Falta poco para el final, los amo gracias por seguirme.
Alexa FernandezLos bebes comienzan a caminar casi al año y tenemos que modificar toda la casa, incluso colocar una reja en la escalera, para que ellos no bajen y se lastimen…Todo es un perfecto caos, debo pasar todo el día pendiente de ellos, por lo menos mientras son un poco más independientes, mis empresas las manejo desde lejos con ayuda de un CEO Amigo de José Luis, no sé qué haría sin él.Recuerdo que José Luis me caía muy mal, todo cambio con el tiempo, demostró ser un amigo fiel, aunque la traición de Williams me demostró que nunca debemos confiar en nadie…Después de tanto tiempo, y de tanta confianza, robo la empresa, Ámbar tiene el cabello largos por los hombros, de no ser por el color de ojos es idéntica a Armado, me frustra demasiado eso, paso tantas cosas y miedos durante el embarazo, para que al nacer sea la copia de él.Los arreglo hasta que quedan como un par de muñequitos de torta, Ángel se queda tranquilo, pero Ámbar se suelta el cabello, no le gusta cargar ningún
Alexa Armando me lleva a cenar en la noche, dejamos los niños con el abuelo, me da pena darle, responsabilidad a ellos. —Al fin están creciendo, ya podremos dedicarnos más tiempo.— Me dice el dándome un beso en la mano —Te ves hermosa.— Me halaga Armando besándome y quitando todo el producto que apenas me coloque, me deja los labios mas rojos que con el labial, sus besos son tan apasionados que me los deja hinchados. —Debemos irnos, para regresar más temprano.— Le sugiero al ver que ve la cama, conozco bien los engranajes de su cabeza. —Ok.— Cede él, y salimos uno al lado del otro, me lleva a mi restaurante favorito —El restaurante está totalmente solo y se escucha una música romántica al fondo, me siento conmovida por ese gesto. —Soy un asco para estas cosas, pero quiero decirte que cada día me haces el hombre más feliz del mundo.— Me confiesa el, y yo lo beso —También soy feliz contigo.— Respondo dándole un pico en los labios, me siento culpable por haberle mentido y ahora n
Alexa CastroLa rabia y el odio que veo en su mirada inyectada de sangre me dejan sin habla, ¡Armando me odia!—¿Cómo pudiste engañarme?¿En que falle?.— Pregunta con la voz quebrada.—Te juro por mis hijos que nunca te engañe.— Respondo cuando logro reaccionar.—¡Todavía tienes el descaro de negarlo!.— Ladra y de un solo manotazo tira todo lo que hay sobre una mesa—El sonido del jarrón al quebrarse hace que me tense de pies a cabeza, se que el nunca me lastimaría, pero tengo miedo ¡Esta furioso!.—¡Es la verdad!, yo te amo, nunca te engañaría—Le digo de forma atropellada.—¿Y cómo le decimos a lo que crece en tu vientre? ¿Es un milagro acaso? Pregunta con un tono burlón, por supuesto que no me cree nada.—Sola dame una oportunidad…Suplico y soy interrumpida por el levantando la mano para que no continúe.—¿Quién es el padre?.— Pregunta con la mirada ensombrecida, y la voz sepulcral, ¡El quiere matar a alguien!.Mi piel se eriza de pies a cabeza, no puede ser que por una confusión yo
Estoy a un mes de haber dado a luz y al fin puedo vivir una vida más o menos normal… Mi abuelo me apoya en todo y siento que la relación con Armando no está del todo bien, si bien no hablamos del tema, el haberle ocultado lo de la vasectomía fracturo la confianza… Alexander es un bebe muy tranquilo, me deja dormir toda la noche, es adorable, casi no llora, sonríe mucho Es fuerte un sobreviviente, paso por cosas que otro no hubiese soportado, mi pequeño es un gigante, pienso arrullándolo en mis brazos. —Necesitas un coche para que no cargues a ese pequeño rufián todo el día.— Reprocha mi abuelo. —Lo vas a malcriar.— Asegura Eli, la nueva esposa del abuelo, si el abuelo se caso hace un par de meses… —Tienen razón pero no puedo evitarlo, paso por tanto.— Les respondo, viendo a mi bebe a los ojos, los gemelos juegan a cierta distancia de nosotros, pero me han hecho sentir que sienten celos de su hermanito —Esta noche debes asistir a la boda con Armando, son socios muy importantes—
