajo aquí para terminar con lo que hace años atrás no pudo.—¿Nuestra casa? —inquiere irónico—. No eres mi esposa, Leila.—Pronto lo seré, y aunque no lo sea, lo tuyo es mío… no lo olvides.En medio de esa discusión me acerco a él.—Dame los papeles —aparta la mirada de ella y la posa en mí— ¿Dónde están los papeles? —sigo insistiendo—. Dámelos, te los firmo ahor
POV DE ANTÓN.Yo no imaginaba que mi vida cambiaría de un momento a otro cuando una niña de ojos verdes se lanzara a mis brazos y me dijera que me amaba.Bastaron unas horas compartiendo con ella, para que se ganara por completo mi corazón. Ella era parte de mí, de Bianca, de eso que un día sentimos, o que aun siento. Carajo, no puedo negarme a mí mismo lo que siento, lo que ella aun despierta en mí.Mientras estaba en la habitación pensaba, lo analizaba y lo volvía a pensar. Miraba a Luz, la pequeña Luz que concebimos con Bianca, quien nos uniría por siempre, a pesar de que no estuviéramos juntos, estaríamos unidos por ella.No podía imaginar a Bianca con alguien más, no podía si quiera pensar en volverla a dejar ir. Ella tenía que quedarse a mi lado, junto a mí, criando a nuestra hija. Tenía que darme una nueva oportunidad, sé que no la merecía, pero la buscaría, y para eso, debía terminar con ese trato absurdo que hice hace tiempo atrás.La deuda ya la había pagado, solo me mantenía
POV DE BIANCA. Compartimos unas horas felices con Freddy y mi hija, hasta que llegó esa mujer a arruinar nuestra dicha. Se paró en frente de mí, mirándome con desprecio.—¿Se te perdió algo?—¡Te crees la gran señora! ¿No?—No me creo, soy —dije firmemente porque en mis conocimientos, yo era la esposa de Antón, no obstante, Leila se río en mi cara. Soltó grandes carcajadas cuando dije eso.Inma vino a impedir que lo dije, empezó a empujarla para sacarla de casa, no obstante, ella la empujó con más fuerza lanzándola al suelo. Me fui contra Leila, porque a pesar de que no tenía una buena relación con Inma, esta era una mujer mayor, y no merecía ese trato.Fredy llevó a mi hija dentro, para que no presenciara esta pelea.—¿Sabes lo que eres? ¡Nadie! ¡No eres legalmente la esposa de Antón! —estaba diciéndome esas cosas cuando Inma la agarró de los cabellos y la llevó hacia la salida, pero Leila seguía diciendo— ¡Se casó con un juez falso, no eres su esposa!, ¡nunca lo has sido!Fui hasta
POV DE BIANCAMi madre se despide, incluso dejando un beso en mi frente. Se va sin siquiera prestar atención a lo que digo.Le he dicho que estoy secuestrada por quien creía era mi esposo y eso a ella parece no importarle. Otra madre en su lugar, al menos yo por mi hija, haría todo. Si me dijera que el hombre que dice ser su esposo la tiene atrapada, buscaría mil y unas formas para sacarla de ese lugar, incluso me enfrentaría a él. Pero mi madre no lo hace, se marcha, como si nada importante salida de ella se quedará atrás. Me quedo viéndola partir, con un vacío en el pecho, como y hubieran lanzado una bala enorme en mi pecho y dejaran un hueco en él. Perdida en mis pensamientos estoy cuando siento caer la respiración de Antón tras mi cuello, me giro rápidamente provocando que mis pies se tropiecen y mi cuerpo se desequilibre. Abro mis ojos como plato al momento que siento sus manos sostenerme.Su mirada fija, su tacto, su misma respiración o que se yo, impactan mi corazón elevando e
