Capítulo 21
Cuando los niños llegaron al auto, saludaron a su madre muy efusivamente y le contaron como fue su día de escuela. Mario José tenía temor de que ellos le dijeran que las clases no habían terminado aún, pero por fortuna no sucedió y todo su cuerpo se relajó cuando ellos por fin tocaron otro tema.

— Mamá, ¿iremos a comer de nuevo con tu jefe?

— No mi amor, después de volver de este lugar nos iremos directo a nuestra casa.

— Si ustedes quieren, yo con mucho gusto los llevo de nuevo a comer lo que a ustedes se les antoje.

— No jefe, no se preocupe. En casa les prepararé lo que ellos quieran.

— ¡Pero mamá, yo quiero hamburguesas de las que salen en la televisión! Porque cada vez que te pedimos que nos hagas, tú nos dices que el dinero no nos alcanza, y si nos compras es una para los dos.

— Hijos, por favor, guarden silencio. —Ella se siente con pena porque sus hijos le están sacando en cara todos sus defectos, delante de la persona menos indicada para conocer sus carencias.

— Haremos rápido
Continue lendo este livro gratuitamente
Digitalize o código para baixar o App

Capítulos relacionados

Último capítulo

Explore e leia boas novelas gratuitamente
Acesso gratuito a um vasto número de boas novelas no aplicativo BueNovela. Baixe os livros que você gosta e leia em qualquer lugar e a qualquer hora.
Leia livros gratuitamente no aplicativo
Digitalize o código para ler no App