Armando El día parecía igual a los demás, sin embargo la vida de Armando y Alexa cambiaria para siempre ese fatídico día ambos quedaron huérfanos y eso unió sus destinos para siempre… Armando, perdió a sus padres siendo solo un niño de ocho años, el mismo día perdió a su abuelo, no porque haya muerto, sino que a partir de ese momento toda la atención de su abuelo se centro en Alexa, la otra huérfana que ni siquiera lleva su sangre..Creyó que con el tiempo las cosas mejorarían, en la secundaria conoce a María, una joven que lo hizo feliz por primera vez, lamentablemente todo termino de la peor manera, cómo todo lo bueno en su vida. —Armando, su abuelo lo espera en su oficina. — Informa una empleada domestica, apenas llega a la casa del colegio. Inmediatamente, avanza hasta la oficina y apenas abre la puerta el abuelo en voz aterradoramente baja pregunta: —Me entere hoy, que tienes novia ¿Cuándo pensabas decírmelo?— Armando se sorprende ya que nunca ha mostrado interés en su vida
Alexa Castro Después de esa noche abandono el hotel, en lugar de volver a Estados Unidos al terminar la luna de hiel, compro un apartamento pequeño y se matriculo en la universidad estadal, validando sus estudios previos. —Le comunico al abuelo su decisión y aunque, no estuvo de acuerdo lo respeto, y fue así que decidía quedarse en Paris. Solo para no volver a toparse con Armando hasta que lo haya sacado para siempre de su corazón y de su mente. La mente juega malas pasadas, fragmentos de la noche pasan por su cabeza y siente mucha vergüenza consigo misma, nunca había sido tan irresponsable. Al mes de casados, puede ver fotos de Armando, con varias mujeres, ¡gracias a Dios nadie se entero de su boda! Sería el hazmerreir de sus amigas. El siguió siendo él mismo inmaduro y promiscuo de siempre, ella tiene amigas que no saben que ellos están casados, y le cuentan sus aventuras con él, ella siempre mantiene una sonrisa y finje que no le duele. Armando toma el control de la empresa
Alexa CastroNadie la espera en el aeropuerto, Nueva York sigue siendo tal como lo recuerda… Trata de detener un taxi y no puede.— ¿Preciosa quieres un aventón?— Pregunta un hombre desde un convertible.—Te lo agradezco. — Responde de inmediato a lo que el sonríe triunfante, debe admitir que es lindo pero no es mi tipo, y la conciencia responde ¿Cuál es tu tipo? El imbécil de Armando…—¿A donde te llevo preciosa?. —— ¿Me puedes llevar al hospital general?——Claro, señorita. — Murmura el tipo, ya menos juguetón acepto solo por la desesperación.—No tiene idea cuanto le agradezco, estoy muy preocupada por mi abuelo. —Le comenta—Nena toma mi tarjeta por si necesitas algo, tienes un amigo. — Me ofrece él. Carlos Quintana Lee ella —Un placer Carlos, soy Alexa Castro a tu orden. — Le dice limpiándose una lágrima, está muy asustada por la salud del abuelo.—Lamento lo de su abuelo, preciosa. — Dice conduciendo hasta el hospital.—Gracias. — Expresa al bajarse del auto.—Cuando mejore tu
Alexa Castro Apenas pone un pie en la casa empujando la silla de ruedas de mi abuelo — ¿Qué demonios haces aquí?— Chilla Amanda con altanería, esa mujer no conoce límites, francamente Alexa no esperaba está bienvenida.—Es una de las dueñas de esta casa, si no te gusta, te puedes marchar — Responde el abuelo defendiendo a su nieta, levantándose de la silla, muy molesto, no va a permitir que humillen a su nieta ella es la niña de sus ojos—No volverá a ocurrir, siéntate por favor, no debes alterarte. — Le dice nerviosa, Alexa, su abuelo aún está delicado de salud—Lo siento. — Se disculpa falsa Amanda, ambas se odian.—Lo único que traes es desgracia. — Se queja Armando nuevamente. rueda los ojos aburrida por la estupidez que acaba de decir "su amado esposo" cuando se quito el abrigo, El no puede ocultar su admiración.— Te van a salir arrugas, relajate — Susurro, dejándolo nuevamente sin palabras, ella no regreso con intención de confront