POV DE BIANCA.Por la noche cuando Antón llega mi pequeña corre a sus brazos, les contemplo jugar hasta que se quedan agotados. Caen sobre el mueble, exhaustos, pero aun realizándose cosquillas unos al otro.Mientras ellos se divierten, mi mirada está puesta en su dirección, pero mis pensamientos en lo que hablamos en la mañana. Por un instante lo de volver a empezar no me parece mala idea. Podría olvidar todo, siempre y cuando mi princesa sea feliz. Salgo de los pensamientos cuando una de las empleadas se acerca a informar que, la cena está lista. Antón levanta a Luz, la sube sobre sus hombros, y así se va con ella hacia el comedor. el camina con Luz sentada sobre sus hombros, yo me quedo suspirando y viéndole partir. Mientras me levanto para seguirle, el timbre suena. La misma empleada que nos informó de la cena, se acerca a abrir. Me detengo para ver quién es.—¡Buenas noches! —Frunzo el ceño al ver un policía.—Disculpen ¿A quién buscan? —Inquiere la empleada.—Necesitamos hablar
POV DE ANTÓN.Al salir de prisión me dirijo a casa. Cuando entro lo primero que hago es buscar a mi hija y Bianca, no obstante, me informan que salió y eso me tensa, me llena de pavor. Lo primero que se me ocurre es que ha escapado, porque antes de salir quité la vigilancia para que dejara de sentirse secuestrada.Aunque si la tenía en contra de su voluntad, pero no era un secuestro. Y quise demostrárselo luego de que dijera a los policías que no estaba secuestrada. Pero ahora no estaba, había escapado de casa y no tenía idea de donde podía estar.La sola idea de pensar en eso me vuelve loco. Rápidamente saco el celular y procedo a llamar a Damm. Este me informa que la ha seguido apenas salió, que se encuentra con Walker. Segundos después de saber que está con él, la ira florece en mi interior.Ese miserable está aquí, seguramente había venido aquí para llevarse de vuelta a Bianca. Tenía que impedir que se llevara a mis dos mujeres.Dayana no iba a abandonarme, ella no podía dejarme p
POV DE DAYANA Dos empleadas llegan por órdenes de Antón para ayudarme a dejar esta casa brillando. Al principio me rehúso, sin embargo, al ver que esto necesita una buena limpieza accedo a su ayuda.Mientras ordeno recibo una llamada, no sé quién es ya que el número es desconocido, pero ante la curiosidad y la insistencia decido contestar. Al abrir la llamada descubro que es mi madre, por cómo se escucha parece que lo sucedido a mi padre era grabe.Preocupada llamo a Damm, le pido que pase por la niña y la lleve a Antón. Me sorprende lo rápido que llega, supongo ha venido a dejar a las empleadas o estaba vigilando en mi casa. Lo que sea no es importante ahora.Damm se ofrece a llevarme, no obstante, le pido que lleve a Luz donde su padre y así no me hace preguntas de porque me quedo en un hospital, sobre todo, a quien voy a visitar.Se de sobra que Damm es fiel a Antón, si llegan a saber que mi padre está hospitalizado en ese lugar, seguramente querrán terminar con lo que no pudieron
POV DE BIANCAPreparé la cena para mi hija y luego la acosté a dormir, luego me recosté en la cama dejando que las lágrimas salgan, amaba a Antón, pero no podía volver con él, la forma en que hirió a mi padre era el reflejo de que su venganza aún estaba viva.Quizás me quería para seguir descargando su odio en mí, oh talvez quería acostumbrar a mi pequeña a su presencia y luego desaparecer de su vida dejando su corazoncito roto en mil pedazos.Nunca le di una respuesta al Sr. Walker, su confesión era un motivo menos para salir con él, no me veo lastimando el corazón de alguien, salir con él era darle esperanzas sobre algo que nunca crecería, mientras tenga clavado a otro hombre en el pecho no podría darme esa oportunidad.Al día siguiente Cristina llegó a visitarme, mi amiga me dio un abrazo rompe huesos, trajo algo del mercado y caminamos hacia la cocina, abrió el refrigerador y colocó las cosas dentro.Supuse que no tendrías nada que comer.—Aún no he ido al mercado. —¿Dónde está?